Pap¨¢ Microsoft y el sexo de los ordenadores
Remedios Zafra analiza en Netianas la situaci¨®n de la mujer en Internet
"Me niego a pensar que las mujeres hayamos nacido con una predisposici¨®n tecnof¨®bica". Remedios Zafra rebate esta y otras afirmaciones sobre la mujer y su relaci¨®n con las nuevas tecnolog¨ªas en Netianas: N(h)acer mujer en Internet (Lengua de Trapo), un ensayo que le ha valido la concesi¨®n del III Premio de Ensayo Caja Madrid. Profesora de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Sevilla y autora de obras como Las cartas rotas. Espacios de igualdad y feminizaci¨®n en Internet y Habitar en (punto)net, esta cordobesa aborda en su ¨²ltimo trabajo las diferentes formas en que la Red perpet¨²a los modelos de jerarquizaci¨®n patriarcal del mundo off line y las distintas batallas que tiene que librar la mujer para redefinir su lugar en Internet. Zafra - Premio Nacional de Ensayo Carmen de Burgos 2000 y Premio de Investigaci¨®n de la C¨¢tedra Leonor de Guzm¨¢n 2001, entre otros - aboga por "destruir el g¨¦nero de la tecnolog¨ªa" y apuesta "por una feminizaci¨®n que implique no sustituir los roles sino subvertir el modelo".
"Las industrias inform¨¢ticas siguen siendo territorios eminentemente masculinos"
"Internet facilita esa verdadera democratizaci¨®n del arte"
"Bill Gates bromeaba sobre la mayor capacidad de trabajo de su hermana cuando eran peque?os"
El t¨¦rmino Netianas define las diferentes situaci¨®n/situaciones de la mujer en Internet..
El origen de la palabra fue fruto de un juego, de hecho Netianas naci¨® como adjetivo y no como nombre, pero evolucion¨® hasta bautizar a este mito feminista del que trato en el libro. Estaba buscando una palabra que pudiera ce?irse al territorio concreto de Internet, al considerar que las caracter¨ªsticas de la red son singulares respecto a otros medios tecnol¨®gicos, me interesaba tambi¨¦n un t¨¦rmino con g¨¦nero.
?Un nuevo mito para un nuevo medio?
El libro est¨¢ concebido como un ensayo tiene tambi¨¦n algo de ficci¨®n, de ficci¨®n ir¨®nica, pol¨ªtica, por supuesto. Las Netianas, como otros mitos pol¨ªticos, son gui?os imaginativos necesarios para las mujeres, ¨²tiles para pensarnos en los nuevos territorios donde, cada vez m¨¢s, habitamos. Ante la escasez de modelos femeninos hist¨®ricos, nuestros modelos est¨¢n por hacer. Inventarse un mito para el feminismo no es como inventarse un personaje sin m¨¢s, la creaci¨®n se hace desde una posici¨®n cr¨ªtica.
Adem¨¢s del factor socioecon¨®mico, denuncia que hay m¨²ltiples elementos que impiden que Internet sea un medio horizontal y desjerarquizado.
A simple vista lo parece pues la comunicaci¨®n opera de todos a todos (siempre que tengamos una m¨¢quina on line), sin embargo hay nuevas formas de jerarquizaci¨®n y por lo tanto de censura, una de ellas es la saturaci¨®n de informaci¨®n que presenciamos en Internet. Aunque podemos percibir este exceso entr¨®pico como una magn¨ªfica oportunidad para la pluralidad y aparentemente para la democracia, la saturaci¨®n que genera pone en manos de nuevos sistemas de organizaci¨®n el acceso a los mismos y, en consecuencia, su orden y visibilidad. De manera que los primeros, los que aparecer¨¢n en un primer lugar "Google" (por ej.), depender¨¢n de los creadores de estas puertas de acceso y estructuraci¨®n web. Si los gestores de estos portales empiezan a primar a los que paguen o a los sites que tienen m¨¢s visitas obviamente jerarquizan la informaci¨®n, y no digo que esto sea negativo, s¨®lo que esa "organizaci¨®n" est¨¢ cada vez m¨¢s en manos de empresas privadas y del capital. Si los criterios atienden, por ej., al n¨²mero de visitas puede que los primeros en aparecer en todo listado relacionado con la mujer sean los portales dedicados al sexo porque en Internet aun sin cuerpo las mujeres seguimos siendo muy "cuerpo".
