El Vaticano pide garantizar a las v¨ªctimas de abusos la informaci¨®n de sus casos y que sean indemnizadas

EL PA?S puso en marcha en 2018 una investigaci¨®n de la pederastia en la Iglesia espa?ola y tiene una base de datos actualizada con todos los casos conocidos. Si conoce alg¨²n caso que no haya visto la luz, nos puede escribir a: abusos@elpais.es. Si es un caso en Am¨¦rica Latina, la direcci¨®n es: abusosamerica@elpais.es.

©¤©¤©¤©¤©¤©¤©¤©¤©¤©¤©¤

El Vaticano ha realizado esta ma?ana una primera radiograf¨ªa cr¨ªtica y sistem¨¢tica de su respuesta al esc¨¢ndalo de la pederastia en la Iglesia cat¨®lica, y ve muchas carencias. Es el primer informe que realiza, a los 10 a?os de ser creada por el papa Francisco, la Pontificia Comisi¨®n para la Protecci¨®n de Menores, que se?ala principalmente la opacidad que a¨²n persiste en la Iglesia, tanto en el acceso de las v¨ªctimas a la verdad ¡°como en los procesos can¨®nicos, fuente de retraumatizaci¨®n¡±. Pide tambi¨¦n ¡°aclarar las competencias¡± de cada dicasterio del Vaticano, para acabar con la lentitud y la confusi¨®n de los procesos can¨®nicos, as¨ª como ¡°agilizar y acelerar el proceso de dimisi¨®n del cargo¡± de los acusados, ¡°donde est¨¦ justificado¡±. Del mismo modo, recalca ¡°la necesidad de estudiar los da?os y la pol¨ªtica de resarcimiento para promover una aproximaci¨®n rigurosa a las reparaciones¡±. De forma ambiciosa, la comisi¨®n llega a proponer que el Papa redacte una enc¨ªclica espec¨ªfica sobre los abusos y la protecci¨®n de menores y adultos vulnerables.

La comisi¨®n, tambi¨¦n formada por v¨ªctimas y cuya misi¨®n es supervisar la respuesta de la Iglesia al esc¨¢ndalo, ha tardado mucho tiempo en hacer ver el fruto de su trabajo, tambi¨¦n por las resistencias internas en la propia Iglesia que, de hecho, llevaron al abandono de alguno de sus miembros de forma pol¨¦mica. Por esa raz¨®n, este documento de 95 p¨¢ginas, que promete ser anual a partir de ahora, era muy esperado. No incluye cifras de incidencia, aunque promete tenerlas en las pr¨®ximas entregas, pero se?ala muchas lagunas y tareas pendientes. La principal, se?ala, sigue siendo saber la verdad. Incluso para la propia comisi¨®n, que pide m¨¢s transparencia para acceder a la informaci¨®n estad¨ªstica de la Congregaci¨®n de Doctrina de la Fe, el organismo disciplinario de la Santa Sede que centraliza los expedientes abiertos.

La comisi¨®n pide facilitar el acceso de las v¨ªctimas a toda la informaci¨®n de sus casos y de los procesos abiertos, tanto en la Iglesia de cada pa¨ªs como en los organismos vaticanos, e incluso propone crear una especie de defensor de la v¨ªctima, un ombudsman. ¡°Estamos muy preocupados por esta dificultad de las v¨ªctimas¡±, ha admitido el cardenal estadounidense Sean Patrick O¡¯Malley, presidente de la comisi¨®n, en la rueda de prensa de presentaci¨®n del informe hoy martes en el Vaticano. ¡°El dicasterio de Doctrina de la Fe dice a las v¨ªctimas que se deber¨ªa ir a la Iglesia local, pero vemos que eso no est¨¢ funcionando y hemos iniciado esta conversaci¨®n para ver si podemos iniciar algunas estructuras que puedan ayudar en esto¡±, explic¨®. Es decir, de momento es solo una propuesta, dentro de la potestad de la comisi¨®n de hacer recomendaciones.

En esta l¨ªnea, el informe se?ala ¡°la fragmentaci¨®n de las responsabilidades¡± en el laberinto burocr¨¢tico que afrontan las v¨ªctimas, y pide ¡°un protocolo inequ¨ªvoco y compartido¡±. Exige igualmente que se agilice la destituci¨®n de sacerdotes y religiosos acusados de abusos con procedimientos disciplinares ¡°eficientes¡±. ¡°Con demasiada frecuencia, en el pasado, los l¨ªderes de la Iglesia han tomado decisiones ad hoc, in modo puramente discrecional y sin alguna referencia a par¨¢metros aceptables con una consecuente mala gesti¨®n de los casos¡±, critica la comisi¨®n.

El documento es especialmente cr¨ªtico con c¨®mo se realizan los procedimientos can¨®nicos, ¡°que pueden ser dif¨ªciles, lentos e incluso fuente de continua victimizaci¨®n con su tendencia a centrarse sobre todo en las acusaciones y en los culpables m¨¢s que en las necesidades de las v¨ªctimas¡±. En este sentido, la comisi¨®n insiste en ¡°la importancia del resarcimiento¡±, uno de los puntos de debate ahora mismo en Espa?a, aunque subraya que a veces ¡°son incluso m¨¢s importantes¡± otros aspectos, como ¡°el reconocimiento de los errores, las excusas p¨²blicas y otras formas de verdadera cercan¨ªa a las v¨ªctimas¡±.

