&Matarife*, la serie que desinform車 a la sociedad colombiana
Un fallo de la Corte Constitucional concluye que el creador del proyecto difundi車 varias afirmaciones falsas y le pide una rectificaci車n. El alto tribunal considera que vulner車 el derecho a la honra y buen nombre del expresidente Uribe, pero tambi谷n imparte una clase de periodismo y habla de ※desinformaci車n§
La compleja tarea para encontrar la verdad sobre la larga guerra en Colombia 〞qui谷nes son sus m芍ximos responsables y qui谷nes sus v赤ctimas〞 ha sido extremadamente dif赤cil para varias instituciones acad谷micas o jur赤dicas. Pero adem芍s de las dificultades evidentes para encontrar lo silenciado en un conflicto 〞las pruebas, los testimonios, los archivos〞 hay otro elemento igualmente peligroso para conocer la verdad: la d...
La compleja tarea para encontrar la verdad sobre la larga guerra en Colombia 〞qui谷nes son sus m芍ximos responsables y qui谷nes sus v赤ctimas〞 ha sido extremadamente dif赤cil para varias instituciones acad谷micas o jur赤dicas. Pero adem芍s de las dificultades evidentes para encontrar lo silenciado en un conflicto 〞las pruebas, los testimonios, los archivos〞 hay otro elemento igualmente peligroso para conocer la verdad: la desinformaci車n. La popular serie digital Matarife, del abogado Daniel Mendoza Leal, supuestamente iba a denunciar la verdad sobre un gran criminal y genocida de los 迆ltimos 30 a?os. Pero m芍s bien termin車, seg迆n la conclusi車n de la Corte Constitucional, desinformando a los ciudadanos.
La clase de periodismo esta semana la impartieron tres magistradas de la Corte. ※El ejercicio period赤stico irresponsable llevado a cabo por el se?or Mendoza Leal afect車 el derecho de la sociedad a estar informada§, afirma un fallo contra el creador y guionista de la serie. ※En criterio de la Sala, la desinformaci車n sobre asuntos de inter谷s y relevancia p迆blica relacionados con el funcionamiento del Estado y el conflicto armado es profundamente nociva§, se?alan. Desinformar, a?aden, ※destruye injustificadamente la confianza de los ciudadanos en las instituciones y crea escenarios infundados de zozobra, terror y miedo que obstaculizan la consolidaci車n de proyectos de reconciliaci車n en la sociedad§.
La decisi車n de la Corte Constitucional llega despu谷s de que el expresidente ?lvaro Uribe V谷lez interpusiera una demanda contra Daniel Mendoza. De acuerdo con la serie, Uribe ser赤a un ※genocida§, el l赤der de una organizaci車n criminal durante los 迆ltimos 30 a?os 〞cuando fue gobernador de Antioquia, presidente y congresista〞, y el responsable del asesinato de tres figuras nacionales: Rodrigo Lara Bonilla, exministro de Justicia, asesinado en 1984; Guillermo Cano, exdirector del diario El Espectador, asesinado en 1986; Jaime Garz車n, humorista y periodista, asesinado en 1999. Varios medios, entre ellos EL PA?S, se hicieron eco entonces del 谷xito de la serie cuando fue publicada en distintas redes sociales.
Uribe, en su demanda, sosten赤a que el creador de la serie 〞de tres temporadas y 26 cap赤tulos〞 hab赤a vulnerado sus derechos fundamentales a la honra, buen nombre y presunci車n de inocencia. La Corte Constitucional, al mirar el detalle de las acusaciones en la serie, le dio la raz車n. Ese es el tipo legal que sujeta la resoluci車n. Pero la sentencia tambi谷n le dio una clase de periodismo a Daniel Mendoza, al expresidente y a los medios de comunicaci車n, diferenciando de forma quir迆rgica lo que es opini車n y lo que es informaci車n corroborada.
※Creo en ese sentido que la sentencia es 迆nica§, dice a EL PA?S Jonathan Bock, director de la Fundaci車n para la Libertad de Prensa (FLIP). ※La sentencia hace valoraciones del periodismo protegiendo la libertad de expresi車n, pero tambi谷n lo hace mirando el impacto en la audiencia de la desinformaci車n. Y en ese sentido no se centra en el da?o a ?lvaro Uribe, sino mira un da?o m芍s general. El fallo hace valoraciones frente a la responsabilidad de los medios, y los periodistas, pero no me parece que lo haga desde una mirada restrictiva. Me parece que pone en el centro la importancia de la desinformaci車n, lo que pasa cuando se deja de recibir informaci車n certera y veraz sobre temas como el conflicto§.
