Cuando Putin se obsesion¨® con el linchamiento de Gadafi
El documental ¡®Putin¡¯s Revenge¡¯ retrata a un presidente ruso decidido a hacer lo que haga falta para no seguir la suerte del tirano libio, de Sadam Husein o de Hosni Mubarak. Eso explica mucho de lo que est¨¢ pasando
Es la imagen m¨¢s impactante de la Primavera ?rabe: el dictador libio Muamar el Gadafi fue linchado en la calle tras desmoronarse su r¨¦gimen en octubre de 2011. La t¨¦trica escena, grabada en un tel¨¦fono m¨®vil, dio la vuelta al mundo en minutos. Lleg¨® al dispositivo de Hillary Clinton, secretaria de Estado con Obama, en un receso de una entrevista. Solt¨® una carcajada y un chiste poco diplom¨¢tico: ¡°Llegamos, vimos y muri¨®¡±, brome¨® parafraseando a Julio C¨¦sar. Eso tambi¨¦n se film¨®.
En el Kremlin, Vlad¨ªmir Putin conoci¨® los dos v¨ªdeos. El de la turba de Tr¨ªpoli lo reprodujo una y otra vez. Se obsesion¨® con ¨¦l. Cre¨ªa estar viendo su propio destino si la ola de revoluciones de colores llegaba a Rusia. El de Clinton celebrando la muerte del tirano lo convenci¨® de que esa mujer era su peor enemigo. Luego, en 2016, se emple¨® a fondo en evitar que ella llegara a la presidencia de EE UU. Le sali¨® bien: gan¨® Trump.
Lo cuenta con detalle el documental Putin¡¯s Revenge, dirigido por Michael Kirk para la cadena p¨²blica estadounidense PBS en 2017 (en su web y en YouTube). Visto hoy, ayuda a entender mucho de lo que pasa. Putin est¨¢ decidido a no seguir la suerte de Sadam Husein, ahorcado en Irak en 2006; de Hosni Mubarak, juzgado y encarcelado en Egipto en 2011; o de su t¨ªtere ucranio, V¨ªktor Yanuk¨®vich, huido a Mosc¨² tras la revoluci¨®n del Maid¨¢n en 2014. De ah¨ª su brutal intervenci¨®n en Siria; de ah¨ª su tutela sobre Aleksandr Lukashenko, el dictador de Bielorrusia; de ah¨ª la atroz invasi¨®n de Ucrania. De ah¨ª ese Estado orwelliano en que se ha convertido hoy Rusia, donde est¨¢ prohibido decir la palabra ¡°guerra¡± y donde miles de manifestantes son arrestados por mostrar carteles o folios en blanco que todos sabemos leer. De ah¨ª las purgas que anuncia. De ah¨ª que temamos que est¨¦ dispuesto a cualquier cosa.
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