Un juez tumba la demanda de blogueros que reclamaban dinero a 'The Huffington'
Los denunciantes, que escrib¨ªan sin remuneraci¨®n, exig¨ªan beneficiarse de la millonaria venta del medio digital al gigante AOL. "Nadie los forz¨® a entregar su trabajo", afirma el magistrado

Un juez federal de Estados Unidos ha rechazado la denuncia impuesta por un conjunto de blogueros y columnistas de The Huffington Post contra AOL, la empresa propietaria de este medio digital. Los colaboradores exig¨ªan una compensaci¨®n de 105 millones de d¨®lares (unos 78 millones de euros) por sus aportaciones al peri¨®dico online.
La denuncia fue presentada en abril de 2010 en un tribunal federal con sede en Nueva York, pocas semanas despu¨¦s de que AOL adquiriera The Huffington Post, publicaci¨®n dirigida por Arianna Huffington, por 315 millones de d¨®lares. Los demandantes alegaban que el medio se hab¨ªa beneficiado injustamente gracias a su trabajo y que deb¨ªan ser compensados.
El juez John Koetl sentenci¨® que el hecho de que The Huffington Post obtuviera unos ingresos mucho m¨¢s altos de lo que cualquiera de los blogueros denunciantes pudiera esperar, no les da el derecho de reclamar una modificaci¨®n al acuerdo que ten¨ªan con la publicaci¨®n para poder ser recompensados econ¨®micamente. ¡°Este es un intento de cambiar las reglas del juego despu¨¦s de que ¨¦ste haya terminado¡±, dice el juez en la sentencia.
Los colaboradores exig¨ªan al peri¨®dico 'online' unos 78 millones de euros por sus publicaciones gratuitas
Koetl a?adi¨® que los blogueros entregaban sus piezas a la publicaci¨®n por la difusi¨®n que conseguir¨ªan y que sab¨ªan que nunca se les iba a pagar por ello.
¡°Nadie forz¨® a los denunciantes a entregar su trabajo a The Huffington Post para su publicaci¨®n y discretamente han admitido que no esperaban ser recompensados por ellos¡±, afirma el juez. ¡°Los principios de igualdad y buena conciencia no justifican entregar a los denunciantes un porcentaje del precio de la adquisici¨®n cuando nunca esperaron recibir retribuci¨®n alguna, accedieron en repetidas ocasiones a cumplir las condiciones y participaron en el acuerdo con toda la informaci¨®n en sus manos¡±.
El grupo inicial de denunciantes, liderados por el bloguero Jonathan Tasini -que colabor¨® hasta mediados de 2011-, aspiraba a representar a 9.000 blogueros en el caso de que la petici¨®n hubiera sido admitida a juicio en forma de demanda colectiva. Tasini aleg¨® que The Huffington Post se hab¨ªa lucrado a su costa de manera injusta. En el momento de presentar la denuncia, muchos compararon el gesto con miles de usuarios de You Tube denunciando a Google por lucrarse gracias a los v¨ªdeos que hab¨ªan subido al portal. Hoy un experto de la Universidad de Columbia explicaba a la agencia Reuters que es como si una persona denunciara a un peri¨®dico al no ser remunerado por una de sus cartas al director.
El juez argumenta que? los demandantes habr¨ªan podido buscar otros medios donde escribir?
El juez ha quitado la raz¨®n a los demandantes defendiendo que siempre pod¨ªan haber intentado publicar su trabajo en otros medios. ¡°Los denunciantes reclaman que tienen derecho a una porci¨®n de los 315 millones de d¨®lares que AOL pag¨® por la compra de The Huffington Post¡±, reconoce el juez. ¡°Alegan que existi¨® enriquecimiento injusto porque no fueron recompensados a cambio del valor a?adido que aportaron al medio, incrementando el precio pagado por ¨¦l¡±.
Koetl tambi¨¦n defiende la postura de AOL, que siempre sostuvo que los blogueros no pudieron demostrar que el medio debiera recompensarles, porque esto nunca estuvo estipulado en el contrato impl¨ªcito entre los blogueros y la publicaci¨®n. ¡°De manera bastante simple, los denunciantes ofrecieron un servicio, la publicaci¨®n demandada les brind¨® difusi¨®n a cambio y la transacci¨®n siempre ocurri¨® como se les hab¨ªa anunciado¡±, afirma.
The Huffington Post, lanzado en 2005, se ha convertido en uno de los medios de mayor difusi¨®n en EE UU con 35 millones de usuarios ¨²nicos al mes, llegando a superar al diario The New York Times. Desde el pasado oto?o, la cabecera ha lanzado ediciones en diversos pa¨ªses, como Canad¨¢, Francia y Reino Unido, y en los pr¨®ximos meses estrenar¨¢ su versi¨®n espa?ola en colaboraci¨®n con el diario EL PAIS y bajo la direcci¨®n de la periodista Monserrat Dom¨ªnguez.
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