La misteriosa frecuencia que bloque¨® los mandos de los coches de una ciudad de Ohio
Un dispositivo fabricado por un vecino emit¨ªa se?ales que inhib¨ªan las enviadas por las llaves inal¨¢mbricas de veh¨ªculos y garajes
Hace unas tres semanas en una ciudad de Ohio (EE UU) dejaron de funcionar de forma misteriosa los mandos de m¨²ltiples coches y garajes. De la noche a la ma?ana, varios habitantes de North Olmsted no pod¨ªan abrir las puertas de sus veh¨ªculos y cocheras. Pero al alejarse de la zona, el mando volv¨ªa a funcionar. Expertos en reparaci¨®n de puertas de garajes, entusiastas de la electr¨®nica y trabajadores de diferentes compa?¨ªas se acercaron all¨ª para intentar averiguar qu¨¦ ocurr¨ªa. Despu¨¦s de varios d¨ªas de investigaciones, ya han resuelto el misterio: un dispositivo casero fabricado por un vecino emit¨ªa una frecuencia que inhib¨ªa las se?ales de m¨²ltiples mandos de la zona, seg¨²n informa el peri¨®dico The New York Times.
Esta extra?a situaci¨®n empez¨® a finales de abril en esta ciudad en las afueras de Cleveland de aproximadamente 32.000 habitantes. Varios funcionarios comenzaron entonces a recibir llamadas de m¨¢s de una docena de afectados que les informaban de los problemas con los mandos inal¨¢mbricos de sus veh¨ªculos, seg¨²n ha explicado al mismo medio Donald Glauner, director de seguridad y servicios de la ciudad.
Corinne Branchick es una de las vecinas afectadas, tal y como ha contado al portal de Ohio?Cleveland.com. Intent¨® cerrar la puerta de su coche hace tres semanas con el mando. Pero no funcion¨®. "Pens¨¦ que era mi bater¨ªa, as¨ª que compr¨¦ una nueva, aunque eso no me ayud¨®", ha afirmado. Poco despu¨¦s, se dio cuenta de que el mando s¨ª funcionaba cuando iba a trabajar o a cualquier otro lugar. Pregunt¨® a los vecinos de su calle si hab¨ªan experimentado tambi¨¦n problemas. Y descubri¨® que no estaba sola. A diez residentes en Virginia Avenue les hab¨ªa ocurrido lo mismo. Otros afectados viv¨ªa en las calles pr¨®ximas Brendan Lane y MacBeth Lane y en la cercana ciudad Farview Park.
Pero el fallo no afectaba a todos los mandos de los residentes. As¨ª lo comprob¨® Chris Branchick, que acud¨ªa de vez en cuando a la ciudad para visitar a sus padres. Cuando utilizaba su veh¨ªculo, un GMC, el mando no abr¨ªa la puerta del autom¨®vil. Pero cuando iba en el Nissan de su novia, no hab¨ªa ning¨²n problema, seg¨²n ha relatado a The New York Times.
Hicieron multitud de investigaciones e incluso llegaron a pensar que el problema proced¨ªa del Centro de Investigaci¨®n Glenn de la NASA o del Aeropuerto Internacional de Cleveland Hopkins
La polic¨ªa de North Olmsted, las autoridades e incluso los expertos en radiofrecuencia estaban desconcertados ante la situaci¨®n. Varias personas acudieron con medidores a la zona para tratar de resolver el misterio. Todas coincid¨ªan en que alguna se?al estaba interfiriendo en la frecuencia de la que depend¨ªan muchos mandos. Pero nadie era capaz de averiguar de d¨®nde proven¨ªa esa extra?a se?al. Hicieron multitud de investigaciones e incluso llegaron a pensar que el problema proced¨ªa del Centro de Investigaci¨®n Glenn de la NASA o del Aeropuerto Internacional de Cleveland Hopkins. El centro de investigaci¨®n est¨¢ a unas cuatro millas de distancia ¡ªunos 6 kil¨®metros¡ª mientras que el aeropuerto est¨¢ a unas cinco millas de distancia ¡ªcerca de 8 kil¨®metros¡ª.
Incluso varias compa?¨ªas se unieron a la b¨²squeda de respuestas. Empresarios de la empresa de telecomunicaciones AT&T y la compa?¨ªa el¨¦ctrica local Illuminating Company enviaron inspectores a la zona. "Comenzaron apagando la alimentaci¨®n en los lugares donde detectaron la lectura m¨¢s fuerte para las frecuencias de radio interferentes", explic¨® Chris Eck, un portavoz de la compa?¨ªa a The New York Times. Pero incluso despu¨¦s de desconectar la alimentaci¨®n en un bloque completo, la frecuencia persisti¨®.
Finalmente, descubrieron qu¨¦ ocurr¨ªa tras ir puerta por puerta en b¨²squeda de se?ales extra?as. Entre los aficionados que se acercaron a la zona a investigar, estaba Dan Dalessandro, un reparador de televisores. Seg¨²n ha explicado al mismo medio, al principio solo recogi¨® ¡°peque?as se?ales¡±, pero en una zona y en una casa en particular, la se?al era extraordinariamente alta.
Chris Glassburn, concejal de la ciudad, anunci¨® el pasado s¨¢bado por la tarde que el problema se hab¨ªa resuelto. Detr¨¢s del misterio, estaba el dispositivo casero que hab¨ªa inventado un vecino para comunicarle que hab¨ªa alguien en la planta de arriba de su casa mientras ¨¦l trabajaba en el s¨®tano. Este aparato emit¨ªa constantemente una se?al de 315 megahercios que inhib¨ªa las se?ales emitidas por los mandos a distancia de los coches y garajes.
"No hubo una intenci¨®n maliciosa detr¨¢s del dispositivo", dijo Glassburn en un comunicado que recoge el mismo medio. Tanto el inventor del aparato como el resto de personas que viv¨ªan en la misma casa no ten¨ªan ni idea de que estaban causando estragos en el vecindario hasta que Glassburn y un voluntario con experiencia en radiofrecuencias llamaron a la puerta. Cuando se retir¨® la bater¨ªa del dispositivo, la se?al se detuvo. El art¨ªfice del mismo, cuya identidad no ha sido desvelada, se ha comprometido a no volver a hacer m¨¢s aparatos de este tipo en el futuro. Y los vecinos de North Olmsted ya pueden abrir y cerrar las puertas de sus coches y garajes con sus mandos a distancia.
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