Los desaciertos de Petro en Twitter: ¡°Que alguien le quite el tel¨¦fono al presidente¡±
Es el mandatario latinoamericano m¨¢s influyente en la red social y la us¨® con maestr¨ªa en la oposici¨®n y la campa?a, pero en el poder le est¨¢ costando sus mayores errores pol¨ªticos
El jueves pasado, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, lanz¨® 14 mensajes en Twitter. En uno le advirti¨® a la guerrilla del ELN ¡ªcon la que est¨¢ en marcha un proceso de paz¡ª del riesgo de seguir los pasos del narcotraficante Pablo Escobar. En otro, que acaba con la c¨®mica frase ¡°mi pap¨¢ no tiene novia¡±, desminti¨® a un medio de comunicaci¨®n. En dos, mencion¨® a sus hijos. En otro, recogi¨® su visita a Nari?o, un departamento del sur del pa¨ªs incomunicado por un derrumbamiento de tierra sobre la v¨ªa Panamericana. En otro, abog¨® por las listas electorales abiertas. En otro, retuite¨® al medio ¨¢rabe Al Mayadeen Espa?ol que inform¨® de una red de espionaje contra ¨¦l mismo. No se intuye detr¨¢s de los mensajes la mano de ning¨²n asesor, ah¨ª est¨¢n sus anhelos y sus fantasmas. Ah¨ª est¨¢ el Petro tuitero.
El mandato de Petro empez¨® el pasado agosto con buen pie. En estos primeros cinco meses ha logrado mantener una buena valoraci¨®n entre los colombianos y se ganado el respeto de quienes no ve¨ªan en ¨¦l m¨¢s que a un exguerrillero comunista que llevar¨ªa al pa¨ªs por la senda de la Venezuela chavista. La cantidad de reformas puestas en marcha y un gabinete que incluy¨® a pol¨ªticos de distintos espectros y con experiencia reconocida le ayudaron a configurar su imagen como presidente. Pero en la red social de Elon Musk, donde anunci¨® a cada uno de sus ministros o donde lanza sus decisiones m¨¢s importantes, Petro ha patinado en m¨¢s de una ocasi¨®n. La ¨²ltima, la noche de fin de a?o, en el que ha sido hasta ahora su mayor error pol¨ªtico.
Hemos acordado un cese bilateral con el ELN, la Segunda Marquetalia, el Estado Mayor Central, las AGC y las Autodefensas de la Sierra Nevada desde el 1 de enero hasta el 30 de junio de 2023, prorrogable seg¨²n los avances en las negociaciones.
— Gustavo Petro (@petrogustavo) January 1, 2023
La paz total ser¨¢ una realidad.
El 31 de diciembre el presidente estuvo muy activo en Twitter, convertido ya en su canal de comunicaci¨®n con los medios tradicionales. Los periodistas est¨¢n entre esta audiencia que ya suma casi 6,5 millones de seguidores y que le ha valido ser el cuarto l¨ªder mundial m¨¢s influyente del mundo, seg¨²n el ranking de Twiplomacy de 2022, solo por detr¨¢s de el indio Narenda Modi, Joe Biden y el turco Recep Tayyip Erdogan. Justo cuando pas¨® la medianoche, el presidente lanz¨® la que ser¨ªa la primera gran noticia del a?o para el pa¨ªs y toda Am¨¦rica Latina: anunci¨® el alto al fuego con el ELN. Apenas tres d¨ªas despu¨¦s, la guerrilla desminti¨® el acuerdo y se tens¨® el buen ambiente que se hab¨ªa generado alrededor de un proceso de paz fundamental para el futuro de Colombia y la regi¨®n.
?Qu¨¦ puede explicar que la senadora opositora cite a la revista que no quiere?
— Gustavo Petro (@petrogustavo) January 12, 2023
Pues cuando se encuentran en el chisme destructivo.
Mi pap¨¢ tiene 87 a?os y su esposa, con la que convivio hasta el ¨²ltimo dia, muri¨® hace dos meses. Mi pap¨¢ no tiene novia. https://t.co/wmaacxENcG
Eugenie Richard, docente e investigadora de la Universidad Externado de Colombia, asegura que no se puede gobernar bien comunicando mal. ¡°Si la comunicaci¨®n est¨¢ mal gestionada da la sensaci¨®n de que se gobierna mal. Se ve descontrol, improvisaci¨®n, amateurismo¡±, dice. Petro escribe ¨¦l mismo los mensajes y la mayor¨ªa de las veces no los consulta con su equipo. Mezcla informaci¨®n institucional con sus propias impresiones o se defiende de ataques personales sin distinci¨®n. Liliana G¨®mez, directora de la maestr¨ªa en Comunicaci¨®n de la Universidad Javeriana, sostiene que, si bien durante el pasado hizo un buen uso de Twitter, que le ayud¨® en buena medida a llegar al poder, ahora lo hace de forma ¡°p¨¦sima¡± porque desinforma y genera ruido.
