El escenario Trump

El desenlace de la campa?a electoral norteamericana es un misterio. Las apuestas le dan el triunfo a Donald Trump, aunque por un margen, d¨ªa a d¨ªa, decreciente. Pero las encuestas insisten con un empate. Las grandes inc¨®gnitas sobre el futuro de los Estados Unidos, y sobre la proyecci¨®n de ese futuro hacia el resto del planeta, est¨¢n asociadas a una victoria de Trump. Es decir, a la posibilidad de un cambio.

El discurso econ¨®mico del candidato promete ya alteraciones de primera magnitud. La promesa m¨¢s inquietante es reforzar el proteccionismo que hab¨ªa caracterizado su primera experiencia en el gobierno. Ya no se tratar¨ªa de una suba de aranceles de importaciones que impacte en un aumento de los precios del 0,3%, como la que se dispuso durante la primera presidencia. Esta vez Trump promete desplegar una barrera del 60% sobre todas las importaciones chinas. Expertos del banco JP Morgan calculan que esa medida forzar¨ªa un incremento de los precios del 1,1%. Si se le agrega un arancel universal del 10% como el que anuncia el l¨ªder republicano, los precios se disparar¨ªan un 1,5% adicional. Hay que contemplar la reacci¨®n de China, porque ese escenario, seg¨²n los mismos economistas, recortar¨ªa el crecimiento del PBI de ese pa¨ªs en casi 2 puntos porcentuales.

Los adelantos de Trump, si de verdad se concretaran, tendr¨ªan consecuencias muy relevantes para la econom¨ªa global. En especial porque es probable que esa carrera de precios frenar¨¢ la ca¨ªda en la tasa de inter¨¦s que fija la Reserva Federal. El fortalecimiento del d¨®lar derivado de esa decisi¨®n monetaria implicar¨ªa que el resto de las monedas se depreciar¨ªan. Y tambi¨¦n perder¨ªan valor los t¨ªtulos de los pa¨ªses afectados por ese movimiento. Este escenario, que no es m¨¢s que eso, un escenario, hace suponer una derivaci¨®n inesperada: que si triunfa Kamala Harris el sistema financiero festeje con una mejora inmediata en el precio de todos los activos. Habr¨¢ que ver.

En el campo institucional, Trump tambi¨¦n amenaza con un gran cimbronazo. Prometi¨® establecer una breve dictadura. Adem¨¢s del Senado, ?los republicanos conquistar¨¢n la C¨¢mara de Representantes? Si fuera as¨ª, el presidente de ese partido podr¨ªa cumplir con su sue?o: reestructurar el Departamento de Justicia, designando como jefe a un Attorney General de la m¨¢xima obediencia. Es el equivalente de un fiscal general, que lidera el Departamento de Justicia. Es el jefe del FBI, que tuvo a Trump como blanco desde que abandon¨® la Presidencia.

La otra gran agencia que podr¨ªa estar sometida al ¨ªmpetu reformista del autodenominado dictador es la CIA. El candidato de la ultraderecha detect¨® all¨ª filtraciones y, si se quiere, deslealtades, en especial en la rivalidad con los chinos.

La batalla con China es una materia de consenso con los dem¨®cratas que promueven a Kamala Harris. En la guerra de Israel contra Ham¨¢s y sus derivaciones, que terminan en los ataques selectivos a Ir¨¢n, tampoco parece haber disidencias. Los senderos tal vez se bifurquen cuando aparezca el desenlace del conflicto. O, para decirlo mejor, cuando Benjamin Netanyahu, de regreso de esa guerra, se reencuentre con los problemas dom¨¦sticos a los que sigue expuesto. La presencia de Trump en la Casa Blanca, es decir, la presencia del suegro de Jared Kushner en la Casa Blanca, podr¨ªa ser un alivio. Kushner ha sido el puente m¨¢s activo entre Trump y la pol¨ªtica israel¨ª.

El gran giro de la pol¨ªtica exterior estadounidense, que podr¨ªa verificarse con un cambio de signo pol¨ªtico en el gobierno, est¨¢ referido a Rusia. Vladimir Putin ha sido en estos a?os un factor de profunda disidencia en la pol¨ªtica dom¨¦stica norteamericana. Es muy posible que el regreso de Trump al poder tenga una primera v¨ªctima en Volodimir Zelensky por la suspensi¨®n de la ayuda militar a Ucrania. Ser¨ªa parte de un alejamiento general de Europa y de la OTAN. El Departamento de Estado alentar¨ªa un acuerdo que podr¨ªa derivar en la existencia de dos Ucranias. De ese modo, Rusia alcanzar¨ªa su objetivo principal: dominar el Donbas. ?Qu¨¦ ganancias se fijar¨ªa Trump para esa negociaci¨®n? Algunos expertos especulan con que Am¨¦rica Latina estar¨ªa en las conversaciones a prop¨®sito de un solo tema: que Rusia deje de respaldar al r¨¦gimen de Nicol¨¢s Maduro. Desde siempre el acercamiento de Putin a Maduro se vio como un impulso sim¨¦trico de las intervenciones de Washington en Ucrania. Y, por lo tanto, ex¨®tico.

La situaci¨®n venezolana tiene relevancia porque ha sido, en la administraci¨®n Trump, casi el ¨²nico foco de inter¨¦s en el mapa latinoamericano. ?Seguir¨¢ siendo as¨ª? Hay algunos factores que explican cierta desatenci¨®n. Uno de ellos es que la ecuaci¨®n energ¨¦tica global se modific¨® desde la invasi¨®n rusa a Ucrania. Es la raz¨®n por la que el gobierno de Joe Biden retom¨® las conversaciones con el chavismo, olvidando que no reconoc¨ªa a su gobierno, sino al de Juan Guaid¨®. Otro motivo es que es que la nueva situaci¨®n del mercado energ¨¦tico mejor¨® las cuentas venezolanas, concediendo a su recrudecida dictadura una autonom¨ªa cada vez m¨¢s pr¨®xima del aislamiento.

Hay un impacto de un eventual triunfo de Trump que es indirecto. Se lo podr¨ªa llamar efecto de convalidaci¨®n. Los movimientos pol¨ªticos que tienen afinidad con el l¨ªder republicano se ver¨¢n ratificados en su orientaci¨®n y, es muy posible, tomen m¨¢s impulso. En el elenco pol¨ªtico de la regi¨®n se recortan dos amigos del candidato republicano: Jair Bolsonaro en Brasil y Javier Milei, el presidente de Argentina, que particip¨® de la campa?a de Trump. Milei espera que su socio norteamericano, adem¨¢s de convalidar su orientaci¨®n general, lo ayude con la econom¨ªa, sobre todo por la influencia de los Estados Unidos en el Fondo Monetario Internacional. Esa ayuda va a ser importante porque es posible que la pol¨ªtica general que promete Trump perjudique a los pa¨ªses emergentes.

En lo pol¨ªtico la din¨¢mica es m¨¢s n¨ªtida. Si los votantes de los Estados Unidos eligieran ma?ana de nuevo al empresario, es posible que la ultraderecha que encarnan esos dos l¨ªderes se radicalice, sobre todo en sus rasgos populistas, induciendo a una mayor polarizaci¨®n entre los argentinos y los brasile?os.

Suscr¨ªbase aqu¨ª a la newsletter de EL PA?S Am¨¦rica y reciba todas las claves informativas de la actualidad de la regi¨®n.