Un circulo vicioso?
Romper tendencias es dif¨ªcil y no por el hecho de ser un medio relativamente joven y basarse en una estructura horizontal las formas de organizarnos son distintas, estamos presenciando c¨®mo el sistema de jerarquizaci¨®n de valores se repite y a veces se amplifica en Internet. Eso s¨ª, tambi¨¦n hay lecturas muy positivas, y cada vez existen m¨¢s proyectos web gestionados por mujeres con las facilidades que supone: tanto en la divulgaci¨®n como en la publicaci¨®n independiente.
La Red como "punto de fuga, jard¨ªn secreto, agente de multiplicidad?" ?En que fese se encuentra la mujer en relaci¨®n con la Red y su propia identidad?
Creo que las mujeres ven en la red un espacio cargado de posibilidades. En relaci¨®n a la identidad, las posibilidades para liberarse de las presiones del cuerpo en sus contactos personales, sobre todo porque vivimos un momento donde hombres y mujeres estamos dando forma a nuestras nuevas formas de relacionarnos a distancia. El modelo de masculinidad tradicional tambi¨¦n est¨¢ en crisis y por ello pienso que la Red opera como un laboratorio de experimentaci¨®n para todos. Pasamos por una etapa de extremos: por una parte identidades que acent¨²an su sexualidad y se escudan en la m¨¢scara Internet para enfatizarla m¨¢s a¨²n y, por otro lado, proliferan identidades ef¨ªmeras, imaginativas, no excluyentes, donde conviven las identidades que hemos construido sobre el cuerpo y nuevas que inventamos.
M¨¢s all¨¢ de la Red, afirmas que "el ordenador no es una m¨¢quina neutral".
El ordenador tiene g¨¦nero y como tal no es neutral. Las m¨¢quinas han sido tradicionalmente creadas por hombres y en muchos casos manejadas por mujeres (tecleadoras, secretarias?). Sin embargo, este manejo siempre ha estado limitado a los estadios m¨¢s bajos de la producci¨®n y a tareas mec¨¢nicas, nunca a la labor creativa ni de liderazgo de la tecnolog¨ªa. La inform¨¢tica y la tecnolog¨ªa est¨¢n creadas desde una ideolog¨ªa considerada tradicionalmente como objetiva y condecorada en consecuencia como seria. Los criterios para enfrentarnos a la ciencia y las tecnolog¨ªas y plantear o no su parcialidad siempre parecen estar limitados por lo que hist¨®ricamente se nos ha mostrado como "ciencia objetiva".
Tampoco la industria abre caminos de igualdad
Las industrias inform¨¢ticas siguen siendo territorios eminentemente masculinos, tambi¨¦n las carreras de ciencias y las tecnol¨®gicas. El poder capitalista descansa en pilares como Microsoft, en absoluto neutrales. Toda industria que se someta a la velocidad por enriquecerse m¨¢s arrastra formas de dominaci¨®n. Para ir m¨¢s r¨¢pido necesitan precarizar y, sobre todo, necesitan estabilidad (mantener valores y roles). Cualquier apuesta por la igualdad en las industrias tecnol¨®gicas pasa por una resistencia a la velocidad y por una apuesta social. Hay miedo por perder el tren, no llegar el primero se vive como algo insufrible. Es necesario resistir a esta visi¨®n, ser m¨¢s creativos y re-priorizar desde una inversi¨®n por la igualdad. Desde el feminismo enfrentarnos con iron¨ªa a esta situaci¨®n -y a Pap¨¢ Microsoft - suele ser frecuente, por lo que de subversivo tiene.
