El gran secreto de Petro y los azucareros

Aqu¨ª tenemos algo de pir¨®manos. Nos gustan las rivalidades y, por ende, somos felices animando peleas entre unos supuestos opuestos, as¨ª como cuando vemos a dos tipos peleando en la calle sin saber por qu¨¦ y terminamos haciendo fuerza por uno u otro. Los colombianos con facilidad nos convertimos en hinchas o barras bravas de ideas, conceptos, partidos pol¨ªticos o equipos de f¨²tbol con el fin ¨²ltimo de llevar la contraria y alimentar animadversiones que muchas veces carecen de sentido.

Hasta hace unos meses, en plena campa?a pol¨ªtica, terminamos creando un ring imaginario en el que se hallaba en una esquina el sector de los azucareros y en la otra el entonces candidato Gustavo Petro. Creci¨® con ¨ªmpetu la idea de que al llegar Petro a la presidencia comenzar¨ªa la debacle para esos grupos econ¨®micos a los que poco a poco ir¨ªa agotando con impuestos y expropiaciones hasta exprimir la ¨²ltima ca?a. En pocas palabras, alimentamos la idea de una irreconciliable situaci¨®n que hoy, casi a 10 meses de gobierno de Petro, no ha sido sino todo lo contrario.

Estamos muy cerca de presenciar un gran evento en donde el multimillonario sector de la ca?a de az¨²car no solo se va a dar la mano con el presidente para anunciar una revoluci¨®n agr¨ªcola para el norte del Cauca, sino que, adem¨¢s, esta vendr¨¢ de la mano de un inesperado impulso a los movimientos sociales de la regi¨®n a los que desde hace meses vienen poniendo de acuerdo para consolidar esta alianza.

Nadie se dio cuenta o poco ruido hizo la aprobaci¨®n del art¨ªculo 268 del Plan Nacional de Desarrollo en el que se traz¨® el camino que consolida la uni¨®n. Ahora estamos a pocos d¨ªas de ver ese corto p¨¢rrafo convertido en el principal cimiento para la construcci¨®n de un laboratorio de entrega de tierras, desarrollo rural y construcci¨®n de paz que entre el gobierno Petro, sus ministras de agricultura y los ca?icultores reunidos en Asoca?a han logrado dise?ar para llevar a un nivel superior la entrega de tierras a los despojados de esa regi¨®n del pa¨ªs.

Mientras que los ganaderos han sacado pecho (y con raz¨®n) de las miles de hect¨¢reas que est¨¢n poniendo a disposici¨®n del Estado para que avance la Reforma Agraria, los ca?icultores subieron la apuesta y van a sacar de su bolsillo miles de millones de pesos para convertir el norte del Cauca en un centro de producci¨®n agr¨ªcola con vocaci¨®n industrial administrado por los miles campesinos a quienes la Agencia de Tierras va a entregar varios miles de hect¨¢reas en ese lugar atravesado por hist¨®ricos conflictos entre colonos, afros e ind¨ªgenas. Ya no ser¨¢ solo dar las tierras a los campesinos, sino hacer el case para que estas puedan ser altamente productivas y se traduzcan en verdadera riqueza para beneficio de las comunidades.

El compromiso llega con construcci¨®n de v¨ªas, construcci¨®n de centros de formaci¨®n con vocaci¨®n universitaria, puesta en marcha de una organizaci¨®n comunitaria autosostenible. Todo gracias a un esfuerzo de b¨²squeda de armon¨ªa entre el dizque sector enemigo de Petro y Petro.

Ojal¨¢ se sume la Fiscal¨ªa, gran ausente en este esfuerzo, pero actor necesario para conseguir que la justicia, que nunca ha llegado a ese lugar del pa¨ªs, por fin haga valer su majestad. Ojal¨¢.

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