Elena Anaya: ¡°No s¨¦ mentir. Me despidieron de una megaproducci¨®n de Hollywood por ser honesta¡±
La actriz es la protagonista de la comedia ¡®Mentiras pasajeras¡¯, su primera serie espa?ola
La vida perfecta de Luc¨ªa se desmorona cuando, el mismo d¨ªa en el que recoge su flamante nuevo coche y estrena puesto de directora general de su empresa, es despedida y acusada de espionaje industrial. Entonces, su vida se transformar¨¢ en una lucha por hacer justicia, destapar al verdadero culpable y, al mismo tiempo, mantener las apariencias para que su familia no descubra la verdad. Esta constante huida hacia delante construida sobre mentiras es el hilo conductor de la comedia Mentiras pasajeras, serie producida por Pedro y Agust¨ªn Almod¨®var a trav¨¦s de El Deseo y que la plataforma SkyShowtime estrena este lunes. Elena Anaya (48 a?os, Palencia) es su protagonista. No sabe mentir y conoce el precio de la verdad: la despidieron de una superproducci¨®n de Hollywood por ser honesta.
Pregunta. ?Qu¨¦ le atrajo de la serie y del personaje de Luc¨ªa?
Respuesta. Me llegaron tres guiones de Nerea Castro [creadora de la serie] y me enamor¨® completamente por su escritura, por su inteligencia y su manera de retratar una sociedad. Un personaje femenino llevando la acci¨®n es muy apetecible, porque cuando somos j¨®venes quiz¨¢s sea m¨¢s f¨¢cil, pero cuando empiezas a cumplir a?os, es dif¨ªcil ver a personajes as¨ª de mi edad, de 48 a?os. Es un personaje deseante, en el momento m¨¢s alto de su vida, cumpliendo todos los sue?os, y se tiene que hacer cargo de una nueva realidad. Todo eso con lo que hab¨ªa so?ado se desmorona. Y sin pod¨¦rselo contar al amor de su vida, que es Basilio, que interpreta Hugo Silva. Me parec¨ªa un personaje que no es divertido en s¨ª, pero es muy surrealista y muy loco todo lo que le ocurre a su alrededor.
P. Los personajes se meten en una red de mentiras para mantener las apariencias. ?Entiende la obsesi¨®n que tienen?
R. S¨ª, los entiendo y los acompa?o. Cuando tengo que interpretar un personaje, lo tengo que justificar a muerte, y entiendo lo que hace, lo acompa?o y no lo juzgo. Me puede provocar quebraderos de cabeza, porque yo soy m¨¢s honesta y prefiero llegar a casa y confesar aunque las consecuencias puedan ser nefastas, pero entiendo muy bien a Luc¨ªa. Ella considera que hay muchas cosas que necesitamos en la vida, ha conseguido hacer check a todas las cosas que, como sociedad, a veces nos cuentan desde peque?as: tienes que conseguir un trabajo buen¨ªsimo, tienes que conseguir tu pareja ideal, tienes que ser madre de familia, tener hijos, una casa bonita, un coche, tener dinero para ser feliz. Luc¨ªa en este viaje va aprendiendo que todas esas necesidades que consideraba propias no lo son, y que, desprendi¨¦ndose de casi todas ellas, encuentra un equilibrio que no hab¨ªa tenido hasta ahora.
P. ?Usted qu¨¦ ha aprendido de Luc¨ªa?
R. Es muy gracioso porque llevo 30 a?os interpretando a personajes a los que me gustar¨ªa volver a hacer otra vez, porque no hay ninguno que haya dicho, uff, no. Me han ca¨ªdo bien todos. Pero por Luc¨ªa tengo un especial cari?o. Hay algo de encontrar el equilibrio que yo siempre busco en mi vida, escucho mucho a gente muy sabia que habla de c¨®mo poco a poco la sociedad nos hace pobres cuando lo que uno quiere es enriquecerse, porque nos embargamos y cada vez queremos conseguir m¨¢s cosas que nos hacen muy esclavos, nos quitan nuestra libertad y nuestra disponibilidad. ?Cu¨¢nto tienes que trabajar para poder ser libre? ?Hasta d¨®nde?
P. En la serie tambi¨¦n se habla de la obsesi¨®n por la apariencia f¨ªsica. Su personaje monta un negocio de est¨¦tica clandestino. ?Usted se ha sentido alguna vez esclava de la apariencia f¨ªsica?
