As¨ª se gest¨® la salida de Alejandro Gaviria del Gobierno de Gustavo Petro
En la primera crisis de Gabinete, tras un semestre en el poder, salieron tambi¨¦n las ministras de Deporte y Cultura
La primera crisis de Gabinete de Gustavo Petro, como cualquier crisis, estall¨® tras una gestaci¨®n visible solo en parte. La decisi¨®n del presidente de sacar a tres de sus ministros este martes es un cap¨ªtulo, uno particularmente sonoro, de la tensi¨®n que produce su apuesta por una reforma sanitaria con cambios profundos al sistema que ha construido Colombia durante tres d¨¦cadas. Que el presidente decidiera relevar al ministro m¨¢s cr¨ªtico de esa propuesta, Alejandro Gaviria, y que lo hiciera justo en este momento, marca el derrotero de una reforma que probablemente defina el futuro del Gobierno...
La primera crisis de Gabinete de Gustavo Petro, como cualquier crisis, estall¨® tras una gestaci¨®n visible solo en parte. La decisi¨®n del presidente de sacar a tres de sus ministros este martes es un cap¨ªtulo, uno particularmente sonoro, de la tensi¨®n que produce su apuesta por una reforma sanitaria con cambios profundos al sistema que ha construido Colombia durante tres d¨¦cadas. Que el presidente decidiera relevar al ministro m¨¢s cr¨ªtico de esa propuesta, Alejandro Gaviria, y que lo hiciera justo en este momento, marca el derrotero de una reforma que probablemente defina el futuro del Gobierno.
Cuando Petro incluy¨® a Gaviria en su Gabinete como ministro de Educaci¨®n, la decisi¨®n se valor¨® como un gesto de apertura pol¨ªtica, de recibir a los diversos. Ven¨ªan de enfrentarse en la campa?a presidencial, en la que Gaviria busc¨® la candidatura de una coalici¨®n de centro que compet¨ªa con la izquierda. Aunque Petro lo elogiaba entonces, y lleg¨® a decir que era el m¨¢s inteligente de los competidores, estaban en orillas claramente opuestas. Gaviria ven¨ªa de ser rector de la m¨¢s prestigiosa universidad de ¨¦lite privada, Los Andes, y antes hab¨ªa sido por seis a?os ministro de Salud de Juan Manuel Santos.
Luego Gaviria lo apoy¨® para la segunda vuelta, ayud¨® a reducir el miedo a un in¨¦dito Gobierno de izquierda y un sector del centro termin¨® votando por Petro. Eso no es menor: aunque las campa?as no son ecuaciones, la suma de los votos que hab¨ªan obtenido su rival en el ballotage, Rodolfo Hern¨¢ndez, y el candidato m¨¢s a la derecha y m¨¢s antipetrista en la campa?a, Federico Guti¨¦rrez, eran m¨¢s que los de Petro y todas las dem¨¢s opciones.
Ya en el Gobierno, la reforma a la salud fue un fantasma permanente. Anunciada por Petro desde la campa?a, su designaci¨®n de la m¨¦dica Carolina Corcho como ministra de Salud le dio un cariz m¨¢s radical y claro. La actual ministra ha sido una fuerte cr¨ªtica del sistema, y especialmente de la funci¨®n de las afiliadoras y aseguradoras, las Entidades Promotoras Salud (EPS), a las que acusa de ver la salud como un negocio y no un derecho, y de negar sistem¨¢ticamente el acceso a los ciudadanos. Gaviria ha defendido la necesidad de que haya competencia entre aseguradores y de que haya un actor en el sistema con la capacidad y el incentivo de ser un ¡°comprador inteligente¡± de procedimientos, medicamentos y servicios.
