Est¨¢s ya rodeado de robots, aunque no lo sepas

"Ya lo dijo Bill Gates, con los robots se va a producir una revoluci¨®n similar a la que ocurri¨® cuando se introdujeron los ordenadores personales en nuestras casas. Lo van a cambiar todo". La opini¨®n de Eduardo Zalama, experto en rob¨®tica y visi¨®n artificial de la Fundaci¨®n Cartiff, coincide con la de la mayor¨ªa de investigadores: la expansi¨®n de los robots es imparable. No llegar¨¢n solo a?las cadenas de producci¨®n o a los centros de innovaci¨®n, donde su incorporaci¨®n ya es evidente, sino que aterrizar¨¢n en los hogares, los barrios y las ciudades. La apariencia de estas m¨¢quinas se aleja de la visi¨®n de androide con aspecto humano que proponen las pel¨ªculas y se acerca m¨¢s a la de dispositivos que ya conocemos: asistentes virtuales o electrodom¨¦sticos digitalizados. Faltan escasos a?os para esta robotizaci¨®n masiva ¡ªapenas dos o tres, seg¨²n algunas predicciones¡ª, pero en nuestra rutina diaria ya influyen aparatos con inteligencia artificial y tecnolog¨ªa avanzada.

La inteligencia artificial est¨¢ a mitad de camino entre la ciencia ficci¨®n y la tecnolog¨ªa

"La inteligencia artificial es el camino entre la ciencia ficci¨®n y la tecnolog¨ªa. Cuando empezamos a imaginar cosas nuevas es inteligencia artificial, cuando se convierten en realidad ya lo podemos llamar tecnolog¨ªa". Con esta definici¨®n Juan Antonio Recio, director del departamento de Ingenier¨ªa del Software e Inteligencia Artificial de la Universidad Complutense, intenta abrir el camino para identificar los tipos robots que ya est¨¢n presentes en varios campos.

En tu m¨®vil

Todos los investigadores coinciden en que los asistentes virtuales de nuestros tel¨¦fonos, como Siri o Google Now, son el gran referente de c¨®mo la inteligencia artificial seguir¨¢ entrando en nuestras vidas. "Se han integrado de una forma totalmente natural. La sociedad los ha aceptado casi sin darse cuenta, pero si hace 10 o 15 a?os?te dicen que tu m¨®vil va a ser capaz de charlar contigo piensas que es fantas¨ªa", considera Recio.

Si hace 10 a?os te dicen que tu m¨®vil va a hablar contigo piensas que es fantas¨ªa. Y, sin embargo, hemos aceptado a Siri como algo natural

Estos sistemas son capaces de hablar con los usuarios, de contar chistes, solucionar problemas, encontrar restaurantes y aprender rutinas. "Son capaces de interactuar con nosotros?y de?aprender nuestros h¨¢bitos. Pueden avisarte de que salgas antes para ir a trabajar porque hay un atasco", razona este doctor de inform¨¢tica que a?ade que estas funciones ya aumentan la productividad.

El desarrollo revolucionario de estos sistemas ha sido el aprendizaje del lenguaje natural. Siri no siempre acierta, pero es capaz de entender preguntas y ¨®rdenes, aunque el usuario titubee o cambie de sentido en mitad de frase. "Esto es lo m¨¢s importante. El reconocimiento de voz no era posible hasta hace pocos a?os y ahora puedes tener una interacci¨®n fluida. Han creado una t¨¦cnica que puede exportarse a muchos campos", explica Xavier Alam¨¢n, profesor de inform¨¢tica y computaci¨®n de la Universidad Aut¨®noma de Madrid (UAM) y experto en dom¨®tica.

En tu casa

Colin Angle, cofundador de iRobot, ya pronostic¨® en 2011 que los robots invadir¨ªan nuestros hogares, pero que no con la forma de un mayordomo rob¨®tico ¡ªla creaci¨®n de un gran robot que se ocupe de muchas tareas es muy complicado y caro¡ª, sino como peque?os robots con cometidos espec¨ªficos. El primero en desembarcar en las casas fue Roomba, la marca de robot aspiradora m¨¢s famosa (y de la que Angle es creador); despu¨¦s, han llegado los robots cortac¨¦sped y limpiacristales. Estos dispositivos detectan d¨®nde hay polvo o suciedad, determinan por qu¨¦ zonas hay que limpiar y cu¨¢ntas veces. Son robots, pero con una inteligencia muy limitada, seg¨²n expertos como Recio: "Hace a?os s¨ª que dir¨ªamos que son inteligencia artificial, ahora se han quedado atr¨¢s, son m¨¢s bien tecnolog¨ªa".

