¡®Watch Dogs¡¯ toma Chicago

Aiden Pearce es un hombre capaz de apagar sem¨¢foros, bombardear tuber¨ªas de gas, desconectar la red el¨¦ctrica y hackear coches y cajeros. De hecho, lo hace constantemente con su tel¨¦fono inteligente durante las 30 horas que puede llegar a durar su misi¨®n.

Aiden Pearce, un h¨¦roe atormentado y obsesionado con la venganza, es el protagonista de Watch Dogs, el nuevo videojuego que la compa?¨ªa gala Ubisoft lanza al mercado el 27 de mayo. Pero Aiden Pearce no ser¨ªa nadie sin la ciudad de Chicago, la otra protagonista del videojuego. Sus callejones, sus inmensos edificios y sus ciudadanos -con solo etiquetarlos sabemos su edad, ingresos econ¨®micos, religi¨®n o enfermedades- se reproducen en este juego que intenta ir un poco m¨¢s all¨¢. Sus creadores dicen que pretenden llamar a la reflexi¨®n sobre el impacto de las tecnolog¨ªas y la hiperconectividad en el ser humano. Y por eso han elegido Chicago, la ciudad m¨¢s conectada de los Estados Unidos con sus 24.000 c¨¢maras de seguridad.

¡°Es un juego diferente a lo que hemos visto hasta ahora. Durante los ¨²ltimos a?os, los medios de comunicaci¨®n han caricaturizado la figura del hacker. Ahora todos tenemos un mayor conocimiento. Y lo que hace Aiden es usar herramientas de hacking para lograr su objetivo¡±, explica el hacker y fundador de la empresa de seguridad digital Toucan System, Jonathan Brossard, durante la presentaci¨®n en Chicago. Brossard subraya el trabajo que hay detr¨¢s de cada movimiento del personaje: ¡°Hackear un coche requiere seis meses de trabajo previo¡±.

Watch Dogs muestra la ciudad interconectada, la urbe inteligente en la que se puede saber todo de cualquiera. Se trata de un mundo abierto donde el jugador empieza controlando una parte de la ciudad. Tiros, persecuciones y muchas interacciones con los peatones que reaccionan cre¨ªblemente ante Aiden, quien pretende acceder al sistema operativo central de Chicago (ctOS).

El jugador tiene todo el control y decide si opta por la opci¨®n multijugador, que permite entrar en otras partidas. Adem¨¢s de la principal, hay misiones secundarias para desengrasar como los minijuegos de realidad virtual para matar zombis, manejar drones o jugar partidas de p¨®ker. Para Vitaly Kalmuk, de la empresa Kasperky que ha asesorado en el proyecto, lo que ocurri¨® en Mosc¨² el pasado enero es un buen ejemplo de lo que Aiden puede llegar a hacer: un hacker desconect¨® las c¨¢maras de control de velocidad de la ciudad dej¨¢ndolas sin servicio durante m¨¢s de dos semanas.

¡°Este es el primer juego que integra de forma global el hacking¡±, subraya Kalmuk. Watch Dogs llega con seis meses de retraso al mercado: estaba anunciado para el pasado 21 de noviembre pero el equipo consider¨® que era necesario perfeccionar ciertos aspectos. El retraso dio pie a todo tipo de especulaciones. Ahora Ubisoft se la juega con este lanzamiento, tras m¨¢s de cinco a?os de desarrollo y casi mil trabajadores implicados en el proyecto. La compa?¨ªa no ha desvelado qu¨¦ ha costado este retraso.

¡°Nos hemos inspirado en series como Breaking Bad. El jugador va a necesitar un tiempo para apreciar el comportamiento de Aiden. Su misi¨®n es muy personal y su obsesi¨®n es proteger a su familia¡±, advierte Jonathan Morin, director creativo y padre de la criatura. Morin, de momento, no quiere dar detalles sobre la posibilidad de que Watch Dogs se convierta en pel¨ªcula. ¡°Es un proyecto a largo plazo¡±, puntualiza.