Incluso en 2021, cuando Gaviria lanz¨® su aspiraci¨®n, Corcho dijo en su cuenta de Twitter que si no lo presionaban a virar su visi¨®n, ser¨ªa ¡°un duro candidato de las EPS a la Presidencia de Colombia¡±. Poco despu¨¦s, en un an¨¢lisis del desempe?o de Gaviria como ministro, profundiz¨® en esas cr¨ªticas. ¡°Si uno tuviera que caracterizar el grueso de la gesti¨®n de Alejandro Gaviria en el sistema de salud, uno podr¨ªa calificarlo como el logro de una sofisticada gesti¨®n tecnocr¨¢tica para atornillar, en una serie de actos administrativos y medidas, la salud como negocio y mantener a toda costa las EPS como intermediarias del sistema con flexibles exigencias de regulaci¨®n¡±, escribi¨®. ¡±Errar es de humanos, pero persistir en convicciones err¨®neas es inaceptable moralmente en un momento de crisis social, econ¨®mica y humanitaria que reclama cambios reales y profundos.¡±
La tensi¨®n era latente. Mientras el Gobierno se acomodaba, y el presidente priorizaba en su estrategia de cambio una reforma fiscal que daba recursos a todos los sectores, pod¨ªa pasar desapercibida. Pero cuando se hizo claro que la reforma a la salud iba a estar entre las prioridades para el primer semestre de 2023, y que la ministra la estaba construyendo de acuerdo a su visi¨®n en las ant¨ªpodas de la de Gaviria, aument¨®. Fue entonces que el ahora exministro escribi¨® un documento con sus reparos a la propuesta, que expuso en un consejo de ministros a fines de enero y que luego fue filtrado.
El documento mostraba su distancia, que se ha revelado insalvable, frente a la reforma. ¡°Todo esfuerzo reformista debe empezar por un diagn¨®stico, por un an¨¢lisis de lo que funciona y no funciona, por una evaluaci¨®n de las capacidades instaladas (nunca se comienza de cero) y las heterog¨¦neas realidades territoriales¡±, apuntaba en el arranque de sus reflexiones. ¡°Eso no ha ocurrido con la reforma a la salud que ahora se propone. El diagn¨®stico no es claro. Pareciera insinuar que todos, o la mayor¨ªa de los problemas se originan en la administraci¨®n (privada o no p¨²blica) del sistema. Como si eliminar las EPS fuera una soluci¨®n a los problemas de insostenibilidad financiera, corrupci¨®n y desigualdades territoriales. No es as¨ª. Los problemas financieros existen en todos los sistemas de salud. Los sistemas p¨²blicos europeos est¨¢n al borde de la quiebra¡±.
Los rumores de su renuncia empezaron a correr. ?l neg¨®, p¨²blicamente, que fuera a salir, e insisti¨® en el debate. Fueron varias reuniones de discusi¨®n. Algunos en un comit¨¦ estrat¨¦gico de alto nivel del Gobierno en el que estaban ¨¦l, los ministros de Interior, Alfonso Prada, y Ambiente, Susana Muhammad; el secretario de Presidencia, Mauricio Lizcano, el Consejero de regiones, Luis Fernando Velasco, y la secretaria privada del presidente, Laura Sarabia. Tambi¨¦n en el Consejo de Ministros. El tiempo corr¨ªa y la tensi¨®n aumentaba.
Lleg¨® a un punto muy alto cuando la ministra Corcho present¨® el borrador del proyecto a sus colegas, el jueves 9 de febrero. Eliminaba las EPS y creaba un sistema en el que el Estado administra todos los recursos, asegura la salud de los colombianos y audita y revisa las facturas que le env¨ªan los prestadores de salud, las cl¨ªnicas y profesionales.
Ese d¨ªa, Gaviria y otros tres miembros del Gabinete presentaron una carta de duros cuestionamientos al borrador. El grupo incluye tambi¨¦n a los ministros de Hacienda, Jos¨¦ Antonio Ocampo; Agricultura, Cecilia L¨®pez, y al director del Departamento de Planeaci¨®n Nacional, Jorge Iv¨¢n Gonz¨¢lez. Entre otras, advert¨ªan sobre el impacto fiscal de la iniciativa e insist¨ªan en que se debe mantener un modelo mixto de aseguramiento en salud. De los cuatro, Gaviria era el m¨¢s distante ideol¨®gicamente a Petro, el ¨²nico que hab¨ªa participado en Gobiernos de los que el presidente fue opositor, el ¨²nico que hab¨ªa sido ministro de Salud.
