¡®Matarife¡¯, la docuserie sobre la oscura historia de ?lvaro Uribe que triunfa en internet
El abogado, periodista y criminalista Daniel Mendoza, exiliado en Europa, desgrana en su obra la relaci¨®n entre pol¨ªticos, narcotraficantes y paramilitares en los ¨²ltimos 40 a?os de Colombia
Una c¨¢mara prestada, el angosto s¨®tano de un restaurante y el apoyo de tres amigos: eso fue todo lo que necesit¨® Daniel Mendoza (Bogot¨¢, 1978) para filmar la primera temporada de la serie web Matarife, que se emiti¨® por primera vez en mayo de 2020 y desgrana la relaci¨®n entre pol¨ªticos, narcotraficantes y paramilitares en los ¨²ltimos 40 a?os de Colombia. El documental, que ha tenido un ¨¦xito sin precedentes en su pa¨ªs y acumula m¨¢s de 35 millones de visitas en el canal oficial, denuncia al expresidente ?lvaro Uribe (2002-2010) y sus presuntos v¨ªnculos con el narcotr¨¢fico. ¡°Publiqu¨¦ tres art¨ªculos de investigaci¨®n que se volvieron virales en el medio digital La Nueva Prensa sobre la carrera de Uribe y sus hilos con la corrupci¨®n, esa fue la g¨¦nesis¡±, explica Mendoza una tarde de septiembre en Madrid. Este abogado, periodista y criminalista tilda al senador de ¡°mafioso y genocida¡± bas¨¢ndose en las investigaciones period¨ªsticas, propias y de otros colegas de profesi¨®n como el reconocido Gonzalo Guill¨¦n, que expone en la serie.
El inter¨¦s medi¨¢tico que suscit¨® Matarife le llev¨® a sacar la segunda temporada en julio de 2021 y la tercera llegar¨¢ el pr¨®ximo a?o. Su intenci¨®n, asegura, es la misma que cuando empez¨®: ¡°Usar la informaci¨®n para despertar el inconsciente colectivo de la sociedad colombiana¡±. En el documental, Mendoza despliega casos de corrupci¨®n en la historia de Colombia, como los falsos positivos, que son ejecuciones de civiles a manos del Ej¨¦rcito. El Gobierno otorgaba por cada cad¨¢ver una serie de gratificaciones y los agentes hac¨ªan pasar como bajas en combate de miembros de grupos armados ilegales los asesinatos que comet¨ªan. Mendoza expone c¨®mo en el Ejecutivo de ?lvaro Uribe m¨¢s de 4.000 civiles colombianos fueron asesinados por agentes de las fuerzas de seguridad del Estado. Matarife tambi¨¦n narra las alianzas de determinados narcotraficantes con la ¨¦lite pol¨ªtica y econ¨®mica de Colombia y explica la historia reciente del pa¨ªs a trav¨¦s de las revueltas sociales, los asesinatos de activistas, la silenciaci¨®n de informaci¨®n y la cr¨ªtica a un aparato de poder que Mendoza tilda de criminal.
El germen de Matarife se remonta a los or¨ªgenes de Daniel Mendoza, que naci¨® en el seno de una familia de la ¨¦lite colombiana y fue miembro del selecto club El Nogal, un centro social donde se reun¨ªan altos mandos del poder corruptos que pactaban operaciones para enriquecerse. En El Nogal, que act¨²a de hilo conductor en la serie, Mendoza vio las relaciones entre el narcotr¨¢fico y la jet set del pa¨ªs, con Uribe al mando: ¡°Lo denunci¨¦ y me echaron de la instituci¨®n¡±. El pasado 14 de septiembre, la justicia declar¨® nula la expulsi¨®n, una victoria que Mendoza celebra como un triunfo de la libertad de expresi¨®n. El creador justifica as¨ª su implicaci¨®n en el producto audiovisual: ¡°Hablo de lo que conozco desde dentro, con datos concretos sobre delincuentes, narcos y paramilitares que se han cruzado en mi camino¡±.
