¡°M¨¢s seguro y r¨¢pido¡±. As¨ª funciona el oscuro mercado digital de drogas que Telegram pretende cerrar

Un usuario que quiere acceder a drogas en Telegram, la c¨¦lebre aplicaci¨®n de mensajer¨ªa, solo deb¨ªa teclear ¡°comprar¡± en su buscador y sal¨ªan varias opciones para adquirir coca¨ªna u otras variedades de drogas ilegales. Tras su detenci¨®n en Francia en agosto, Pavel Durov, fundador de la plataforma, quiere limitar la actividad potencialmente delictiva que hasta ahora era as¨ª de sencilla: ¡°La b¨²squeda en Telegram es m¨¢s potente que en otras apps de mensajer¨ªa porque te permite encontrar canales p¨²blicos y bots. Lamentablemente, algunas personas han abusado de esta funci¨®n para vender productos ilegales¡±, escribi¨® Durov en su canal hace unos d¨ªas.

Una de las cosas que ha desaparecido en los ¨²ltimos d¨ªas era a?adir el objeto de la compra: ¡°Comprar drogas¡±. Desde la semana pasada, esa b¨²squeda ya no devuelve resultados. Pero solo ¡°comprar¡± sigue ofreciendo varios canales o chats de drogas en Madrid o Barcelona. ¡°Nosotros no vemos ninguna diferencia¡±, dice Mat¨ªas Dewey, soci¨®logo y profesor de Estudios Latinoamericanos en la Universidad de St. Gallen (Suiza), coautor de un art¨ªculo acad¨¦mico sobre el mercado de la droga en Telegram. Dewey a?ade que otras b¨²squedas potencialmente delictivas siguen funcionando sin problema: ¡°Acabo de entrar nuevamente y vuelvo a comprobar que no hay nada diferente. Incluso si busco por ¡®Rolex¡¯ aparecen grupos vendiendo relojes falsificados¡±.

Telegram ha preparado un canal para que sus usuarios denuncien b¨²squedas que den resultados que podr¨ªan ser delictivos: @SearchReport. El ejemplo que ponen en ingl¨¦s es precisamente ¡°comprar drogas¡±. Esa ser¨¢ una de las primeras b¨²squedas conflictivas que se desactiven.

Pero el mundo de las drogas en Telegram tiene una profundidad y complejidad mucho mayor, seg¨²n Dewey. ¡°La principal novedad que encontramos fue que todos los entrevistados hac¨ªan referencia a una mejora de la experiencia en el consumo o venta de drogas¡±, explica el autor en referencia a su art¨ªculo cient¨ªfico de 2024 donde entrevistaron a vendedores y compradores de droga en Argentina y que es el primero que estudia un mercado ilegal en esa app. ¡°Se puede comprar de manera m¨¢s segura y m¨¢s r¨¢pida. El consumidor est¨¢ menos expuesto a la violencia y no tiene que salir de su casa¡±, a?ade Dewey. Otra ventaja de Telegram para sus usuarios es que permite ocultar su n¨²mero de tel¨¦fono en su cuenta, lo que impide a sus contactos usarlo si surge alg¨²n problema.

No hay un funcionamiento ¨²nico para la venta de drogas en Telegram. Hay chats con miles de usuarios que re¨²nen a vendedores y compradores o hay canales que sirven de expositor y la negociaci¨®n se hace luego en chats privados. La gran diferencia con el otro gran m¨¦todo digital para comprar drogas (negociar con el vendedor por WhatsApp) es que Telegram permit¨ªa b¨²squedas locales: as¨ª es factible llegar a una nueva ciudad y en seguida disponer de contactos. Esta funci¨®n local es una de las que, seg¨²n Durov, han cortado: ¡°Hemos eliminado la funci¨®n de gente cerca, que era utilizada por menos del 0,1% de los usuarios de Telegram, pero ten¨ªa problemas con bots y estafadores. En su lugar, lanzaremos negocios cerca, que mostrar¨¢ negocios leg¨ªtimos y verificados¡±. Cientos de personas lamentan en X el cierre de la funci¨®n.

La eliminaci¨®n definitiva de la estructura que se cre¨® en Telegram para mercadear con droga no ser¨¢ tan f¨¢cil: ¡°No solo se trata de la inmediatez y facilidad para la compra, sino la mayor variedad de sustancias como por ejemplo el tusi, la ketamina u otras que se salen de las tradicionales marihuana, coca¨ªna y ¨¦xtasis, que son las de consumo masivo¡±, desarrolla Andr¨¦s Buzzetti, doctorando en la Universidad Nacional de San Mart¨ªn (Argentina).

El peligro tambi¨¦n se reduce sustancialmente si no hay que ir a ning¨²n barrio peligroso a comprar. Dewey y Buzzetti han documentado casos donde la compra es completamente digital, como con Glovo o Just Eat. Despu¨¦s del pago virtual, es un rider quien entrega la mercanc¨ªa: ¡°En algunos casos usaban apps de mensajer¨ªa tradicionales sin saber el contenido o hab¨ªa otros que usaban una mochila de Rappi, una mensajer¨ªa muy com¨²n en Argentina, para camuflar o justificar por qu¨¦ uno va y viene¡±, dice Buzzetti.