La clase de periodismo a Daniel Mendoza: los testimonios deben corroborarse
Frente al asesinato de Lara Bonilla, Mendoza present車 a la Corte dos testimonios que, al ser evaluados por las magistradas, no acusan a Uribe del asesinato. ※No s車lo no indican que el se?or Uribe V谷lez fue el determinador del homicidio, sino que ni siquiera lo vinculan con este§, dice el fallo. Frente al de Guillermo Cano, la Corte dice que los testimonios que cita Mendoza ※s車lo indican que el accionante habr赤a tenido v赤nculos (comerciales, laborales o de amistad) con los responsables del homicidio, pero ninguno se?ala, ni siquiera sugiere, que [el expresidente Uribe] fue el asesino determinador§.
Y frente al asesinato de Jaime Garz車n, aunque Mendoza menciona el testimonio de un exjefe paramilitar que afirm車 que Uribe estuvo en una reuni車n en la que se habr赤a ordenado el crimen, el periodista no puede corroborar esa informaci車n. Por ende, dice la Corte, ※estaba obligado a adoptar formas ling邦赤sticas dubitativas que denotaran la falta de seguridad sobre la culpabilidad del accionante§. En otras palabras, que una persona haya denunciado a alguien de un crimen no le permite inmediatamente a un medio informar como si fuera una verdad verificada. Necesita evidencia, adem芍s de ser claro en que se trata de la versi車n de un tercero.
Algo parecido argumenta la Corte Constitucional con respecto a las acusaciones que dicen que ?lvaro Uribe es ※un genocida§ y que dirigi車 una corporaci車n criminal durante 30 a?os. Si bien la Corte se?ala que algunas veces estas aseveraciones fueron utilizadas como ret車rica por Daniel Mendoza 〞opiniones exageradas, protegidas por la libertad de expresi車n〞 en otros casos 谷l las present車 como si fueran conductas verificadas.
※Est芍 probado en muchos expedientes§, dijo Mendoza en una entrevista televisiva al pol赤tico de izquierda Hollman Morris. ※Uribe es el m芍s despiadado genocida de Latinoam谷rica. Para poder afirmar hay que ser penalista. No es una exageraci車n§, agreg車 Mendoza en 2020, quien es abogado penalista. Afirmaciones que hizo cuando la corroboraci車n no exist赤a.
La Corte explica que hay personas que han acusado a Uribe de genocidio 〞como una de las madres de un joven ejecutado por el Ej谷rcito durante la presidencia de Uribe, por ejemplo〞 y sus expresiones est芍n protegidas por la libertad de expresi車n. Pero como director de un documental estas ※son acusaciones que el se?or Mendoza Leal llev車 a cabo a t赤tulo personal§, y esas afirmaciones en un medio ※deben satisfacer los principios de veracidad e imparcialidad§. Ah赤, dice la Corte, Mendoza no hizo la tarea.
No indica la Corte con esto que es imposible acusar a alguien de genocidio, o de un crimen, sino que si esto se va a hacer, debe tener un ※soporte serio, razonable y suficiente§. Y, si no lo tiene, debe presentar la informaci車n con un ※lenguaje dubitativo o condicional, de modo que la audiencia no sea inducida a dar por establecida la responsabilidad penal del funcionario cuando solo existen denuncias, informes o se encuentran en curso investigaciones§. Las acusaciones, insisten, fueron ※una inferencia§.
La clase de periodismo, m芍s corta, a ?lvaro Uribe: la injuria no es ciberacoso
La lecci車n al expresidente es la que menos visibilidad ha tenido, pero la Corte tambi谷n dej車 en claro varios puntos. ?lvaro Uribe argumentaba que las afirmaciones de Mendoza ※constituyen un discurso de odio que hace expresa apolog赤a a la violencia§. La Corte Constitucional discrepa. Dice que en la serie de Daniel Mendoza no hubo una incitaci車n a hacer da?o a una persona o grupo de sujetos, y que si bien algunas expresiones son ※enga?osas, ofensivas, exageradas y desproporcionadas§, una injuria no equivale a un discurso de odio para que hagan da?o.
