Gustavo Petro promete que gobernar¨¢ con ¡°respeto absoluto¡± a la Constituci¨®n

El cambio real est¨¢ cerca para Colombia, asegura Gustavo Petro, que busca convertirse el domingo en el primer mandatario de izquierda en la historia del pa¨ªs. El candidato del Pacto Hist¨®rico, que se enfrenta a Rodolfo Hern¨¢ndez en la segunda vuelta, se ha comprometido la noche de este martes en un discurso grabado de estilo presidencial a gobernar con ¡°respeto absoluto¡± a la Constituci¨®n y las leyes, as¨ª como a no perseguir la reelecci¨®n ni amenazar la propiedad privada, en un intento por desactivar los ¨²ltimos temores que despierta su figura.

¡°A todos ustedes les dejo la seguridad de que el cambio real, que por tanto tiempo han esperado, ya se acerca; porque lo hemos decidido como pa¨ªs¡±, dijo Petro, de camisa blanca pero sin corbata, en el arranque de su publicitada ¡°alocuci¨®n¡±, una estrategia concebida para superar las resistencias que provoca en algunos sectores y posicionarlo como el candidato que mejor encarna las transformaciones necesarias para superar el profundo malestar evidenciado en el estallido social del a?o pasado. ¡°Hoy veo con esperanza que hemos despertado como naci¨®n, porque sabemos que tantos a?os de un sistema, dirigido por los mismos, y que no funciona para la mayor¨ªa, han sido m¨¢s que suficientes. El cambio es el sentimiento y la lucha de toda Colombia¡±, afirm¨®.

Embarcado desde hace tiempo en un viraje al pragmatismo, Petro, que en su juventud perteneci¨® a la guerrilla del M-19, ha apostado por proyectar una imagen presidenciable, como ya lo hab¨ªa hecho durante las protestas del a?o pasado con ¡°alocuciones¡± en sus redes sociales sobre la situaci¨®n del pa¨ªs. Igualados en las ¨²ltimas encuestas, y ante la negativa de Hern¨¢ndez a sostener debates en la recta final, el discurso de Petro ha recordado a otro incombustible l¨ªder de izquierdas en Am¨¦rica Latina que le ha marcado el rumbo. En su famosa ¡°Carta al Pueblo Brasile?o¡±, Lula despej¨® parte de los temores del electorado y se comprometi¨® a mantener la estabilidad econ¨®mica, lo que le allan¨® el camino al poder en las elecciones de 2002.

Petro ha se?alado este martes que su trayectoria como congresista y alcalde de Bogot¨¢ ha estado dedicada a la lucha por la justicia social, y en contra de la desigualdad y la corrupci¨®n, ¡°desde la convicci¨®n de que merecemos un mejor presente y futuro para nuestras familias¡±, adem¨¢s de vislumbrar un pa¨ªs en el que ¡°la educaci¨®n y la salud no sean lujos¡±. ¡°Gobernar¨¦ desde el amor, y no desde el odio¡±, ha declarado.

M¨¢s all¨¢ del conocido acento social de su discurso, ha ofrecido cinco garant¨ªas ¡°fundamentales e innegociables¡± que acompa?ar¨ªan a su Gobierno: la seguridad de que no buscar¨¢ reelegirse; un inquebrantable compromiso con la justicia; trabajar sin descanso y con austeridad para superar la actual crisis econ¨®mica y social; respetar las leyes y la Constituci¨®n; y luchar de manera frontal contra la corrupci¨®n. Como parte de ese ¨²ltimo punto, se ha planteado conformar una Comisi¨®n Internacional Independiente para que investigue los casos de corrupci¨®n ocurridos en el pasado.

Su apego a la Constituci¨®n, ha enfatizado, incluye respetar el derecho a la propiedad privada: ¡°Nunca he pensado, ni pensar¨¦, en confiscar o menoscabar este derecho a nadie¡±, subray¨®. ¡°Quiero que mi Gobierno sirva de puente para que una nueva generaci¨®n de l¨ªderes tome las riendas del pa¨ªs en el 2026 y podamos seguir avanzando¡±, resalt¨® como parte de su promesa de no buscar la reelecci¨®n, que ahora mismo no es una posibilidad para los mandatarios en Colombia. Esos compromisos atienden los ataques m¨¢s recurrentes de sus detractores.

A lo largo de la campa?a, Petro ha buscado suavizar su imagen. Ese prop¨®sito pasa por alejarse de cualquier asociaci¨®n con el r¨¦gimen chavista de la vecina Venezuela, un se?alamiento en el que insisten sus adversarios. En contraste, el aspirante de izquierdas se ha acercado decididamente al presidente de Chile, Gabriel Boric, que goza de simpat¨ªas en los sectores progresistas de Am¨¦rica Latina. Como lo ha recordado en numerosas entrevistas, si a su eventual triunfo en Colombia se suma el de Lula en Brasil, la regi¨®n se asomar¨ªa a un nuevo eje progresista.

¡°Soy consciente del honor que representar¨ªa para alguien como yo, que viene de abajo, ostentar un cargo tan grande como ser presidente de la naci¨®n. Si Dios y ustedes me dan esa oportunidad, yo estoy seguro de que dar¨¦ todo para no fallarles¡±, ha dicho de manera solemne. ¡°Me levantar¨¦ cada ma?ana con la energ¨ªa y el deseo de demostrarles que su confianza vali¨® la pena y que, sobre todo, su pa¨ªs vale todo esfuerzo¡±, ha agregado frente a las c¨¢maras, desde su apartamento en Bogot¨¢, con las fotos de su familia en el fondo. ¡°La Colombia que so?amos est¨¢ a la vuelta de la esquina. Solo hace falta ir a buscarla¡±.

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