Sietes, un pueblo 'techie' gracias a Windows 7

Que la tecnolog¨ªa es cada vez m¨¢s f¨¢cil es una realidad. Que quedan todav¨ªa muchos ciudadanos por hacerse con ella, tambi¨¦n. Microsoft quiere romper el clich¨¦ existente con su sistema operativo anterior, el denostado Vista, mostrando las bondades, mejoras y opciones de su nueva apuesta con gente sin ideas preconcebidas.

En Sietes, un peque?o pueblo que depende de Villaviciosa, hay s¨®lo 49 habitantes censados. La multiplicaci¨®n de 7 por 7. Era el lugar ideal para una experiencia que ha dado sus frutos.

Pepe Garc¨ªa, aficionado a la fotograf¨ªa y el monta?ismo, y Jes¨²s Quiroga, algo m¨¢s t¨ªmido que su vecino, son los mejores exponentes de que se puede acceder a la inform¨¢tica sin demasiado esfuerzo.

"No hab¨ªa tocado nunca antes un ordenador, pero me parece muy pr¨¢ctico", asegura "Quiroga", nombre con que le llaman los paisanos. Tras hacer un dibujo con los dedos y mostrar c¨®mo se maneja con una pantalla t¨¢ctil entre ventanas mostr¨® sus preferencias: "Es m¨¢s f¨¢cil sin rat¨®n, as¨ª vas de una cosa a otra y lo ves directamente".

Para Pepe, que ya usaba el ordenador pero sin los resultados deseados, las mejoras de Windows 7 tienen que ver con la intuici¨®n: "Ahora hago lo que ten¨ªa pensado pero sin perder tiempo. Sin tener que aprender". Y ense?¨® como hacer una fotograf¨ªa panor¨¢mica de todo el valle uniendo varias con s¨®lo cuatro clics en pantalla.

M¨¢s all¨¢ de pintar algunas de las casas con los colores del nuevo producto del gigante de Redmond, o de poner banderolas y gaiteros, o ense?ar la diferencia entre un h¨®rreo y una panera, Sietes ha sorprendido por su cercan¨ªa y sencillez.

En el coraz¨®n del valle de la sidra, hoy es un d¨ªa festivo, los que trabajan por cuenta ajena, lo han pedido libre para poder vivir la fiesta. Lo sienten como si les hubiera tocado 'el Gordo' de la loter¨ªa, en un v¨ªdeo de promoci¨®n una lugare?a, lo dejaba claro: "hemos tenido mucha suerte. Mira que si nos llegamos a llamar seises, o cincos..."

Aunque si algo destaca I?igo Asiain Sancho, sumergido en el pueblo durante casi un mes, es que algo debe quedar en el pueblo. "No queremos que sea como Bienvenido Mr. Marshall, sino que sea el punto de partida para el uso de la tecnolog¨ªa en la vida cotidiana y que adem¨¢s lo hagan de manera f¨¢cil y natural", insiste este responsable de M¨¢rketing.

Juan Carlos Fern¨¢ndez y Ver¨®nica Volocco destacaron algunas de las novedades de Windows 7, al margen de la facilidad de uso probada con los lugare?os. Entre los puntos fuertes se encuentra, y lo mostraron, que el ordenador port¨¢til pasar¨¢ hibernar con s¨®lo cerrar la tapa. Algo que tendr¨ªa que haber sido as¨ª siempre, pero que sol¨ªa convertirse en una acci¨®n frustrada. Destacaron tambi¨¦n las alianzas con fabricantes de software para que den soporte y funcionen los dispositivos desde el principio; no es balad¨ª esta apreciaci¨®n porque fue una de las claves del fracaso de Vista.

Se hizo hincapi¨¦ en la posibilidad de usar Windows 7 casi en cualquier maquina del mercado actual, incluso en netbooks, sin problemas. Aunque las primeras acciones de mercado se centran en ordenadores nuevos, la intenci¨®n de la compa?¨ªa es promover la actualizaci¨®n de PCs con XP y Vista; estos ¨²ltimos lo har¨¢n de manera m¨¢s sencilla y sin tener que borrar su datos.

Lo que quedar¨¢ en Sietes para siempre ser¨¢ el recuerdo y un centro tecnol¨®gico en el antiguo casino. El lugar de intercambio de cultura y baile en el siglo XX tendr¨¢ en el siglo XXI una veintena de ordenadores con conexi¨®n a la red, cortes¨ªa de Telef¨®nica y HP. A este "Centro Conecta", promovido por la Fundaci¨®n Esplai, podr¨¢n asistir a clases el resto de habitantes del valle en que se venera la sidra.

El hasta ahora Museo del H¨®rreo pasa a ser un punto de encuentro para seguir aprendiendo.