¡°Solo quiero entender por qu¨¦ muri¨®¡±. La batalla de una madre para saber si las redes influyeron en los ¨²ltimos d¨ªas de su hijo
El joven de 14 a?os Jools Sweeney se quit¨® la vida en 2022. Desde entonces su familia trata de saber qu¨¦ peso pudo tener su actividad ¡®online¡¯ en la decisi¨®n.
En abril de 2022, Ellen Roome se encontr¨® a su hijo Jools, de 14 a?os, muerto en su habitaci¨®n en Cheltenham (Inglaterra). No sab¨ªa qu¨¦ hab¨ªa pasado. Dos a?os m¨¢s tarde sigue sin saberlo. Roome lleva meses de lucha para que las grandes tecnol¨®gicas sean m¨¢s r¨¢pidas y transparentes para compartir los datos de su hijo, un menor, porque cree que su actividad online pudo tener alg¨²n peso en la decisi¨®n que tom¨®. Su caso, ahora, podr¨ªa cambiar las leyes brit¨¢nicas sobre privacidad y conservaci¨®n de datos.
Con el shock de la muerte, Roome ni siquiera cay¨® en que las redes pudieran haber tenido un papel: ¡°Dejamos que la polic¨ªa hiciera su investigaci¨®n¡±, dice por tel¨¦fono a EL PA?S. Pero esa investigaci¨®n policial no dio resultado. No catalogaron el fallecimiento como suicidio porque no pudieron establecer que estuviera con ¡°¨¢nimo suicida¡±. La noche de la muerte, Roome pidi¨® a la polic¨ªa que usaran la cara de Jools para establecer un nuevo pin y tener acceso al tel¨¦fono. Los agentes respondieron que no iban a trastear con las pruebas. La Polic¨ªa dispone de m¨¢quinas forenses para romper la seguridad y poder acceder a m¨®viles. Pero, seg¨²n Roome, la m¨¢quina de su distrito estaba estropeada. Solo accedieron al m¨®vil meses m¨¢s tarde, cuando un amigo de Jools adivin¨® la contrase?a.
La agente encargada de la investigaci¨®n concluy¨® que tras ¡°revisar algunos de los elementos [del m¨®vil] no hay nada de qu¨¦ preocuparse¡±. Pero Roome sigue sin creer que esa declaraci¨®n cierre todas las preguntas que ella tiene sobre qu¨¦ puede haber dentro del m¨®vil de Jools: ¡°No siento que se haya hecho correctamente ni que se hayan revisado todas las cuentas¡±, dice.
La familia de Jools solo descubri¨® con el tiempo que el joven ten¨ªa cuentas en aplicaciones que no conoc¨ªan, como Discord (una app de mensajer¨ªa centrada en videojuegos) o que ten¨ªa cuentas secundarias en Instagram o TikTok. Este caso ilustra en el fondo el papel crecientemente dominante de las grandes tecnol¨®gicas en nuestras vidas y c¨®mo la legislaci¨®n a¨²n no ha logrado adaptarse a todas las posibilidades relacionadas con su influencia.
Tras el fracaso policial, empez¨® la batalla de Roome, que sigue sin entender por qu¨¦ es tan dif¨ªcil que Meta y TikTok le cedan lo que necesita para aclarar los posibles motivos de la muerte. ¡°Me sorprendi¨® inmensamente¡±, dice Roome, que no le dieran la informaci¨®n que les ped¨ªa. Para ella, madre en duelo por un hijo muerto, la elecci¨®n era f¨¢cil: ¡°Si yo hubiera sido due?a de Meta o Tiktok, habr¨ªa dicho ?qu¨¦ informaci¨®n quer¨¦is? Aqu¨ª ten¨¦is todo y espero que encontr¨¦is algunas respuestas¡±, dice.
Eso no es lo que ocurri¨®: ¡°No entiendo c¨®mo una empresa puede no tener moral¡±, sigue. ¡°Como padres, solo queremos entender por qu¨¦ nuestro hijo, que era completamente normal, no sufr¨ªa acoso fuera de internet, no mostraba signos de depresi¨®n que alguien notara, ni problemas de salud mental, a menos que los escondiera. Hubo 500 personas en su funeral; era un ni?o popular, inteligente. Solo quiero entender por qu¨¦ un d¨ªa decidi¨® ahorcarse¡±, a?ade.
Ni TikTok ni Meta han aclarado a EL PA?S cu¨¢l es su postura en este caso. Un portavoz de Meta dijo al peri¨®dico The Independent en junio que est¨¢n ¡°en contacto directo con Ellen Roome y cooperaremos plenamente con cualquier investigaci¨®n policial, incluyendo la respuesta a cualquier solicitud de datos¡±.
Meta le ha acabado dando datos, explica, pero en un formato t¨¦cnico incomprensible. Ahora la est¨¢ revisando un forense y luego un psic¨®logo cl¨ªnico intentar¨¢ detectar algo que pudiera explicar el comportamiento de Jools: ¡°Pero no me dieron sus mensajes ni sus datos de navegaci¨®n. Hay cosas que marc¨® con me gusta y a¨²n no he recibido el informe completo¡±, dice.
Con TikTok ha tenido incluso una videoconferencia, pero sin resultado: ¡°Fue in¨²til¡±, dice. Le dijeron que borraban los datos despu¨¦s de un a?o o que, otras veces, era durante el a?o. ¡°Les respond¨ª que una empresa de su tama?o debe tener una pol¨ªtica sobre cu¨¢ndo borran datos as¨ª¡±, dice. Roome a?ade que un insider le contact¨® para decirle que la compa?¨ªa guardaba todo en un lugar con un ¡°tipo de acceso distinto¡±. La legislaci¨®n obliga a las grandes tecnol¨®gicas a borrar los datos personales que ya no son necesarios para su funcionamiento: eso ser¨ªa un motivo para ocultarlos con un ¡°acceso distinto¡±. ¡°No me creo nada de lo que me dicen¡±, concluye.
