Manual para torpes digitales: qu¨¦ hacer cuando te pillan cotilleando una foto en Instagram o un perfil de WhatsApp

Recibir una videollamada a las 4 de la madrugada de un ex con quien no se tiene contacto desde hace a?os, darle a me gusta en una foto de la vecina de enfrente en Instagram, hacer un retuit no deseado a alguien a quien se odia¡­ Son peque?os deslices con el dedo que pueden elevarse a la categor¨ªa de tragedia social, o en el mejor de los casos, a un ¡°tierra tr¨¢game¡± del que resulta complicado salir. Es el embarazoso momento que tiene lugar cuando ¡ªmaldita la curiosidad humana¡ª quien est¨¢ revisando las fotos de perfiles de WhatsApp, pulsa, por accidente, el bot¨®n de llamada o videollamada, y la plataforma no es clemente: en el momento en el que la yema del dedo acaricia ese letal bot¨®n, se desencadena la llamada, con la consiguiente notificaci¨®n al cotilleado. Nos referimos tambi¨¦n a los ¡°me gusta¡± accidentales, a una foto publicada en Facebook o Instagram, una org¨ªa de desprop¨®sitos de quien estaba en el peor momento y en el sitio equivocado. Un doble clic con el dedo, mucho m¨¢s f¨¢cil de lo que podr¨ªa parecer, a una persona que no tenemos por contacto, abre las puertas de un averno al que nadie quiere entrar.

El ¡®tierra, tr¨¢game¡¯ que todo el mundo quiere evitar

¡°Lo primera es asumir que ¡®la he cagado¡¯ (con perd¨®n)¡±, explica Mauro A. Fuentes, profesor de estrategia digital y contenidos de la escuela de negocios IsDI, ¡°en el caso de que estuvieras stalkeando¡±. Fuentes cita al t¨¦rmino en internet stalk (acechar, en ingl¨¦s) que describe estas actitudes de cotilleo en la red, o bien de acoso digital tipificado en el c¨®digo penal en los casos m¨¢s graves.

En ese caso, cualquier explicaci¨®n que se d¨¦ y no sea la real, ser¨¢ todav¨ªa m¨¢s humillante para quienes sean de gatillo f¨¢cil (y torpe). ¡°Hay que intentar no hacer el rid¨ªculo poniendo excusas peregrinas¡±, explica este experto. ¡°Cuando se intenta explicar un motivo poco cre¨ªble, la sensaci¨®n de verg¨¹enza ajena ser¨¢ dif¨ªcil de olvidar¡±, a?ade.

Algo as¨ª sucedi¨® a Juan (una persona que prefiere mantener el anonimato): en un grupo que se hab¨ªa creado de excompa?eros de facultad y en una noche de insomnio, decidi¨® que ser¨ªa una buena idea revisar las fotos de los perfiles de sus componentes, para comprobar c¨®mo hab¨ªa tratado el paso del tiempo a sus amigos. Juan se detuvo en el perfil de una compa?era, amiga de su mujer, y en un mal movimiento en el sof¨¢ puls¨® el ¡®bot¨®n nuclear¡¯. Y a las tres de la madrugada, para mayor escarnio. ?Qu¨¦ hacer? Nuestro protagonista opt¨® por la mejor opci¨®n (si es que hay alguna buena): escribi¨® un mensaje a esta persona, en el mismo momento, explicando la verdad y disculp¨¢ndose por ello. Hoy, confiesa, lo recuerdan como una an¨¦cdota cari?osa.

Lo m¨¢s importante: no perder la calma

¡°Las reacciones m¨¢s habituales pueden ser el miedo, la incredulidad (¡¯esto no puede haber pasado¡¯) y la verg¨¹enza¡±, explica el psic¨®logo Joan Salvador Villalonga. ¡°Son reacciones normales, que experimentaremos en muchos otros momentos de la vida y para los cuales, lo mejor es respirar profundamente para recuperar la calma¡±, a?ade. Este experto recomienda no entrar en p¨¢nico, puesto que ¡°la emoci¨®n intensa, sea cual sea, dificulta mucho la toma de decisiones importantes¡±. Ante este clic accidental, son varias las alternativas con las que se puede intentar salir del atolladero, pero ¡°sea lo que sea, la decisi¨®n debe tomarse con calma¡±.

En la mayor¨ªa de las ocasiones, el incidente quedar¨¢ como un vago recuerdo en la memoria de los implicados. ¡°?nicamente, cuando ese clic o esta videollamada involuntaria pueda tener consecuencias graves nos tiene que preocupar¡±, explica Villalonga. ¡°Por ejemplo, cuando lo hacemos en el perfil de nuestro jefe en una entrevista de trabajo¡±, dice.

?Por qu¨¦ no evitan las plataformas este mal trago?

Los hechos demuestran que las plataformas no hacen lo suficiente para evitar estos accidentes. ?Por qu¨¦ se coloca el bot¨®n de videollamada junto a la foto de perfil en WhatsApp? ?Por qu¨¦ es tan sencillo hacer un doble clic en una pantalla en la que el gesto natural obliga a tener los dedos sobre ella? ?Se trata de algo voluntario o una cuesti¨®n accidental de dise?o de la interfaz? Fuentes deja patente su sospecha: ¡°Tengo la sensaci¨®n de que ciertas funcionalidades pueden estar cerca adrede¡±, explica, ¡°como cuando alguna plataforma cambia la posici¨®n de botones y funcionalidades en donde el riesgo se eleva hasta la absoluta certeza de que se podr¨¢ hacer mal¡±.

Este experto en comunicaci¨®n digital se refiere a los ¡°errores no forzados¡± a los que, en ocasiones, conduce Instagram: ¡°Es bastante habitual responder por error a la historia que un amigo te manda, y esa respuesta va al autor original y no a tu amigo¡±. En este sentido, Fuentes sugiere que las plataformas tienen herramientas a su alcance ¡°para avisar¡± al usuario antes de que cometa un desprop¨®sito. As¨ª, podr¨ªa activarse una peque?a alerta que saltara cuando se lleva a cabo una videollamada a alguien que ni siquiera se encuentra entre nuestros contactos.

Para evitar al m¨¢ximo la posibilidad de pasar este mal trago, los expertos recomiendan cautela cuando se quiera fisgonear en la foto de perfil de alguien. Y si ya se ha producido el desastre, lo m¨¢s recomendable es siempre decir la verdad: quedar¨¢ en el recuerdo que el perpetrador ha sido, ante todo, valiente y sincero (adem¨¢s de, claro, cotilla).

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