El presidente es, adem¨¢s, muy r¨¢pido en sus tuits. Es habitual que cometa errores de escritura o vaya demasiado lejos en sus comentarios, lo que a veces lo hace parecer improvisado, como escrito sin pensar. El pasado 4 de septiembre la regi¨®n miraba a Chile. El presidente colombiano coment¨® el resultado del plebiscito sobre la nueva constituci¨®n, incluso antes de que se pronunciara el mismo Gabriel Boric. ¡°Revivi¨® Pinochet¡±, escribi¨® en Twitter cuando una noticia de la CNN avanzaba la victoria del no entre la mayor¨ªa de los chilenos, los mismos que meses antes hab¨ªan antes hab¨ªa elegido al izquierdista Boric como presidente, que por supuesto no relacion¨® en ning¨²n caso la votaci¨®n con el dictador. Durante el autogolpe fallido del expresidente peruano Pedro Castillo, Petro insisti¨® tanto en su apoyo al mandatario encarcelado en las redes sociales que provoc¨® la respuesta airada de Per¨² por intromisi¨®n en sus asuntos internos.
Todos los gobernantes aspiran a dominar la agenda p¨²blica. Lo hace el presidente mexicano, Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, con una rueda de prensa diaria a primera hora de la ma?ana en la que se explaya en sus comentarios y respuestas a periodistas. Desde bien temprano, suele colocar varios temas en los medios. Ese m¨¦todo, al contrario del uso de Twitter, es bidireccional y, a priori, m¨¢s democr¨¢tico. Hay periodistas presentes ¡ªquien quiera puede acreditarse¡ª y hay turnos de preguntas ¡ªnormalmente el equipo del presidente elige qui¨¦n lo hace, pero a veces se hace mediante sorteo. Petro ha dado muy pocas ruedas de prensa durante su mandato y en Twitter ese intercambio no existe. ¡°Le interesa que le escuchen, pero no tanto escuchar, es un manejo vertical de poder¡±, dice Richard.
El uso de Twitter ni siquiera es una novedad. Presidentes como Donald Trump, el primer gran mandatario tuitero, o el de El Salvador, Nayib Bukele, convirtieron la red social en su principal canal de comunicaci¨®n. Trump lleg¨® a decir que era presidente gracias a las redes sociales. Petro sigue esa estela, que en Colombia ya populariz¨® ?lvaro Uribe. Pero el expresidente lo us¨® sobre todo para hacer oposici¨®n a su sucesor Juan Manuel Santos y para evitar el ostracismo de la vida p¨²blica. Desde Twitter, lider¨® la campa?a del no al plebiscito del proceso de paz con las FARC, que acab¨® ganando en las urnas.
El poder de las redes es inmenso. G¨®mez explica que el candidato Petro s¨ª supo manejar Twitter en el pasado y cree que su campa?a presidencial fue la mejor que se ha visto en Colombia en a?os. ¡°Como es algo que le ha funcionado no lo quiere dejar de usar. Est¨¢ acostumbrado a ser oposici¨®n, pero hoy es el Gobierno y esa diferencia no le ha hecho clic en la cabeza. Siente que debe seguir conquistando¡±, dice. Petro abri¨® su cuenta en 2009 y le sirvi¨® como opositor, como alcalde de Bogot¨¢ y ahora se ha convertido en el primer canal de comunicaci¨®n del presidente de la Rep¨²blica.
Con el mensaje sobre el ELN muchos miembros del Gobierno y el gabinete se llevaron las manos a la cabeza. Habr¨ªa bastado, dicen fuentes cercanas a la negociaci¨®n con la guerrilla, con que el presidente hubiera escrito que el alto el fuego ¡°estaba cerca¡±, en lugar de darlo por hecho. Son muy pocos los que se atreven a decirle al presidente qu¨¦ hacer, que ejerce un poder natural sobre todo su equipo. En cinco meses, suma m¨¢s aciertos que errores, pero la mayor¨ªa de estos han llegado desde la red social. En Colombia ya se empieza a popularizar la frase de: ¡°Que alguien le quite el tel¨¦fono al presidente¡±.
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