La serie destaca por una narraci¨®n din¨¢mica que se asemeja al thriller de acci¨®n y combina denuncia y est¨¦tica: ¡°Se puede informar y emocionar a la vez, para despertar el lado cr¨ªtico de la sociedad hay que generar emociones en las personas¡±, defiende Mendoza, que cree haber mejorado los guiones, la fotograf¨ªa y la m¨²sica en la segunda temporada. La primera planteaba breves p¨ªldoras audiovisuales de menos de 10 minutos, mientras que la segunda presenta cap¨ªtulos de casi 40. La brevedad fue clave al inicio, porque su serie, recalca Mendoza, iba dirigida al ciudadano que tiene pocos minutos en el metro: ¡°Quer¨ªa captar la atenci¨®n del estudiante, del trabajador, de los de abajo¡±.
Un creador en el exilio: ¡°Vivo en Europa, pero existo en Colombia¡±
Para Daniel Mendoza, la principal finalidad de su obra es lograr que Colombia le pierda el miedo a Uribe, y por eso aparece en ambas temporadas dando la cara, como principal protagonista e hilo conductor de la historia: ¡°Decid¨ª exponerme porque era la ¨²nica forma de demostrar que no le tem¨ªamos¡±. El precio a pagar, reconoce, ha sido muy alto. A Mendoza le han amenazado de muerte y perseguido los peores carteles del narcotr¨¢fico y el paramilitarismo, por lo que pas¨® meses traslad¨¢ndose de un lugar a otro escondido en el maletero de los coches de sus amigos.
En marzo de 2020, cuando denunci¨® que en las elecciones que llevaron a Iv¨¢n Duque a la presidencia hubo una compra de votos en la que intervino Uribe en asociaci¨®n con el c¨¢rtel de la costa caribe?a, la situaci¨®n ya era insostenible: ¡°La Fundaci¨®n para la Libertad de Prensa y varios senadores progresistas pidieron mi protecci¨®n pero mi vida en Colombia era una huida permanente¡±, rememora Mendoza. Finalmente, tuvo que abandonar su pa¨ªs el pasado mayo y exiliarse en Europa. A trav¨¦s de Amnist¨ªa Internacional, el Gobierno franc¨¦s le permiti¨® refugiarse en la embajada de Francia, hasta que finalmente lo sac¨® de Colombia: ¡°Lo primero que pens¨¦ cuando se cerraron las puertas del avi¨®n fue que no iba a morirme. El segundo pensamiento fue que deb¨ªa hacer la segunda temporada ya¡±.
Estas condiciones fueron un reto endemoniado, en palabras del creador, para sacar adelante el trabajo: ¡°Se me ocurri¨® ubicar escenas en Francia, y la trama se desarrolla con un formato y una narrativa m¨¢s digeribles para el p¨²blico internacional¡±. La primera, explica, iba dirigida de forma casi exclusiva a la sociedad colombiana, mientras que la segunda pretende abarcar un p¨²blico m¨¢s diverso. ¡°Mi serie es un arma revolucionaria que busca denunciar un sistema corrupto¡±, resume Mendoza, que lamenta la situaci¨®n sociopol¨ªtica actual en Colombia. Numerosas organizaciones, como Human Rights Watch, verificaron la represi¨®n policial en abril de 2021, donde la polic¨ªa acab¨® con la vida de decenas de j¨®venes manifestantes. El creador de Matarife tiene claro que ¡°hay que comunicar al mundo lo que ocurre en nuestro pa¨ªs, cueste lo que cueste¡±.
Mendoza reconoce que hacer esta serie le ha complicado la vida para siempre pero defiende su elecci¨®n y asegura estar orgulloso del resultado: ¡°Todos nos dejamos la vida en algo y yo eleg¨ª hacerlo en este proyecto por el que tuve que exiliarme. ?Que si me arrepiento? S¨ª, me arrepiento cada d¨ªa, pero tambi¨¦n s¨¦ que volver¨ªa a dejarme la vida en ¨¦l si naciese ma?ana¡±.
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