Este perro artificial aspira a ser el robot de reparto perfecto
Su desarrollo se inici¨® como parte de un proyecto militar cancelado. Ahora, el 'perro robot' deber¨¢ encontrar su sitio en la vida civil
El perro robot de nombre Spot imita el aspecto y los movimientos de un perro: camina y corre por terreno irregular, sube y baja escaleras, se agacha para pasar por debajo de una mesa o salta si encuentra un obst¨¢culo en el camino. Adem¨¢s, gracias a un brazo articulado situado sobre el lomo, Spot puede coger objetos, transportarlos y entregarlos. Puede incluso colocar los platos sucios en el lavavajillas.
El desarrollo de Spot comenz¨® hace algunos a?os en las instalaciones de la compa?¨ªa Boston Dynamics, adquirida por Google en 2013. La primera versi¨®n del robot ten¨ªa en realidad m¨¢s de mula que de perro: era grande, torpe, aparatoso y ruidoso. Funcionaba con un motor de gasolina. Sin embargo ya desde sus primeras versiones Spot demostr¨® sus buenas cualidades para moverse y correr sobre terreno llano a 25 km/h. Y para aguantar todo tipo de perrer¨ªas y de malos tratos sin inmutarse. Precisamente el ruido del motor fue por lo que los Marines descartaron reclutar a Spot, y el pasado verano los militares dejaron de financiar el proyecto.
La primera versi¨®n del robot ten¨ªa en realidad m¨¢s de mula que de perro: era grande, torpe, aparatoso y ruidoso
Spot Mini es la versi¨®n m¨¢s reciente, sofisticada y refinada de ese robot, si acaso ese adjetivo es aplicable a una m¨¢quina articulada de 25 kilos, fuerte y ¨¢gil, que puede llegar a intimidar. Reciente Marc Raibert, CEO de Boston Dynamics, mostr¨® en Barcelona el modelo m¨¢s reciente para sorpresa de los asistentes a una conferencia dedicada al aprendizaje autom¨¢tico. Fast Co describe Spot Mini como un robot cuadr¨²pedo que recuerda a un perro y que puede realizar tareas como abrir puertas, subir escaleras o llevar paquetes hasta las puertas de las casas.
Que Spot Mini sea capaz de ¡°llevar paquetes hasta las puertas de las casas¡± puede ser la clave para su futuro habida cuenta del creciente n¨²mero de tecnolog¨ªas y desarrollos que se est¨¢n destinando a automatizar esa tarea. En las ¨²ltimas semanas diversas empresas han comenzado a hacer pruebas con robots de reparto. La compa?¨ªa Starship Technologies tiene medio centenar de sus carros de reparto robotizados ya circulando en pruebas por Londres. Y Amazon hizo p¨²blico recientemente un v¨ªdeo que documentaba la primera entrega hecha por la compa?¨ªa empleando un dron. El dron del programa Amazon Prime Air vol¨® por s¨ª mismo durante algo m¨¢s de diez minutos, desde el almac¨¦n hasta el jard¨ªn del cliente, y entreg¨® la mercanc¨ªa sin intervenci¨®n humana.
Pero sendas pruebas tambi¨¦n han creado dudas acerca de las posibilidades que tienen ambas propuestas para funcionar en el mundo real. Por ejemplo, a la hora de hacer entregas en entornos urbanos y especialmente cuando se trata de llevar los paquetes hasta las puertas de las casas y no s¨®lo limitarse a dejarlo en una amplia parcela, en campo abierto y con buen tiempo.
Si bien los drones y los carros de reparto pueden resultar ¨²tiles, el paisaje urbano presenta demasiados obst¨¢culos
Si bien los drones y los carros de reparto pueden resultar ¨²tiles, e incluso pueden ser la mejor opci¨®n en determinados casos y entornos, el paisaje urbano presenta demasiados obst¨¢culos y es demasiado imprevisible para ambos sistemas. Por ejemplo, ni los carros ni los drones pueden subir o bajar escaleras escaleras o abrir una puerta. De hecho, es poco probable que el carro robot puede superar la mayor¨ªa de los bordillos y escalones tan habituales en las ciudades. Los drones no pueden acceder a espacios cerrados ni pasar por puertas, y las condiciones meteorol¨®gicas influyen en su funcionamiento y hasta impiden su uso.
Marc Raibert considera que un robot con piernas como Spot (o Atlas, un robot similar, de la misma compa?¨ªa, pero b¨ªpedo) es una opci¨®n a tener en cuenta al pensar en automatizar la entrega de paquetes, algo que ya han demostrado diversos experimentos llevados a cabo en diversas zonas de Boston. No le falta raz¨®n: que la morfolog¨ªa de un robot sea parecida a la de los humanos o los animales dom¨¦sticos hace que sea m¨¢s f¨¢cil para el robot desenvolverse y hasta sobrevivir en el entorno. Tambi¨¦n que un robot sea capaz de integrarse y de moverse de forma natural facilitar¨¢ la convivencia entre los robots y las personas, y eso es casi m¨¢s importante.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.