Michael Fertik: ¡°Los datos son nuestro ADN¡±
Fundador de Reputation, se ha especializado en el ciberacoso y en crisis empresariales por robo de informaci¨®n
Michael Fertik (Nueva York, 1978) cambi¨® Kentucky por la bah¨ªa de San Francisco por una chica. Dice que le sali¨® bien la jugada, all¨ª lanz¨® en 2006 Reputation.com. Entonces consigui¨® una ronda de financiaci¨®n de un mill¨®n de d¨®lares. La ¨²ltima fue de m¨¢s de 65. Conocido blogger y columnista, su libro Wild West 2.0 (Salvaje Oeste 2.0), un manual para mantener a salvo la imagen y datos en redes sociales es uno de los m¨¢s vendidos en Amazon.
A la vuelta de Davos, ¡°aunque parece una reuni¨®n de pol¨ªticos y grandes poderes, es, b¨¢sicamente, un lugar para hacer negocios¡±, dedic¨® un d¨ªa en Madrid para tratar con clientes, en su mayor¨ªa grandes empresas que quieren estar al tanto la percepci¨®n que se tiene de sus servicios en Internet o atajar alg¨²n problema en el momento en que se genere.
Con ¨¢nimo divulgador, Fertik se atreve a crear una analog¨ªa de las leyes de la rob¨®tica propuestas por Isaac Asimov adaptadas a la privacidad: 1) Acceso a todo aquello que una empresa sabe de ti con una mera petici¨®n. 2) Saber d¨®nde, c¨®mo, en qu¨¦ formato y con qu¨¦ frecuencia se recolectan los datos. 3) Poder borrar o impedir que se recojan tus datos personales.
Pregunta. Como experto en ciberacoso y uno de los primeros en acu?ar el t¨¦rmino ciberbullying, ?c¨®mo cree que ha cambiado en los ¨²ltimos tiempos?
Recomiendo navegar con las opciones de privacidad activadas y quitar la geolocalizaci¨®n en el m¨®vil
Respuesta. Ha empeorado. No solo en las escuelas, tambi¨¦n en los negocios. Hay m¨¢s herramientas y t¨¦cnicas cada vez m¨¢s sofisticadas. En mi empresa, con 180 personas dedicadas a entender c¨®mo se da?a en Internet, cada dos semanas surge algo que nos sorprende y pone a prueba nuestra pericia para atajarlo. A¨²n as¨ª, soy optimista. No hay que rendirse, creo que en el futuro no se permitir¨¢ todo.
P. ?Qu¨¦ se puede hacer para controlar nuestra vida digital?
R. Lo primero, no pensar en el futuro, sino en el presente. Por ejemplo, hace cinco a?os no se sab¨ªa de ti todo lo que se sabe ahora. Y en estos momentos tampoco tenemos control de lo que se est¨¢ filtrando. Mi propuesta es crear una norma com¨²n para prevenir la filtraci¨®n de datos, ya sea desde el m¨®vil, una pulsera fitbit o un reloj inteligente.
P. Pero, ?c¨®mo se podr¨ªa prevenir?
Inquieta la colaboraci¨®n de las empresas privadas con la agencia NSA. Especialmente el caso de Verizon
R. T¨² solo no puedes, pero como consejo general s¨ª recomiendo navegar con las opciones de privacidad activadas y quitar la geolocalizaci¨®n en el m¨®vil. Tampoco soy partidario de compartir cada foto que se hace a los ni?os.
P. Sobre lo que dice del navegador, hay quien opina que precisamente, activar las opciones de privacidad, invita a convertirse en sospechoso y aumentar posibilidades de ser espiado.
R. Es relativo. Si utilizar un navegador normal, ser¨ªa lo mejor. Si utilizas Tor, que no es de uso com¨²n, s¨ª puedes levantar sospechas. Salvo que seas un usuario avanzado, est¨¦s en China o, quiz¨¢, seas alguien que trafica con pornograf¨ªa infantil, por ejemplo.
P. ?Qu¨¦ opina de la labor de la NSA?
R. Me sorprende el revuelo que ha levantado. Hab¨ªa leyes que le permit¨ªa el espionaje. ?A qui¨¦n le sorprende que haya un programa as¨ª? Lo que s¨ª inquieta, y no entraba dentro de los planes, es la colaboraci¨®n de las empresas privadas con la NSA. Especialmente el caso de Verizon, con llamadas almacenadas de m¨¢s de siete millones de clientes. Os pido perd¨®n a los europeos por la parte del espionaje, porque no es una ley de uno de vuestro gobiernos. En general, se entiende que es para evitar ataques terroristas pero habr¨ªa que colaborar de otra manera. No hay que meter miedo, ni dejar de usar Facebook o Twitter. Lectores, la NSA no est¨¢ mirando en vuestros cajones.