En concreto, el informe advierte que no se debe mezclar la reparaci¨®n de las v¨ªctimas con la rehabilitaci¨®n del agresor, algo en lo que a veces la Iglesia ha insistido, casi coloc¨¢ndolos a la misma altura, y que el informe rechaza al hablar de la necesidad de reparaci¨®n. ¡°Las v¨ªctimas/supervivientes no deber¨ªan ser obligadas ni manipuladas en encuentros o contactos con los perpetradores, porque su restauraci¨®n espiritual no es responsabilidad de las v¨ªctimas/supervivientes¡±, detalla el documento.

El informe da los primeros pasos en su misi¨®n de auditor¨ªa cr¨ªtica de toda la estructura de la Iglesia, incluidos dicasterios vaticanos, y esto es algo que no se hab¨ªa hecho. Por eso, seguramente en algunos casos levantar¨¢ ampollas. Da los primeros pasos porque solo incluye an¨¢lisis del trabajo de algunos pa¨ªses y entidades eclesi¨¢sticas: 16 pa¨ªses, dos ¨®rdenes religiosas y una organizaci¨®n, C¨¢ritas Internacional. Para recoger informaci¨®n se ha basado en las visitas ad limina, las que hacen los obispos de cada pa¨ªs al Papa cada cinco a?os, momento en el que la comisi¨®n puede reunirse con ellos. Por eso en el informe aparecen solo cuatro conferencias episcopales (M¨¦xico, Colombia, B¨¦lgica y Pap¨²a Nueva Guinea e Islas Salom¨®n), m¨¢s otros 12 pa¨ªses africanos. Su pretensi¨®n es analizar las 114 conferencias episcopales del mundo, a un ritmo de 15 ¨® 20 al a?o, y espera terminar esta radiograf¨ªa en cinco o seis a?os. En este primer informe, se?ala que mientras en algunos pa¨ªses se ha avanzado, otros est¨¢n ¡°al inicio del ejercicio de asunci¨®n de responsabilidades¡± y, en cambio, en otros hay ¡°una preocupante falta¡± de respuestas.

En un an¨¢lisis por continentes y sin citar lugares concretos, en la parte referente a Europa el informe se?ala que en varios pa¨ªses ¡°se registra una persistente ausencia de estad¨ªsticas fiables sobre la entidad de los abusos¡±. Es lo que sucede en el caso de Espa?a, donde la propia Conferencia Episcopal ha admitido ¡°un error muy significativo¡± en su informe Para dar luz, que se pretend¨ªa exhaustivo y en realidad se ha revelado lleno de lagunas. Otros problemas para las v¨ªctimas que detecta la comisi¨®n son ¡°el estigma social, la falta de mecanismos de denuncia accesibles, la falta de un seguimiento dado a las denuncias, frustraci¨®n de las v¨ªctimas/supervivientes por la gesti¨®n de sus casos por parte del sistema can¨®nico¡±. ¡°Grupos de v¨ªctimas refieren que en algunos pa¨ªses la reputaci¨®n de la Iglesia parece tener prioridad sobre la protecci¨®n de las v¨ªctimas/supervivientes¡±, concluye el documento.

Juan Carlos Cruz, miembro de la comisi¨®n, es v¨ªctima de abusos en Chile y uno de los activistas que lider¨® la denuncia del esc¨¢ndalo en este pa¨ªs, y por eso su punto de vista del trabajo realizado era m¨¢s relevante en la rueda de prensa. ¡°Yo no estar¨ªa en esta comisi¨®n ni me creer¨ªa tanto al papa Francisco, ni al cardenal, ni a la comisi¨®n, si de verdad no se estuviera tratando de hacer algo reparador por todos los que han sufrido abusos¡±, ha explicado.

Cruz no ha dejado de hacer menci¨®n a las desilusiones y a los problemas que ha encontrado: ¡°Estos a?os he visto todas estas resistencias, en la Curia y en la iglesia local, es una de las cosas que m¨¢s me ha impactado, ha sido una cruz para m¨ª (¡­) pero sin duda he visto tambi¨¦n muchos cambios significativos (...) S¨ª, ciertamente faltan cosas por hacer, es necesario una gesti¨®n cada vez m¨¢s eficaz, pero tambi¨¦n constatamos que ha habido una apertura. (...) El informe no es perfecto, pero es un esfuerzo sincero de querer eliminar esta peste de la Iglesia¡±. Ha asegurado que ¡°muchas personas est¨¢n poniendo luz donde otros querr¨ªan solo oscuridad¡± y ha animado a las v¨ªctimas a que cuenten sus historias. ¡°La gente se enoja cuando se dice que esto es la punta del iceberg, pero lo es¡±, ha concluido.