?El inform¨¢tico, hombre, desemboca en su profesi¨®n casi como una prolongaci¨®n de su hobby?
La sociedad actual europea, en fraternidad con la norteamericana, est¨¢ dise?ada para que los hobbies m¨¢s habituales de los chicos adolescentes (hobbies tecnol¨®gicos) sean tambi¨¦n futuros trabajos tecnol¨®gicos. Los chicos pueden convertir esa afici¨®n en un trabajo, adem¨¢s en un sector de poder. El caso de Bill Gates y su compa?ero Paul Allen es paradigm¨¢tico. Le¨ª una vez c¨®mo el mismo Bill Gates bromeaba sobre la mayor capacidad de trabajo de su hermana cuando eran peque?os y c¨®mo al convertirse en adolescente mengu¨® porque empez¨® a interesarse por los chicos? Sinceramente, me niego a pensar que las mujeres hayamos nacido con una predisposici¨®n tecnof¨®bica.
?Los videojuegos tienen parte de culpa?
La escisi¨®n entre chicos y chicas se produce, entre otros motivos, porque la industria del videojuego es eminentemente masculina y las tem¨¢ticas de los videojuegos contin¨²an apoy¨¢ndose en tramas particularmente violentas y de acci¨®n que no siempre interesan a las chicas. Resulta curioso c¨®mo a finales de los a?os noventa esta sobredosis de testosterona, esta imagen estereotipada del guerrero y del piloto que inundaba la industria fue sometida a una inyecci¨®n de mujeres hero¨ªnas que, lejos de equilibrar una situaci¨®n de cara a generar modelos de diversidad sexual y atraer a posibles videojugadoras, no hizo sino acentuar el perfil de hombre joven blanco joven y heterosexual como consumidor y programador mayoritario.
?Por donde habr¨ªa que empezar para reconstruir el g¨¦nero de la tecnolog¨ªa?
Reconstruir el g¨¦nero de la tecnolog¨ªa supondr¨ªa terminar con el g¨¦nero de la tecnolog¨ªa, liberar a la alta tecnolog¨ªa de la asignaci¨®n estructural masculina y liberar a las mujeres de su trabajo de maquiladoras y secretarias por antonomasia. Hay que desjerarquizar el sistema, apostar por una feminizaci¨®n que implique no sustituir los roles sino subvertir el modelo, lo que en Netianas defiendo como una nueva feminizaci¨®n de la cultura. Feminizaci¨®n que pasa adem¨¢s por liberar a los hombres y a las mujeres de los roles hist¨®ricos limitados a lo biol¨®gico. Las reformas que en estos momentos se est¨¢n dando en nuestro pa¨ªs son fundamentales para este cambio, el matrimonio entre homosexualesy el hecho de que puedan adoptar ni?os como pareja no s¨®lo contribuye a reconocer un derecho constitucional para tod@s, sino que para las mujeres tambi¨¦n inicia una liberaci¨®n de roles que parec¨ªan exclusivos del sexo, como criar a los hijos.
Da un papel fundamental en este proceso al arte en la Red. ?No es algo que le queda muy lejos a la mayor parte de la gente, algo minoritario y elitista?
El arte ha cambiado mucho en las ¨²ltimas d¨¦cadas pero a la instituci¨®n art¨ªstica capitalista le interesa seguir vendiendo esa idea de elitizaci¨®n y ese car¨¢cter minoritario (la exclusividad vende y sobre todo vende m¨¢s caro) y, es cierto, parece que lo consigue. No obstante a mi modo de ver las m¨¢s loables pretensiones del arte de los ¨²ltimos tiempos lo acercan al compromiso social, Internet facilita esa verdadera democratizaci¨®n del arte. Creo que cualquiera de nosotros puede desde el arte, o si lo prefieres llam¨¦mosle creatividad, usar el medio para repensar las cosas, lanzar nuevos modelos abiertos, nuevas preguntas? sin necesidad de que nuestro trabajo creativo se venda por miles de euros y est¨¦, por tanto, supeditado al mercado y a la instituci¨®n.
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