P. Volviendo al m¨®vil, si todo el mundo quita la opci¨®n de geolocalizaci¨®n, ?qu¨¦ pasar¨¢ con la publicidad en este soporte? Cada vez m¨¢s se basa en eso.
R. Hay que buscar una nueva manera de proponer la publicidad sin da?ar al consumidor, sin ser tan agresivos en ese aspecto. Todav¨ªa est¨¢ dando sus primeros pasos y es normal que haya puntos de fricci¨®n.
P. ?Hay motivos para temer una ciberguerra?
R. Hay gamberradas de peque?os, de chavales, de h¨¢ckers que molestan, estorban, pero no da?an de verdad, como se entiende una guerra. Guerra, guerra, de la de verdad no hay pero s¨ª puede darse. China, Rusia, Estados Unidos e Israel est¨¢n preparados para ello. Reino Unido tambi¨¦n avanza en ese sentido. Asumen que Internet es un medio asim¨¦trico donde cinco con un buen plan y el conocimiento adecuado pueden da?ar a millones. En todo caso, ser¨ªa una nueva forma de Guerra Fr¨ªa, por el miedo al espionaje, a que se tome el control del tr¨¢fico a¨¦reo o a la gesti¨®n de recursos naturales.
P. Y las empresas, ?est¨¢n preparadas?
R. No, todav¨ªa tienen que aprender muchas lecciones. Las brechas de seguridad que se han dado en este ¨²ltimo a?os son una nimiedad si se comparan con la cantidad de datos que compartimos alegremente y sin que nos pidan permiso. Por ejemplo, el e-mail, el tel¨¦fono y la direcci¨®n de casa de la mayor¨ªa de nosotros est¨¢ en Internet. El bot¨®n de ¡°like¡± de Facebook tiene una supercookie (archivo de datos de navegaci¨®n para consulta de los propietarios del servicio). Eso se traduce, si se sabe rentabilizar, en dinero. Cada like multiplica el impacto. Los datos son como nuestro ADN; mi sue?o es que tengas el control sobre ellos.
P. ?Qu¨¦ diferencias encuentra entre pa¨ªses?
R. Trabajamos en m¨¢s de un centenar. Sobre todo en Estados Unidos, Canad¨¢, Jap¨®n, Corea y Brasil. En Europa, en los pa¨ªses german¨®filos, Suiza, Austria y Alemania. Espa?a y Am¨¦rica Latina nos interesan porque desde California podemos gestionar estas comunidades gracias al idioma, aunque siempre contando con equipo local. Eso s¨ª, la gran oportunidad, es Brasil. En general, en Am¨¦rica se es m¨¢s activo y optimista. Europa tiene m¨¢s recelo. Si algo he aprendido es a no trabajar con pol¨ªticos, hay poco dinero y muchos problemas.
P. Normalmente, ?le llaman en pleno incendio o para prevenir?
R. Suelen llamar porque quieren hacer mejor las cosas. Para saber qu¨¦ dicen de su banco, si tienen problemas para usar los cajeros o si no los atienden bien. Se trata de saber si todo va bien en tiempo real. En general se es m¨¢s proclive a decir que algo va mal. Es una cuesti¨®n de madurez, el que previene est¨¢ m¨¢s establecido que el que viene ya con problemas.
P. ?Y qu¨¦ hacen en caso de problemas?
R. Adem¨¢s de contarles con an¨¢lisis qu¨¦ est¨¢n haciendo mal, tenemos tecnolog¨ªa para frenar la filtraci¨®n de datos, tambi¨¦n para hacer que las cr¨ªticas negativas se vayan diluyendo y no salgan entre los primeros resultados de b¨²squedas.
P. ?C¨®mo le gustar¨ªa que fuera el futuro?
R. M¨¢s limpio. Las redes sociales tienen mucho de nosotros de una manera muy sencilla. Es muy f¨¢cil entrar en sus bases de datos, pero casi imposible salir de ellas. Me gustar¨ªa que eso cambiase. Internet te hace el sujeto, no el objeto. Pero no es as¨ª, el gran mito de hoy es que eres el objeto, los usuarios somos los productos.
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