Colombia enfrenta el fin de a?o con un gran debate sobre las finanzas del Estado

Colombia, que por a?os sac¨® pecho por diferenciarse de los otros grandes pa¨ªses latinoamericanos al no haber cesado sus pagos en la dif¨ªcil d¨¦cada de los ochenta y se ha vanagloriado de su disciplina fiscal, enfrenta una dif¨ªcil situaci¨®n. El presidente Gustavo Petro, sin embargo, ha llegado a invocar el fantasma de un in¨¦dito default en medio de su choque con el Congreso por cuenta, justamente, del futuro de las finanzas p¨²blicas. Aunque ha aclarado que su Gobierno evitar¨¢ ese escenario l¨ªmite, ha reiterado su preocupaci¨®n, compartida por muchos, por una dif¨ªcil situaci¨®n fiscal tanto para el a?o que termina como para el 2025 que ya despunta. En el panorama se juntan un bajo recaudo este a?o, un presupuesto creciente, pero desfinanciado para 2025, y dudas sobre la necesidad de ese crecimiento cuando el Gobierno no ha ejecutado todo el dinero para 2024 y el d¨¦ficit aumenta.

El debate del presupuesto de 2025, que el Congreso rechaz¨® de forma in¨¦dita hace dos meses por cuenta de un aumento tal que el mismo Ejecutivo se?al¨® que estaba desfinanciado en 12 billones de pesos (unos 2.800 millones de d¨®lares) de su total de 523 billones de pesos, sigue vivo. El Gobierno ha anunciado, a trav¨¦s del ministro del Interior Juan Fernando Cristo, que enfocar¨¢ sus fuerzas en las tres semanas que quedan del a?o en sacar adelante una reforma tributaria presentada justamente para recoger esos 12 billones, adicionales a los que conseguir¨ªa con los impuestos actuales. Aunque las sesiones legislativas ordinarias terminan el domingo 15, el encargado de la pol¨ªtica ya ha anunciado que convocar¨¢n a extras, que pueden ir hasta el 31 de diciembre, en busca de ese dif¨ªcil logro.

Pero eso no es todo. No es inusual un diciembre con un proyecto de ley que ajuste los impuestos, en un pa¨ªs que en los ¨²ltimos veinte a?os ha tramitado una reforma de ese tipo cada dos a?os. Pero s¨ª lo es que ocurra cuando, a la vez, se critica la lenta ejecuci¨®n del presupuesto actual por el Ejecutivo. El Gobierno incluso ha dicho que necesita la reforma para recoger 12 billones de pesos para 2025 que no puede pagar con los tributos actuales. Pedir m¨¢s dinero cuando a la vez no se logra gastar el que ya se tiene, es un flanco d¨¦bil para el Ejecutivo, como ha se?alado la oposici¨®n. ¡°Presidente, nuestro llamado es que enfoque sus esfuerzos en los $97 billones que tienen sin ejecutar, antes de una reforma que ponga m¨¢s impuestos a los colombianos¡±, ha dicho el presidente del Senado y opositor Efra¨ªn Cepeda, un veterano pol¨ªtico conservador a quien Petro ha se?alado de buscar arruinar el pa¨ªs. Frente a ello, el Ministerio de Hacienda ha respondido este viernes confirmando la cifra, que equivale a tener a¨²n el 19,2% de los recursos sin comprometer.

El Ejecutivo, sin embargo, hace ¨¦nfasis en otra similar, que no incluye los pagos de la deuda: ¡°Los compromisos de gasto primario (funcionamiento e inversi¨®n) fueron 12,9% superiores a los alcanzados en noviembre de 2023¡å se lee en su comunicado de prensa. En su presentaci¨®n, sin embargo, explica que esa comparaci¨®n se hace en pesos, pero el presupuesto aument¨® un 18,9% entre esos dos a?os. Y, si en lugar de mirar los compromisos (el dinero que se sabe a qu¨¦ se destinar¨¢ en concreto) se pone la lupa sobre las obligaciones (lo ya contratado), la ejecuci¨®n es del 68,1%, menor a la de 2023 (76,4%) y al promedio entre 2000 y 2023 (75,2%).

Al debate por el gasto y la inversi¨®n se suma el de la capacidad de financiar unas metas m¨¢s ambiciosas para 2025. Ricardo Bonilla, el todav¨ªa ministro de Hacienda, que present¨® su renuncia el mi¨¦rcoles pasado en medio de se?alamientos de clientelismo, lider¨® un recorte del 5,6% al presupuesto de este a?o, debido al escaso dinero que ha ingresado a las arcas p¨²blicas. La ca¨ªda en el recaudo tributario, que para septiembre era de 18 billones de pesos, agrava la tensi¨®n y el debate. Si bien el Ejecutivo ha se?alado que se debe a una situaci¨®n excepcional en 2024, por cuenta de un cambio en las reglas que hizo que las empresas prepagaran impuestos en 2023, se trata de otra discusi¨®n que concentra la atenci¨®n en las finanzas p¨²blicas.

La tensi¨®n es clara y las menos de cuatro semanas que le quedan al a?o ser¨¢n fundamentales por la definici¨®n no solo de la reforma, sino el resultado final de la ejecuci¨®n, del recaudo y del d¨¦ficit fiscal. Para Marc Hofstetter, profesor de Macroeconom¨ªa de la Universidad de Los Andes, el panorama tiene un claro factor internacional. ¡°No es un fen¨®meno exclusivamente colombiano. La pandemia llev¨® a muchos pa¨ªses a aumentar sus gastos para proteger a las familias, a las empresas, al empleo. Y eso dispar¨® su deuda p¨²blica¡±, recuerda. Sin embargo, hace ¨¦nfasis en que en otros lugares el paso siguiente fue revertir ese hecho para pagar la deuda. ¡°Quiz¨¢s mantuvimos el pie en el acelerador del gasto y ahora tenemos una combinaci¨®n de alta deuda y alto gasto que no hemos terminado de resolver¡±.

El entuerto queda ahora en manos de Diego Guevara, un economista con s¨®lida trayectoria acad¨¦mica y que ha sido importante en la pol¨ªtica econ¨®mica del Gobierno, como viceministro de los dos encargados de las finanzas p¨²blicas, y que representa el continuismo. Hereda una econom¨ªa que crece lentamente, tras dejar atr¨¢s el fantasma de la recesi¨®n, una inflaci¨®n que parece estar bajo control y un ambiente que en general no es ni entusiasta ni catastr¨®fico. El gran reto, el que puede definir hacia qu¨¦ lado de la balanza se rompe ese equilibrio, es el fiscal. Y en una prueba inmediata, se enfrenta a un Congreso en el que el Gobierno no tiene mayor¨ªas aseguradas; al rezago en la inversi¨®n estatal; y a un d¨¦ficit fiscal alto, que con el 5,6% del Producto Interno Bruto que ha proyectado el Ejecutivo ser¨ªa el mayor en los ¨²ltimos 20 a?os aparte de la crisis econ¨®mica que produjo la pandemia.