El cardenal Cipriani dice que es inocente de las acusaciones de pederastia y arremete contra el Papa por castigarle ¡°sin haber sido escuchado¡±

EL PA?S puso en marcha en 2018 una investigaci¨®n de la pederastia en la Iglesia espa?ola y tiene una base de datos actualizada con todos los casos conocidos. Si conoce alg¨²n caso que no haya visto la luz, nos puede escribir a: abusos@elpais.es. Si es un caso en Am¨¦rica Latina, la direcci¨®n es: abusosamerica@elpais.es.

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El cardenal peruano Juan Luis Cipriani, apartado por el Papa en 2019 y castigado con el exilio y otras medidas restrictivas tras ser acusado de pederastia, ha replicado que es inocente y ataca a Francisco por la decisi¨®n: asegura que se le impusieron estas penas ¡°sin haber sido escuchado, sin haber sabido m¨¢s y sin que se abriera un proceso¡±. Lo sostiene en una carta enviada hoy a este diario por correo electr¨®nico, despu¨¦s de que EL PA?S desvelara el caso este s¨¢bado. Este peri¨®dico intent¨® sin ¨¦xito recabar su versi¨®n de los hechos desde el mi¨¦rcoles por la tarde, pues el Opus Dei, al que pertenece desde hace 62 a?os aleg¨® que no pod¨ªa ponerse en contacto con ¨¦l porque ¡°no depende del Opus Dei, est¨¢ incardinado en la Santa Sede¡±.

Por el contrario, el vicario regional de la Obra en Per¨², ?ngel G¨®mez-Hortig¨¹ela, ha divulgado un comunicado de tono muy distinto pidiendo disculpas a la v¨ªctima por no haberla atendido cuando acudi¨® a verle en 2018, tal como relat¨® a este diario: ¡°Pido perd¨®n de todo coraz¨®n si no he sabido atender con plena acogida a una persona que deseaba ser escuchada. En 2018, ante la solicitud de una entrevista con el denunciante, sab¨ªa que no pod¨ªa interferir en una acusaci¨®n formal ya iniciada ante la Santa Sede, que es la v¨ªa que corresponde cuando se trata de un cardenal. (...) Hoy me doy cuenta de que podr¨ªa haberle ofrecido una acogida personal, humana y espiritual¡±.

Cipriani, que fue arzobispo de Lima entre 1999 y 2019, confirma la informaci¨®n publicada, pero asegura sobre las acusaciones del denunciante que ¡°los hechos que describen son completamente falsos¡±. Un hombre de 58 a?os le acusa de haber abusado de ¨¦l cuando ten¨ªa entre 16 y 17 a?os en 1983 en un centro del Opus Dei en Lima. Afirma que durante la confesi¨®n le hac¨ªa tocamientos en las nalgas por debajo de la ropa, le acariciaba y le daba besos. Esta persona mantiene que lo cont¨® entonces a responsables de la Obra, pero no hicieron nada. El vicario de Per¨² de la entidad reitera hoy en su comunicado que ¡°no hay registro de ning¨²n proceso formal¡± en esa fecha, pero no descarta que se produjera la denuncia: ¡°En esa ¨¦poca no se ten¨ªa la misma conciencia que hoy sobre los procedimientos m¨¢s adecuados para acompa?ar a los implicados¡±. Admite que ¡°hoy ser¨ªa imposible que una denuncia quede sin registro¡±.

En 2018 esta persona decidi¨® escribir al Papa con el relato de lo ocurrido, animado por la eclosi¨®n del esc¨¢ndalo de abusos en Chile y las medidas dr¨¢sticas de Francisco en ese pa¨ªs. El Pont¨ªfice actu¨® de inmediato, envi¨® a un sacerdote de confianza a reunirse con el denunciante y recabar la informaci¨®n. Adem¨¢s ya hab¨ªa llegado otra acusaci¨®n contra el cardenal en 2002, que no tuvo recorrido. El Papa dio credibilidad a las acusaciones y forz¨® el retiro de Cipriani, que en diciembre de ese a?o cumpl¨ªa 75 a?os y, por praxis, estaba obligado a presentar su renuncia a esa edad. Normalmente el Pont¨ªfice no la acepta, deja pasar unos a?os, pero en este caso la acogi¨® en el momento y lo ces¨®. Luego le castig¨® con el exilio y le prohibi¨® llevar s¨ªmbolos cardenalicios y hacer declaraciones p¨²blicas.

Sin embargo, el cardenal Cipriani, que era uno de los m¨¢ximos exponentes de la ultraderecha cat¨®lica latinoamericana, se enfrenta ahora p¨²blicamente a las decisiones del Papa y rechaza c¨®mo llev¨® el caso: ¡°No he cometido ning¨²n delito ni he abusado sexualmente de nadie ni en 1983, ni antes, ni despu¨¦s¡±. Despu¨¦s hace su reconstrucci¨®n de lo ocurrido, que coincide con lo publicado en este diario: ¡°En agosto de 2018 fui informado de que hab¨ªa llegado una denuncia que no se me entreg¨®. A continuaci¨®n, sin haber sido escuchado, sin haber sabido m¨¢s y sin que se abriera un proceso, el 18 de diciembre de 2019 el Nuncio Apost¨®lico me comunic¨® verbalmente que la Congregaci¨®n para la Doctrina de la Fe me hab¨ªa impuesto una serie de penas limitando mi ministerio sacerdotal y pidiendo que tuviera una residencia estable fuera del Per¨². Tambi¨¦n se me pidi¨® que guardara silencio, cosa que he hecho hasta ahora¡±.

El prelado opina que ¡°resulta grave que se publique de manera parcial informaci¨®n que parece proceder de documentaci¨®n reservada por la Santa Sede que ni siquiera yo tengo en mi poder¡±. En cuanto a la v¨ªctima, declara que ¡°a pesar del dolor que todo esto me provoca, no guardo rencor al acusador, rezo por ¨¦l y por todas las personas que han sufrido abusos por parte del clero cat¨®lico, pero reitero mi completa inocencia¡±. ¡°Por desgracia, no es la primera vez que se acusa a un cardenal en falso, con relatos llenos de detalles escabrosos¡±, afirma.

Traslado a Madrid

Cipriani a?ade que el 4 de febrero de 2020 tuvo una audiencia con el Papa y ¡°me permiti¨® reanudar mis tareas pastorales¡±. ¡°As¨ª lo demuestra mi amplia actividad pastoral realizada durante estos a?os, predicaci¨®n de retiros espirituales, administraci¨®n de sacramentos, etc. En estos a?os fuera de Lima viv¨ª en Roma dedicado a mis trabajos como cardenal miembro del Dicasterio para la Causa de los Santos hasta que cumpl¨ª los 80 a?os y me retir¨¦ de toda ocupaci¨®n en la curia romana y me traslad¨¦ a Madrid¡±, resume.

El cardenal reitera en su escrito su ¡°rechazo y repulsa total a los abusos sexuales a menores y personas vulnerables¡± y su compromiso ¡°con la lucha de la Iglesia para erradicar esta lacra, siguiendo las indicaciones de Juan Pablo II, Benedicto XVI y el especial liderazgo del papa Francisco, poniendo en el centro a las v¨ªctimas¡±.