Contratar es explotar
Nacionalice a todas las empresas, presidente Petro. Man¨¦jenlas usted y su equipo. Podr¨¢n nunca ser rentables bajo su tutela, pero al menos no ser¨¢n inmorales y desalmadas explotadoras
Mi hijo de 15 a?os pas¨® el fin de semana vendiendo el lavado de ventanas de casa en casa, como agente de un emprendimiento de un compa?ero de curso, que compr¨® una m¨¢quina y organiz¨® una peque?a empresa. Diez adolescentes recorrieron en patinetas un par de barrios convenciendo a los padres de familia que pueden ver mejor al mundo exterior si sus ventanas est¨¢n limpias.
Les fue bastante bien. Mi hijo no ten¨ªa patineta y esta semana se hizo a una con los frutos de su trabajo. Sent¨ª orgullo de pap¨¢, hasta que ca¨ª en la cuenta de que debo sacarlo de inmediato de ese sistema inhumano creado por ese compa?ero mal¨¦volo que se quiere enriquecer a costa de explotar a mi joven v¨¢stago y el resto de compa?eros del colegio.
Adem¨¢s, debo denunciar ante las autoridades al infractor por usar trabajo infantil y hacer que le impidan, ojal¨¢ permanentemente, ser un remedo de empresario, le decomisen la m¨¢quina y lo ahoguen en impuestos por lo que vendi¨® hasta el presente. Cortar¨¦ de ra¨ªz a un explotador del futuro; y del presente tambi¨¦n. Una campa?a por internet servir¨¢ para alertar en los barrios a las familias incautas para que no caigan en ese oscuro entramado tras una supuesta labor de limpieza. Que limpien sus propios vidrios y evitemos entre todos crear un monstruo.
Al menos eso me ha llevado a creer el presidente de mi pa¨ªs en varios y elocuentes discursos. Si su teor¨ªa fue buena en 2022 para 11.281.902 personas que lo eligieron con una mayor¨ªa del 50.47% de los votos, qui¨¦n soy yo para dudar de su veracidad.
Contratar es explotar y esclavizar. Salvo que lo haga el sindicato de maestros, FECODE, o el partido del presidente, Colombia Humana, ¨²nicas entidades privadas que no explotan a nadie. O cualquier entidad p¨²blica, pues el Estado es bueno y tampoco explota, dado que ah¨ª los jefes no buscan enriquecerse. S¨®lo ayudar al pr¨®jimo.
Caigo en la cuenta de que conozco a alguien que lleva m¨¢s de 40 a?os construyendo su empresa y ocupa a cerca de 1.200 empleados. Con la nueva doctrina, ellos le deben guardar rencor a ese empresario y tan pronto puedan, deben ver c¨®mo se pasan al sector p¨²blico, o convierten la empresa en estatal para que los dejen de explotar. Manej¨¦ Ecopetrol, que es 88,5% de propiedad p¨²blica. Imagino que los empleados est¨¢n 11,5% explotados por desalmados explotadores esclavistas guiados por el lucro ciego y la codicia. En buena hora conocemos ese nuevo modelo doctrinario. Lo aclara todo. Ya s¨¦ qu¨¦ pensar sobre el trabajo espont¨¢neo de fin de semana de mi hijo, al igual que de cada empresario privado que conozco y de la participaci¨®n privada en cualquier empresa estatal.
Antes estaba bajo el espejismo de que crear empresa era riesgoso y demandaba un esfuerzo sobrehumano para contratar personal, pagar cada mes sueldos y parafiscales, comprar m¨¢quinas, alquilar una bodega o un local, buscar afanosamente clientes todos los d¨ªas, no dejarse sacar del mercado por los competidores, soportar los cambios repentinos de precios, llevar a pie juntillas la contabilidad, tratar de exportar, aguantar cientos de regulaciones de trabajo, productos, insumos y comercio exterior, obtener cr¨¦dito bancario y pagarlo a tiempo, con intereses que han subido una bestialidad, hacer temibles y demorados tr¨¢mites para una licencia del INVIMA o el ANLA, inscribirse en la C¨¢mara de Comercio, pagarle impuestos a la DIAN, con el riesgo de auditor¨ªas abrasivas e intimidantes, rendir cuentas ante la junta directiva, negociar con el sindicato, soportar las tasas, estampillas y multas, mirar con espanto c¨®mo fluct¨²an las tasas de inter¨¦s y el valor del d¨®lar. Aparte de eso, animar y crear una visi¨®n compartida con empleados y trabajadores para ser productivos y sobrevivir juntos en ambientes desafiantes. En fin, ten¨ªa enorme respeto por la gente que se somete a semejante viacrucis de ser empresario.
Ahora s¨¦ que todas esas actividades en las que ocupan afanosamente su tiempo los casi dos millones de empresarios de Colombia son una mera pantalla; formas encubiertas de esclavismo y explotaci¨®n.
Gracias presidente Petro por quitar la m¨¢scara de la cara de los explotadores y esclavistas que nos rodean y quieren vendernos leche, pan, bocadillos vele?os, lechona, empanadas, jugos y ropa, carreras de taxi y acarreos, viajes en avi¨®n y legumbres, gasolina y entradas al cine, entre otros miles de bienes y servicios que usamos a diario.
Qu¨¦ enga?o al que estamos sometidos por parte de esa gente. Desde que nacemos. Haga con todos como est¨¢ haciendo con las EPS de la salud y las pensiones. Se entiende que solo es el comienzo. Imag¨ªnese, luego pueden venir los bancos y otros conglomerados, y m¨¢s adelante cientos o miles de empresas. Un promisorio horizonte se vislumbra para Colombia.
Nacional¨ªcelos a todos, presidente. Maneje usted y su equipo todas las empresas. Podr¨¢n nunca ser rentables bajo su tutela, pero al menos no ser¨¢n inmorales y desalmadas explotadoras y capitalistas. Viva el socialismo. Abajo los explotadores y esclavistas. Con raz¨®n el presidente nos invita a marchar el 1? de mayo. Abajo las ventanas limpias.
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