R. Soy una persona tremendamente despreocupada. Tiendo a lo contrario que hace normalmente la gente a mi edad, que es cuidarse un poco m¨¢s. He tenido que aprender con dermat¨®logos a pinchar y a saber en qu¨¦ consiste este negocio y c¨®mo se hace para que no cante. He aprendido a pinchar, he visto c¨®mo hac¨ªan tratamientos a otras personas, he estado con cuatro o cinco dermat¨®logos, quer¨ªa ver qu¨¦ tipo de intervenciones se hacen. Yo llevo 30 a?os trabajando, tambi¨¦n me hago mayor y me doy cuenta de que a la gente le apetece ver a gente m¨¢s joven, y solo espero conseguir atravesar el bache este de la edad en la que nadie considera que tienes una edad interesante para contar cosas. Es un tema muy complicado y delicado y que padezco. Yo pido que no se retoquen las fotos, me gusta que se ruede sin filtros¡ ?Por qu¨¦ a una actriz le tienes que poner un filtro para intentar disimular el paso del tiempo y a un actor no? Tengo 48 a?os, dej¨¢dmelos. Ojal¨¢ pueda contar con los rasgos de mi cara muchos a?os m¨¢s lo que supone hacerse mayor. A m¨ª me est¨¢n pasando cosas mucho m¨¢s interesantes a los 48 que a los 35 y que a los 20.
P. ?Nota que le llegan menos propuestas?
R. Empec¨¦ con 19 a?os y me he dado cuenta de que este ha sido el primer verano en 30 a?os que he tenido dos meses libres. Tambi¨¦n yo he parado de manera voluntaria en dos momentos puntuales por un tema personal, y lo he decidido muy mayor porque quer¨ªa que fuese as¨ª. No quer¨ªa ser mam¨¢ y dejar que a mis hijos los cuidase otra persona. Pero estoy de vuelta, ?estoy de vuelta! S¨ª, he notado que es una edad complicada para recibir proyectos. Tengo muchas ganas de trabajar, pero bueno, llegar¨¢n. Pero yo en 30 a?os no he parado, otros compa?eros han tenido muchos m¨¢s parones y muchos no han hecho m¨¢s cosas. Es un oficio tremendamente injusto donde solo el 4% de los actores puede vivir de la actuaci¨®n.
P. En su carrera ha hecho mucho m¨¢s drama que comedia. ?C¨®mo se ha sentido en la comedia?
R. S¨ª. Pero mi segunda pel¨ªcula fue una comedia, Familia, de Fernando Le¨®n de Aranoa, y me sent¨ª muy c¨®moda. Es m¨¢s dif¨ªcil. Me resulta m¨¢s dif¨ªcil por el ritmo, por lo fino que tienes que hilar, y la direcci¨®n tiene que ser impecable, porque la alta comedia es un equilibrio muy delicado, no puede caer ni una ficha, porque todo es tan surrealista, que tiene que estar arriba. Cuando empec¨¦ a ensayar con F¨¦lix Sabroso y con Marta Font [directores de la serie], F¨¦lix volv¨ªa a una pel¨ªcula de Pedro [Almod¨®var], Mujeres al borde de un ataque de nervios, donde Carmen Maura no est¨¢ en registro de comedia y todos los dem¨¢s s¨ª lo est¨¢n. A ella le cae el diluvio encima, est¨¢ a punto de ca¨¦rsele el mundo encima todo el rato, est¨¢ llorando todo el rato, hecha polvo, y quer¨ªa que fu¨¦semos por ah¨ª. Los dem¨¢s personajes s¨ª est¨¢n m¨¢s en comedia. Yo me he sentido muy c¨®moda, hab¨ªa tenido mucho tiempo para leer los guiones. Esther [Garc¨ªa, productora de la serie] me ofreci¨® este proyecto cuando estaba embarazada de mi segunda hija y me dijo que me esperar¨ªa el tiempo que hiciese falta y se lo agradecer¨¦ siempre porque no es lo normal. Y tuve mucha relaci¨®n con Nerea Castro antes de empezar a rodar, trabajamos mucho antes de que se incorporasen los directores.
P. En cuanto al hecho de mentir¡ ?es de utilizar mentiras, aunque sean piadosas? ?O prefiere ir con la verdad por delante?
R. Soy un desastre. Cuando era peque?a y hac¨ªamos alguna trastada con mis amigos, me dec¨ªan, ¡°Elena, t¨², no¡±. Y siempre terminaba abriendo la boca y fastidi¨¢ndola. Pues eso se mantiene, tengo 48 a?os y sigo mintiendo fatal. He tenido que mentir alguna vez porque me han obligado. En mi primer casting me dijo mi representante: miente, como una bellaca. Tienes 19 a?os, pero si tienes m¨¢s de 16, no me dejan que hagas el casting. Yo les he dicho que tienes 15. El director me pregunt¨® mi edad, me dijo: no me mientas, porque han venido aqu¨ª 300 chicas y ya tengo un detector de mentiras que se me enciende una luz roja y te vas, no haces la prueba. Y dije, 15. Y vi que no sal¨ªa ninguna luz roja y dije, bueno, vamos a empezar. Y esa mentira fue horrible porque se la trag¨®, me dieron el papel protagonista. Me dijeron que qui¨¦n iba a venir de mi familia para firmar el contrato, si mi padre o mi madre. Pero yo no era menor. Yo estaba en Madrid estudiando en la RESAD, viviendo con dos chicos franceses. Me tuve que descubrir y ¨¦l me dijo que lo iba a hacer, pero que ten¨ªa que mantener la mentira todo el rodaje. Tuve que mentir dos meses. Me vino muy bien porque mi personaje ment¨ªa toda la peli. Sal¨ª tan arrepentida de esa experiencia que ahora voy por delante con: ¡°Hola, tengo 48 a?os¡±. Y de hecho te lo he repetido varias veces en la entrevista.
