Mucha emoci¨®n y pocos votos: as¨ª se vivieron las elecciones presidenciales de Venezuela en Bogot¨¢

Se esperaban 4.369 votos en Bogot¨¢, una ciudad en la que viven m¨¢s de 602.000 venezolanos, seg¨²n cifras oficiales colombianas. Y de esa porci¨®n min¨²scula que estaba habilitada para votar, lo hicieron apenas 1.247, pero lo hicieron en medio de una aut¨¦ntica fiesta.

¡°Mi Venezuela lejos, pero no ausente¡±, dec¨ªan las camisetas de decenas de ellos. Portando gorras de los colores de la bandera venezolana - que comparte con Colombia, como testimonio directo de la hermandad-, tocando trompetas y con gritos como ¡°?Te queremos libre, Venezuela!¡± llegaron al Colegio T¨¦cnico de Palermo, un tradicional barrio de clase media alta del oriente de Bogot¨¢. Era el ¨²nico punto autorizado en toda la ciudad, a kil¨®metros de las zonas del sur y el occidente con mayor presencia de esa migraci¨®n. Apenas 8 mesas para reflejar el sentir de una poblaci¨®n que suma tantos habitantes como la ciudad espa?ola de M¨¢laga, la colombiana Bucaramanga, la venezolana Barinas o pa¨ªses como Surinam, Cabo Verde o Luxembrugo.

A las afueras del recinto, la mayor¨ªa de votantes vibraba con un sentimiento de ilusi¨®n, que se sumaba a su ya cotidiana nostalgia. ¡°La oposici¨®n va a ganar y si no gana hay que hacer algo, hay que salir a la calle¡±, dijo a este diario H¨¦ctor Crespo, de 44 a?os, quien lleg¨® a Colombia hace 16 a?os buscando mejores oportunidades, mucho antes de la gran ola migratoria de tiempos de la pandemia.

Cerca de ¨¦l, cuatro mujeres y una ni?a ten¨ªan pintada la bandera de Venezuela en su cara, y ofrec¨ªan repetir ese s¨ªmbolo en el rostro de todo aquel que se acercaba. Una de ellas es Linda Bernal, de 32 a?os, quien lleg¨® a Colombia en 2022 con sus hijos de 9 y 12 a?os. ¡°Me vine porque ya no aguantaba m¨¢s, quer¨ªa un futuro para mis hijos. Maduro destruy¨® mi pa¨ªs¡±, explic¨® con firmeza. Hab¨ªa ejercido como dise?adora gr¨¢fica por unos dos a?os; ahora trabaja en una f¨¢brica de caf¨¦ donde, dice, se siente m¨¢s tranquila. No tanto por lo que ocurra una vez se definan oficialmente los resultados electorales ¡°Esta es una gran oportunidad, tenemos que estar unidos m¨¢s que nunca¡±.

El puesto funcion¨® con normalidad. Roswan Borges, coordinador del Comando Electoral en Bogot¨¢, explica que a las cinco de la ma?ana llegaron cerca de 50 testigos electorales, y a las seis se dio apertura a las votaciones. Asegura que no hubo intentos de fraude ni disturbios, y que la situaci¨®n m¨¢s an¨®mala fueron los cerca de 200 ciudadanos venezolanos que pidieron ejercer su derecho al voto, pero no estaban registrados.

Justamente, uno de los grandes reclamos de la dis¨¢pora venezolana fue la casi imposibilidad de votar: adem¨¢s de los pocos puestos de votaci¨®n (presentes en apenas seis ciudades de Colombia, que aloja a alrededor de 2,8 millones de venezolanos, distribuidos por todo el pa¨ªs), los requisitos eran muy altos. Para inscribirse en el registro electoral o cambiar el lugar de votaci¨®n, las autoridades venezolanas exig¨ªan la c¨¦dula de extranjer¨ªa colombiana o la de ciudadan¨ªa venezolana, as¨ª como pasaporte vigente o en tr¨¢mite de renovaci¨®n. Todos ellos son documentos dif¨ªciles de conseguir por los cotos, los tr¨¢mites e incluso por a?os la falta de papel o de consultados. No era admitido el Permiso por protecci¨®n temporal o PPT, creado por el Estado colombiano para permitir la identificaci¨®n de los venezolanos en el pa¨ªs, as¨ª como su acceso al trabajo formal, la educaci¨®n o la salud.

Pese a esas limitantes, la jornada electoral en Bogot¨¢ no terminaba al depositar su voto en las urnas. A dos cuadras del lugar de votaci¨®n se halla el parque Alfonso L¨®pez, y en ¨¦l se reunieron alrededor de 5.000 venezolanos. Aunque la gran mayor¨ªa no pudo votar, buscaban alentar a los que s¨ª. Mujeres vend¨ªan arepas venezolanas y mazorcas, su aroma impregnando el aire. Un grupo de j¨®venes cantaba canciones de rap con mensajes de esperanza: ¡°Tendremos fe. Venezuela hoy ser¨¢ libre¡±. Los ni?os disfrutaban de catalinas, o paledonias, un dulce t¨ªpico venezolano. Bicitaxistas y mototaxistas acompa?aban los c¨¢nticos o canciones con sus pitos. Una pareja de hermanos portaba una cartelera colorida con flores: ¡°Quiero conocer el pa¨ªs del que mis padres me hablan¡±.

En paralelo, en la c¨¦ntrica y simb¨®lica plaza de Bol¨ªvar, se encontraron cientos de migrantes m¨¢s, y encendieron velas a la espera de los resultados electorales globales ¨C por ley, los de Bogot¨¢ y otros puestos fuera de Venezuela solo se pueden revelar cuando el Consejo Nacional Electoral haya emitido su primer bolet¨ªn, algo que probablemente ocurra en la madrugada del lunes.

Eso pese a que a las siete de la noche Borges, el coordinador del Comando Electoral, report¨® a este diario que de los 7.012 venezolanos en Colombia habilitados para votar, tan solo 1.674 ejercieron su derecho al voto, un 23,57%de los registrados pero menos del 0,1% de todos los venezolanos que viven en el pa¨ªs vecino. Adem¨¢s de los 1.247 votos de la capital colombiana, en Barranquilla sumaron 387 votos, en Cartagena 249, en Medell¨ªn 142, en la fronteriza C¨²cuta 122 y en Riohacha otros 86.

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