La existencia de ese documento se rumor¨® desde la semana siguiente. La tensi¨®n aument¨®. El presidente radic¨® el proyecto, que para Gaviria ten¨ªa muy pocos ajustes y que dej¨® a las EPS te¨®ricamente con vida pero muy debilitadas, convoc¨® a marchas para respaldarlo, lo defendi¨® desde el balc¨®n del palacio presidencial. La ministra L¨®pez explic¨® que efectivamente hab¨ªan argumentado, que a su juicio el documento hab¨ªa mejorado y que es usual en los Gobiernos que haya discrepancias que ayuden a mejorar las propuestas. ¡±Hicimos lo que toca¡±, dijo entonces. La pelota parec¨ªa haber salido del Gabinete para quedar en los partidos con representaci¨®n con el Congreso.
Pero entre este domingo y este lunes revivi¨® el choque. Primero la revista Cambio revel¨® el documento de los funcionarios, a pesar de que ninguno de los firmantes hab¨ªa querido hacerlo p¨²blico hasta entonces. La ma?ana del lunes, el presidente confirm¨® su autenticidad. Argument¨® que no hizo caso omiso de las cr¨ªticas, que se ajust¨® el borrador gracias a ellas y que el Ministerio de Hacienda hab¨ªa revisado el cuadro de costos de la reforma, por lo que el argumento de su carga fiscal ya no era v¨¢lido. Mostr¨® una tabla de costos diferente a la del documento filtrado. Horas despu¨¦s, tambi¨¦n el lunes, el ministro Ocampo p¨²blicamente refrend¨® que los costos revisados eran los v¨¢lidos: ante un comunicado conjunto de los ministerios de Salud y Hacienda, dijo v¨ªa Twitter: ¡°Este es el acuerdo actual del Gobierno sobre los costos de la reforma a la salud¡±.
Los lunes suele haber consejos de Ministros. Gaviria fue convocado a la Casa de Nari?o a una reuni¨®n que ser¨ªa posterior a la del presidente con las cabezas de los partidos de su coalici¨®n de Gobierno. A la salida de ese primer encuentro, Petro habl¨® en redes sociales, y se refiri¨® a la reforma: ¡°Hemos acordado que los presidentes de los partidos nos traer¨¢n propuestas para los art¨ªculos que consideren deben ser modificados. En la democracia la diversidad es vital, la b¨²squeda en medio de esa diversidad de consensos ha sido un principio del Gobierno¡±. El tono era de serenidad, no de tensi¨®n.
Poco despu¨¦s le avis¨® a Gaviria de su salida. Pasados pocos minutos hizo una alocuci¨®n presidencial, que ya hab¨ªa anunciado. ¡°En democracia, la diversidad de opiniones es un valor que yo comparto plenamente¡±, fue su primera frase. ¡°Estamos en un momento decisivo para nuestras reformas y necesitamos m¨¢s cohesi¨®n y determinaci¨®n.¡± dijo m¨¢s adelante. ¡°Agradezco los servicios prestados por los ministros Alejandro Gaviria, Mar¨ªa Isabel Urrutia y Patricia Ariza, Con sus aportes han contribuido a enriquecer el debate y a iniciar los cambios por los que vot¨® el pa¨ªs. Y los invito a que desde el lugar donde est¨¦n nos ayuden a construir este pacto social¡±, dijo casi al cierre. ¡°Seguiremos buscando consensos y acuerdos para consolidar y profundizar nuestras reformas. Mi gabinete y yo como Presidente de la Rep¨²blica seguimos comprometidos en sacar no solo las reformas, sino unas reformas que mejoren sustancialmente la vida de todos los colombianos y colombianas¡±.
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