P. ?C¨®mo elige sus proyectos? ?Con el tiempo ha cambiado en qu¨¦ se fija para ello?
R. Yo rechac¨¦ mi segunda peli. No ten¨ªa un duro: ten¨ªa 19 a?os, estaba buscando trabajo de lo que fuese y me llamaron para hacer una pel¨ªcula, pero no me sent¨ªa a gusto, algo hubo en m¨ª que dije, ¡®?uf!, no me estoy sintiendo bien con este personaje, con esta direcci¨®n, no s¨¦ hacia d¨®nde quieren ir¡, no lo voy a hacer¡¯. Y dije que no, adem¨¢s era en otra ciudad, y me fui de las oficinas, y dije, ?guau!
P. Adi¨®s, carrera.
R. Adi¨®s, carrera. Recuerdo perfectamente que dije, no me van a volver a llamar. Y por dejar esa peli, a las tres semanas, Fernando Le¨®n de Aranoa me estaba buscando, y no me encontraba porque me hab¨ªa regalado un m¨®vil mi representante, y yo nunca lo usaba, y mi representante me sac¨® de una clase de acrobacia para ir a hacer un casting de Familia. No se acab¨® mi carrera, sino que hice esa pel¨ªcula que fue una ayuda para que luego me llamasen Julio Medem, Almod¨®var¡
P. ?Alguna vez se ha arrepentido de un s¨ª o un no que haya dado a un proyecto?
R. [Piensa] S¨ª, pero he intentado salir con la m¨¢xima dignidad posible. Soy muy peleona, me he peleado mucho con gente porque he dicho, ¡°esto no es lo que hab¨ªamos hablado, este no es el guion que hab¨ªamos firmado, mi personaje tiene que hacer esto y a m¨ª no me parece bien, entonces tienes que cambiarlo¡±. En ese momento, el equipo de productores dice, ¡°tienes raz¨®n, ?c¨®mo podemos hacer para que est¨¦s contenta?¡±. Me pas¨® en Sud¨¢frica, est¨¢bamos rodando a 50 grados, me dieron los nuevos guiones, los le¨ª y dije, ¡°esto no es¡±. Cambiaron porque quer¨ªan algo m¨¢s comercial. ?Y los valores, y la ¨¦tica, y lo que le queremos contar al mundo, que era una epidemia global antes de que ocurriese? Y todos se callan, hay un minuto de silencio donde dices, uffff. O, bueno, me pas¨® en Hollywood una vez en una megaproducci¨®n: el director me pidi¨® ser s¨²per honesta en la lectura de guion con todo el equipo art¨ªstico y los productores, 100 personas en una sala. Yo dije lo que pensaba. Era un guion que no hac¨ªan m¨¢s que reescribir, y cada vez era peor. Dije lo que sent¨ªa que ten¨ªa que decir y me despidieron. Me despidieron. Me pidieron sinceridad y, como te he dicho al principio de esta entrevista, no s¨¦ mentir. Los dem¨¢s se callaron, pero la pel¨ªcula fue un fracaso absoluto, as¨ª que no me arrepiento.
P. De esa que se libr¨®.
R. Me libr¨¦, me libr¨¦. Conoc¨ªa ya a gente del equipo, y me dijeron que qu¨¦ lista hab¨ªa sido. Pero yo lo pas¨¦ fatal, llor¨¦ tres d¨ªas seguidos porque dije, ostras, qu¨¦ precio se paga por ser honesta¡ Luego la historia acab¨® bien por otro aspecto, porque en Estados Unidos, si te expulsan as¨ª, te pagan toda la pel¨ªcula para que no los denuncies por despido improcedente.
P. ?ltimamente, est¨¢ haciendo m¨¢s series que pel¨ªculas. ?Llegan m¨¢s ofertas de la televisi¨®n que del cine?
R. S¨ª, el a?o pasado hice Fatum, y despu¨¦s Mentiras pasajeras, y despu¨¦s de esta serie ha llegado a otra serie, y antes de eso, he rodado una serie con Brendan Fraser en Sud¨¢frica y otra con Richard Gere en Londres, y otra independiente en Canad¨¢¡ El ¨²ltimo proyecto que he hecho para Disney lo ha dirigido Clara Roquet, que acaba de ganar un Goya por Libertad y que ha dirigido los seis cap¨ªtulos [la serie Las largas sombras]. Siento la misma responsabilidad, que es enorme, por hacer una pel¨ªcula con Woody Allen o una serie con F¨¦lix Sabroso o Marta Font. Son mis directores y la responsabilidad es m¨¢xima, lo tienes que hacer muy bien. No hay opci¨®n de ninguna tonter¨ªa, tienes que ir y darlo todo, como si fuese el ¨²ltimo trabajo que hagas en tu vida.
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