Uribe tambi谷n argumentaba que las publicaciones 〞todas digitales〞 llevaban al ciberacoso, pero la Corte Constitucional dice que las publicaciones no cumplen con lo que se entiende como hostigamiento, y menos hacia un funcionario p迆blico que ha tenido tantos cargos p迆blicos como el expresidente y por ende debe aceptar que es objeto de escrutinio constante. Estos funcionarios ※est芍n obligados a soportar la cr赤tica constante de la ciudadan赤a, los medios de comunicaci車n y los periodistas§, concluye la Corte.
En otras palabras, los 19 trinos, una entrevista televisiva, y los 26 cap赤tulos de la serie de Daniel Mendoza no son ciberacoso para alguien que fue gobernador, congresista y presidente. Adem芍s, recuerda la Corte Constitucional, contra el expresidente Uribe han cursado recientemente varios procesos judiciales en la Fiscal赤a, dos en la Corte Suprema, y 43 investigaciones en el Congreso. Si bien no ha sido declarado culpable en ninguno proceso, y tiene derecho a la presunci車n de inocencia, ※esto implica que el umbral de sistematicidad exigible para que un conjunto de publicaciones pueda ser considerado ciberacoso en contra del accionante es a迆n m芍s exigente y estricto§.
La lecci車n a los medios de comunicaci車n: opini車n e informaci車n no son lo mismo
La Corte hace una aclaraci車n importante antes de ver los detalles de las acusaciones hechas por Daniel Mendoza. Primero diferencia las opiniones, que ※en principio no est芍n sujetas a las cargas de veracidad e imparcialidad, 迆nicamente deben tener un m赤nimo de fundamentaci車n f芍ctica y plausibilidad y no ser publicadas con una intenci車n da?ina§. Y luego habla de las denuncias que se leen como informaci車n, que ※deben satisfacer los principios de veracidad e imparcialidad§, dice el alto tribunal.
Lo in谷dito es que la Corte misma dice que ellos, como magistrados, no han realmente ※definido cu芍l es el est芍ndar de veracidad e imparcialidad§. Explica que ha habido dos posturas en el pasado: la que dice que solo se puede se?alar a alguien de un crimen si ya hay un fallo penal en pie; y la que dice que no debe haber un fallo penal para hacer una acusaci車n, pero s赤 se debe ser cuidadoso al hacerla, intentando ser lo m芍s veraz e imparcial posible. Es decir, intentando conseguir varias pruebas que justifiquen la acusaci車n, y teniendo en cuenta las explicaciones de la parte acusada.
Con este fallo, el Constitucional defiende la segunda postura porque, de lo contrario, se vulnerar赤a la libertad de expresi車n si siempre hay que esperar a que un juez falle una acusaci車n. ※Puede provocar un efecto paralizador y de autocensura, que impedir赤a que los medios de comunicaci車n y periodistas puedan ejercer su rol de guardianes de la democracia§, explica el fallo.
Adem芍s, la Corte con este fallo toma una postura frente a las publicaciones en redes sociales. Aunque entiende m芍s a Twitter o a Youtube como intermediarios que como medios de comunicaci車n, no descarta que el contenido publicado en estas redes puede ser period赤stico 〞como el documental que comparti車 Daniel Mendoza〞 y que por ende estos contenidos debe ser evaluados con los mismos criterios con los que se mide a los medios. La Corte le pide una rectificaci車n a Daniel Mendoza, pero no ordena retirar su serie de Youtube, ni los trinos de este contra Uribe de Twitter, porque argumenta que otras acusaciones que hace la serie contra otros funcionarios no fueron estudiadas en este fallo por la Corte Constitucional. Pero deja claro, con esta emblem芍tica decisi車n, que no todo lo que se sube a Twitter o Youtube es solo opini車n. Y que para acusar a alguien de genocida o de autor de un magnicidio, se necesita m芍s que un par de testimonios sueltos.
Suscr赤base aqu赤 a la newsletter de EL PA?S sobre Colombia y reciba todas las claves informativas de la actualidad del pa赤s.