Las ni?as perrean: la verdad sobre el linchamiento preventivo de ¡®Cuties¡¯
Una pel¨ªcula que trata con valent¨ªa la erotizaci¨®n precoz de las adolescentes desata una ola de ataques a Netflix de los que no la han visto. Los creadores tienen que mirar de frente las cuestiones inc¨®modas
Por experiencia propia, Zadie Smith, brit¨¢nica de madre jamaicana y padre ingl¨¦s, retrat¨® de maravilla en la novela Dientes blancos la compleja vida de los hijos de inmigrantes en el Reino Unido. El desarraigo de quien es se?alado como extranjero en el pa¨ªs en que naci¨® y del que nunca sali¨®, la tensi¨®n entre las tradiciones de la familia y las costumbres de sus iguales, ¡°esa lucha terrible entre qui¨¦nes son y qui¨¦nes tendr¨ªan que ser, lo que fueron y lo que ser¨¢n¡±.
En esa l¨ªnea se sit¨²a la pel¨ªcula Cuties (en espa?ol Guapis, original en franc¨¦s Mignonnes), de la directora Ma?mouna Doucour¨¦, francesa de origen senegal¨¦s. El filme ¡ªpremiado en Sundance, menci¨®n especial en la Berlinale¡ª nos mete en la piel de una ni?a parisina de 11 a?os, de familia africana y devotamente musulmana, que se inicia con sus compa?eras de clase en el sensual baile del twerking, o perreo, con la ilusi¨®n de ganar un concurso. As¨ª que tenemos dos temas delicados: el choque cultural y lo que se ha venido a llamar hipersexualizaci¨®n, la presi¨®n a las chicas para mostrarse seductoras e irresistibles desde temprana edad, un mal agravado por el exhibicionismo y narcisismo que imperan en Instagram o TikTok.
Netflix anunci¨® el estreno para el 9 de septiembre con una promoci¨®n muy burda, por la que ha tenido que disculparse, y sufri¨® la ira de las redes. Una multitud indignada escribi¨® en Twitter la etiqueta #NetflixPedofilia sin molestarse en averiguar si el filme ensalza, denuncia o, cuanto menos, ayuda a entender ese fen¨®meno, inquietante pero verdadero, de la erotizaci¨®n precoz. Ejemplo de libro de la que dicen ¡°cultura de la cancelaci¨®n¡±, de un lado u otro del espectro ideol¨®gico, un nuevo modo de censura en nombre de buenas causas que amenaza con encorsetar la libertad art¨ªstica.
En realidad, Cuties es una visi¨®n valiente, sincera, dura y hasta tierna de la pubertad: el fin de la inocencia, la inseguridad, la curiosidad, la rebeld¨ªa, la ansiedad por hacerse mayor, la b¨²squeda de la identidad, el af¨¢n por ser aceptada en el grupo... A esas angustias propias de la edad se suma aqu¨ª el abismo que se abre entre los valores del hogar y los de la calle. Describir todo eso con realismo, con sensibilidad, sin juzgar a los personajes, no tiene nada que ver con la apolog¨ªa de ninguna perversi¨®n.
La relaci¨®n de los menores con la sexualidad es un tab¨², pero en la vida real las ni?as perrean. Claro que algunos adultos prefieren no saber lo que hacen sus hijos cuando est¨¢n fuera de su vista. En esta sociedad maniquea, simplista, muchos se sienten bien expresando su furia contra una obra de la que no saben nada. Para los creadores, lo honesto es mirar de frente las cuestiones inc¨®modas. Aunque se expongan al linchamiento preventivo virtual.
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