Un ejemplo m¨¢s actual es?la Smart TV, la televisi¨®n inteligente, que cuenta con algoritmos de recomendaci¨®n que aprenden de tus gustos ¡ªa partir de los contenidos que has visualizado¡ª para hacer nuevas recomendaciones. Estos algoritmos de c¨¢lculo, como los que utilizan los GPS para se?alar de rutas ¨®ptimas, son "ejemplos claros de inteligencia artificial", detalla Recio.

Sin embargo, la rob¨®tica de la casa no se va a quedar ah¨ª. Imaginen un frigor¨ªfico que avisa con un WhatsApp cuando falta leche, una lavadora que explica cu¨¢ndo es mejor conectarla para ahorrar agua, una calefacci¨®n que programas desde el m¨®vil o una vitrocer¨¢mica con la que puedes hablar para darle ¨®rdenes.

Imaginen un frigor¨ªfico que avisa cuando falta leche, una lavadora que explica c¨®mo ahorrar agua o una vitrocer¨¢mica con la que puedes hablar para darle ¨®rdenes. Pues ya existe

Esta robotizaci¨®n de electrodom¨¦sticos ya existe. La t¨¦cnica ya est¨¢ preparada y las empresas ya est¨¢n implement¨¢ndola. Algunos pa¨ªses como China llevan ventaja:?all¨ª los electrodom¨¦sticos inteligentes que se pueden controlar con aplicaciones ya son una realidad. Solo faltar¨¢ que el usuario las acepte.

"La clave de su ¨¦xito est¨¢ en que podr¨¢s hablar con los aparatos. Gracias a la t¨¦cnica de los asistentes virtuales, podr¨¢s hablar con el fog¨®n a trav¨¦s de un m¨®vil para decirle que deje de calentar en 15 minutos", detalla Alam¨¢n. Una de las principales ventajas de poder utilizar la voz para controlar un dispositivo, seg¨²n este profesor de la UAM, es que no hay que realizar ning¨²n tipo de instalaci¨®n o de cableado en la vivienda ¡ªcomo si es necesario con la dom¨®tica¡ª, sino que al comprar el electrodom¨¦stico ya estar¨¢ integrada la posibilidad de manejarlo mediante el habla.

Espa?a fue un pa¨ªs puntero en el desarrollo de las llamadas smart cities, ciudades inteligentes, con urbes como Santander o Barcelona. Ahora, el mapa ha crecido y multitud de ayuntamientos de todo el pa¨ªs est¨¢n haciendo un gran esfuerzo por dotar de eficacia y conectividad a las ciudades. "El principal concepto de una smart city es que todo debe estar todo conectado ¡ªtransportes, infraestructuras y servicios¡ª a trav¨¦s de redes y plataformas que sean accesibles para el ciudadano", explica Paul Bustamante, investigador del centro tecnol¨®gico CEIT de San Sebasti¨¢n.

Los Ayuntamientos espa?oles est¨¢n haciendo un gran esfuerzo por convertir a sus ciudades en inteligentes

En un gran n¨²mero de localidades espa?olas se puede controlar con una app d¨®nde est¨¢n los aparcamientos libres de toda la ciudad, cu¨¢ndo va a llegar el pr¨®ximo autob¨²s o cu¨¢l es el estado del parking de bicicletas p¨²blicas; adem¨¢s, otros municipios tienen calles donde las farolas se autorregulan seg¨²n pasen o no viandantes, sistemas de riego que detectan si ha llovido y edificios que monitorizan la salud de sus habitantes. Estas peque?as muestras relacionadas con la eficacia energ¨¦tica y la movilidad son el primer paso de una smart city. ¡°Este concepto est¨¢ muy basado en el Internet de las cosas: las farolas, los aspersores o las bicicletas almacenan datos y los comparten. Hace falta tener una nube para guardar todos los datos¡±, razona Bustamante.

El ideal de smart city es aquella ciudad en la que todo va unido y gira entorno al beneficio de la gesti¨®n p¨²blica, del medioambiente y, sobre todo, del ciudadano. ¡°El pilar de una smart city es la participaci¨®n del ciudadano, tenemos que conseguir que ellos sean conscientes de esto¡±, apunta Rub¨¦n Garc¨ªa, director de proyectos de smart cities de la Fundaci¨®n Cartiff. En ella, el m¨®vil ser¨¢ imprescindible y, aunque no ser¨¢ rob¨®tica, s¨ª aprovechar¨¢ al m¨¢ximo la tecnolog¨ªa, la inteligencia distribuida y el desarrollo del Internet de las cosas.