Otro detalle sorprendente que se observaron los investigadores es que el temor principal de los usuarios de Telegram que compraban o vend¨ªan droga mediante la plataforma era una estafa, nunca las autoridades: ¡°Son participantes que piensan que la ley nunca se va a aplicar, que nunca van a ser descubiertos¡±, resume Dewey. ¡°La polic¨ªa no fue nombrada casi nunca¡±, a?ade.

En su cambio, Durov tambi¨¦n ha prometido colaborar con las autoridades cuando tengan pruebas claras de alguien es un criminal potencial y usa la plataforma. En sus entrevistas para otros trabajos, Dewey ya hab¨ªa detectado que las autoridades hab¨ªan dejado Telegram como imposible cuando persegu¨ªan un crimen, algunos m¨¢s graves que la venta de drogas: ¡°La semana pasada entrevist¨¦ a un fiscal de Buenos Aires que se dedica al abuso de menores y pornograf¨ªa infantil. En las causas que tienen, cuando aparece Telegram, las dejan de lado, ?por qu¨¦? Saben que no van a poder recabar evidencias, que van a contactar con la empresa y les dir¨¢ que no o directamente ni les va a responder¡±, explica.

Telegram, en principio, deber¨ªa abandonar esta actitud tras las promesas de Durov. ¡°En caso de violar nuestras reglas, las direcciones IP y n¨²meros de tel¨¦fono de los infractores pueden ser compartidos con las autoridades si recibimos solicitudes legales v¨¢lidas¡±, escribi¨® Durov en su canal el 23 de septiembre, aunque el 2 de octubre, ante las quejas de usuarios, quiso aclarar que ¡°nada cambia mucho¡± en Telegram. ¡°Para evitar confusiones, la semana pasada simplificamos y unificamos nuestra pol¨ªtica de privacidad en diferentes pa¨ªses. Pero nuestros principios fundamentales no han cambiado. Siempre hemos intentado cumplir con las leyes locales, mientras no vayan en contra de nuestros valores de libertad y privacidad¡±, a?adi¨®. La ¨²nica respuesta ser¨¢ ver si las autoridades notan cambios en las respuestas a sus peticiones policiales a Telegram.

Qui¨¦n vende esa droga

El tipo de usuario de Telegram para estas ventas, seg¨²n el estudio de Dewey y Buzzetti, suele ser un peque?o vendedor, con pocas expectativas de crecimiento. ¡°No eran grandes narcos, sino peque?os vendedores que distaban mucho del prejuicio que uno puede tener: universitarios, mujeres j¨®venes (una de las entrevistas la hicimos en un parque con los perritos de la entrevistada) o una estudiante que vend¨ªa una cantidad de ¨¦xtasis importante, pero que se lo daba una organizaci¨®n y ella no sab¨ªa bien qui¨¦nes eran¡±, detalla Buzzetti. Otro ejemplo de vendedor inesperado fue un panadero que se levantaba a las 5 de la ma?ana, trabajaba hasta las 2 o las 3 de la tarde, llegaba a su casa y se pon¨ªa a vender.

Gracias a todas estas condiciones de Telegram, han aparecido mujeres como vendedoras, que adem¨¢s han creado grupos adecuados a sus intereses. ¡°Laura [nombre ficticio] se especializa en vender ¨¦xtasis a mujeres y asesora a las usuarias sobre c¨®mo experimentar el efecto deseado¡±, dice el art¨ªculo. ¡°El caso de Laura es interesante porque muestra los niveles de especializaci¨®n y b¨²squeda de nichos de mercado¡±, explica Dewey. ¡°Y tambi¨¦n muestra el rol de las mujeres en mercados que suelen ser de hombres. El mismo medio y la percepci¨®n de seguridad que genera favorecen la b¨²squeda de nichos de mercado y, por parte de los consumidores, la exploraci¨®n de sustancias nuevas¡±, a?ade.

La venta en chats de Telegram se estructura como un mercado abierto, donde el creador asegura cierta fiabilidad a cambio de controlar el tono y peque?as ventajas econ¨®micas: ¡°M¨¢s all¨¢ de la posibilidad de ganar dinero con la venta de droga, nosotros identificamos tres ganancias¡±, explica Dewey. ¡°Primero, a cambio de cierto dinero, ellos fijan tu anuncio bien arriba. Segundo, arman certificaciones de trusted sellers [vendedores de confianza]. En estos grupos impera la desconfianza y los vendedores necesitan ser vistos como gente fiable. Entonces los organizadores, a cambio de dinero, crean una lista de trusted sellers que publican continuamente. Y tercero, los organizadores capturan mucha informaci¨®n que les permite hacer otros negocios. La venta a trav¨¦s de Telegram es un fen¨®meno urbano y muchas veces los organizadores se conocen entre s¨ª en el mundo offline¡±.

Estos grupos pueden encontrarse en comunidades de Reddit u otras plataformas o, como en el caso de WhatsApp, que alguien lo comparta. Es importante a?adir, dicen los investigadores, que Telegram es solo una plataforma m¨¢s donde ocurren estos intercambios. Aunque tenga unas caracter¨ªsticas concretas que dan mayor facilidad, hay intercambios o contactos tambi¨¦n en otras redes.