Tras la falta de respuesta de las compa?¨ªas, recurri¨® a la pol¨ªtica. En Inglaterra el Parlamento debe discutir una petici¨®n ciudadana si llega a las 100.000 firmas. En dos semanas, la propuesta Dar a los padres/tutores el derecho de acceder a las cuentas de redes sociales de sus hijos de Roome, alcanz¨® las 126.000. El 20 de agosto, el Departamento de Ciencia, Innovaci¨®n y Tecnolog¨ªa contest¨® con detalle sobre los cambios que han incluido en su nueva ley de seguridad online: incluye la obligaci¨®n de conservar los datos cuando una autoridad lo pida y, sobre todo, la agilidad y la transparencia al responder: ¡°Deber¨¢n establecer pol¨ªticas sobre la divulgaci¨®n de informaci¨®n a los padres con respecto a las actividades en l¨ªnea de un ni?o fallecido en un formato claro, accesible y suficientemente detallado en sus t¨¦rminos de servicio¡±, dice el texto del Gobierno ingl¨¦s.
Pero ya no bastan para Jools. Su ¨²nico camino es ir a un tribunal superior para obligar a la polic¨ªa a reiniciar del caso y que un juez pida esa informaci¨®n a las tecnol¨®gicas. Pero eso les costar¨¢ mucho dinero. Han iniciado una recaudaci¨®n en Gofundme para reunir m¨¢s de 90.000 euros: ¡°Jools decidi¨® terminar con su vida a los 14 a?os. Puede que no sea por las redes sociales, pero como madre, siento que deber¨ªa tener un derecho humano a explorar todas las opciones para buscar respuestas sobre por qu¨¦ mi hijo ya no est¨¢. Esto incluye obligar a las empresas de redes sociales a entregar todos los datos sobre los ni?os. ?C¨®mo pueden nuestros hijos firmar t¨¦rminos y condiciones a los 13 a?os cuando somos nosotros los adultos responsables de ellos, y aun as¨ª no tenemos el derecho de ver nada?¡±, explica.
Roome tambi¨¦n ped¨ªa ver los datos de un menor cuando est¨¢ vivo, pero entiende que ah¨ª s¨ª debe haber m¨¢s l¨ªmites: ¡°Acepto que existen ciertos derechos de privacidad para los ni?os que est¨¢n vivos, y eso necesita una discusi¨®n m¨¢s extensa con expertos en el tema¡±, dice.
La legislaci¨®n espa?ola
La legislaci¨®n europea y espa?ola ya prev¨¦ que las tecnol¨®gicas deban dar toda la informaci¨®n personal a los familiares de un fallecido si la piden y tienen la documentaci¨®n que lo justifique. Pero es un proceso complejo y tedioso que, como en el caso de Jools, poca gente est¨¢ preparada para iniciar al d¨ªa siguiente de la muerte de un ser querido.
La b¨²squeda de c¨®mo pedir esa informaci¨®n sobre un familiar fallecido en las p¨¢ginas de ayuda de Meta y TikTok es hoy una peque?a odisea. TikTok ni siquiera lo aclara en su centro de ayuda. Por si fuera poco, en b¨²squedas repetidas y distintas para encontrar esa informaci¨®n, Google devuelve constantemente varios v¨ªdeos de TikTok con el titular: ¡°Habla con su hijo fallecido gracias a la IA¡±. No es el mejor ¨¢nimo para un momento tan grave.
En Meta tienen la petici¨®n en ingl¨¦s, en su p¨¢gina de ayuda en espa?ol, y ya advierten de que no les ser¨¢ f¨¢cil responder ¡°por culpa de la covid¡±; nadie ha tenido tiempo de cambiar la excusa, aparentemente: ¡°Ten en cuenta que tenemos menos personas disponibles para revisar los informes debido a la pandemia de coronavirus, lo que significa que puede llevarnos m¨¢s tiempo memorializar o eliminar la cuenta que solicitas¡±.
La Agencia Espa?ola de Protecci¨®n de Datos puede obligar a pedir esa informaci¨®n a las tecnol¨®gicas, pero dice que nunca han recibido un caso as¨ª. Es posible que un juez, a instancias de la Polic¨ªa, haya pedido esa informaci¨®n en alg¨²n caso en Espa?a, pero la Agencia no tiene constancia. En Francia ha surgido este a?o un grupo, Algos Victima, para iniciar procesos jur¨ªdicos contra TikTok por da?os contra menores.
Las grandes tecnol¨®gicas tienen pocos incentivos para colaborar si la legislaci¨®n no les obliga. ?Para qu¨¦ van a revelar que han podido tener un papel en la muerte de un adolescente? En 2022 un tribunal ya apunt¨® a Meta y Pinterest en el caso del suicidio de la joven Molly Russell, tambi¨¦n de 14 a?os. ¡°Las redes se cuidan mucho en salud: pedir¨¢n certificados de fallecimiento, libros de familia o el testamento (si es mayor de edad)¡±, dice Sergio Carrasco, abogado especializado en tecnolog¨ªa. ¡°Si ven algo raro, del departamento legal de la red te dir¨¢ que vayas a un juez y har¨¦ lo que me diga. Te pedir¨¢n mucha justificaci¨®n¡±, a?ade.
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