Gran Chaco: la deforestaci¨®n avanza sobre un basti¨®n clave de la biodiversidad argentina

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Mientras se realizaba la COP15 para proteger la p¨¦rdida global de biodiversidad y la Uni¨®n Europea establece obligaciones legales para dejar de comerciar productos relacionados con la destrucci¨®n de los bosques, en la provincia argentina de Chaco se discute un nuevo ordenamiento territorial de bosques nativos (OTBN) que pone en riesgo lo poco que resta de lo que una vez fue el Gran Chaco, el segundo pulm¨®n sudamericano m¨¢s importante despu¨¦s de la Amazon¨ªa.

Argentina custodia una gran biodiversidad. Por eso fue un hito la denominada Ley de Bosques Nativos, creada hace 15 a?os para atender la crisis que atravesaban estos ecosistemas en el pa¨ªs. Desde el a?o 2000, el bosque ¡ªpresente sobre todo en las provincias de Chaco y Formosa y, en menor medida, en Salta y Santiago del Estero¡ª ha perdido m¨¢s de una cuarta parte de su superficie forestal.

El OTBN chaque?o que entr¨® en vigor en 2009 estableci¨® tres categor¨ªas para las zonas forestales: Roja-I, para ¨¢reas de alto valor de conservaci¨®n que no deben ser transformadas; Amarilla-II, de mediano valor de conservaci¨®n, que pueden ser degradadas pero siempre y cuando se realicen actividades adecuadas de restauraci¨®n; y Verde-III, de bajo valor de conservaci¨®n que pueden ser transformadas parcial o totalmente.

¡°El avance de la frontera econ¨®mica sobre los bosques nativos se da hace d¨¦cadas a trav¨¦s de la presi¨®n de tres sectores: el forestal maderero que extrae tanino, principalmente; el agroganadero que busca plantar soja, ma¨ªz y algod¨®n; y el inmobiliario, que lotea los campos a trav¨¦s del Instituto de Colonizaci¨®n¡±, explica en entrevista a Am¨¦rica Futura Mat¨ªas Mastr¨¢ngelo, investigador del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnolog¨ªa de Argentina (CONICET).

La actualizaci¨®n del OTBN desat¨® la pol¨¦mica ya que busca habilitar cambios de usos de suelo de categor¨ªa Amarilla-II en los departamentos de Almirante Brown, G¨¹emes y San Mart¨ªn ¡ªen el norte de la provincia¡ª, disminuyendo as¨ª los est¨¢ndares de protecci¨®n vigentes sobre una regi¨®n boscosa de m¨¢s de 300.000 hect¨¢reas, superficie equivalente a la mancha urbana de ciudades como Lima o Madrid.

¡°Eso no solo va en contra de la ley nacional y el principio de progresividad ambiental, sino que condona el desmonte ilegal. El hecho de que en el nuevo mapa se pintaran estos espacios en blanco, como si los bosques nunca hubieran existido, permite pensar que tampoco existi¨® la deforestaci¨®n, por tanto no habr¨ªa sanci¨®n ni necesidad de restaurar algo que nunca existi¨®¡±, se?ala.

Parad¨®jicamente, el ministerio de Ambiente de Chaco no es la autoridad de aplicaci¨®n de la Ley de Bosques, sino que esta depende del ministerio de Producci¨®n. ¡°Igualmente hemos creado una oficina de monitoreo permanente para la detecci¨®n de desmontes ilegales¡±, coment¨® Tom¨¢s Camarasa, quien est¨¢ al frente de la Subsecretar¨ªa de Ambiente y Biodiversidad del ministerio de Ambiente de la provincia.

A pesar de que el nuevo mapa regresivo fue elaborado por una mesa t¨¦cnica en la que participaban principalmente actores del sector agro-forestal, con poca participaci¨®n de los pueblos ind¨ªgenas y sector cient¨ªfico, la movilizaci¨®n de ONGs como Somos Monte Chaco logr¨® que de momento no haya fecha de tratamiento para ninguna propuesta dentro de la llamada ¡°Ley de OTBN¡± en la legislatura provincial.

Parece calor, pero es desmonte

De norte a sur de la Argentina, la crisis clim¨¢tica se hace sentir en forma de desertificaci¨®n en el Gran Chaco, olas de calor en el centro del pa¨ªs e incendios en Tierra del Fuego. Actualmente existe muy poca agua en el R¨ªo Bermejo que atraviesa la provincia de Chaco abasteciendo a distintos acu¨ªferos, y la poca que resta se encuentra contaminada por la presencia de cianobacterias, otro efecto del cambio clim¨¢tico que ya produjo inundaciones que afectaron a localidades chaque?as como Castelli a principio de a?o.

¡°Este a?o pr¨¢cticamente no hubo un aporte de agua de deshielo hacia Chaco desde la sierra de Santa Victoria [en la zona norte de la provincia de Salta], que es donde nace el R¨ªo Bermejo, a causa de la poca formaci¨®n de hielo por el calentamiento global¡±, comenta Camarasa. ¡°Las cianobacterias son una consecuencia directa del cambio clim¨¢tico en la provincia, y vemos un panorama donde esto posiblemente siga en aumento. Tenemos que buscar la manera de reducir la deforestaci¨®n para mitigar el impacto de la crisis clim¨¢tica en Chaco¡±.

Consultado respecto a las denuncias realizadas por parte de la sociedad civil y una reciente pol¨¦mica en Twitter con Greenpeace a ra¨ªz del nuevo OTBN, el gobernador Jorge Capitanich contest¨® que ¡°el gran d¨¦ficit que tenemos hasta el momento para revertir esta situaci¨®n es la falta de financiamiento y la falta de apoyo para conseguir esos fondos¡±. Y a?ade: ¡°Pero creemos que estamos trabajando en la direcci¨®n correcta para consolidar alternativas que permitan proteger a los ambientes nativos con la gente adentro. Continuaremos trabajando para estar a la altura de este cambio de paradigma que entiende que ¡®sin justicia ambiental no hay justicia social¡¯, el cual es impulsado no solo desde los Gobiernos, sino principalmente de la sociedad civil y el territorio¡±.

Desde Buenos Aires, la directora ejecutiva de Greenpeace para regi¨®n Andina, Natalia Machain, dijo que ¡°los Gobiernos argentinos desde la d¨¦cada de 1990 hasta ac¨¢ no tuvieron una pol¨ªtica ambiental seria. Y hoy lleg¨® el momento de reflexionar sobre eso. En Chaco desde 2007 a la fecha se perdieron medio mill¨®n de hect¨¢reas, la mitad de forma ilegal e irregular. La propuesta actual del gobernador, Capitanich, consiste exactamente en eso: blanquear, perdonar todos los desmontes ilegales realizados y dar luz verde para el acabar con otro mill¨®n de hect¨¢reas m¨¢s¡±.

Servicios ecosist¨¦micos o campos desiertos

El avance inmobiliario sobre el corredor biol¨®gico del Chaco seco genera ¡°campos vencidos¡±, seg¨²n los ind¨ªgenas wich¨ª, dado que se trata de una zona muy impredecible donde fallan los cultivos y las pasturas por falta de agua, por lo que las comunidades expulsadas del monte terminan segregadas en la periferia de los pueblos.

¡°La p¨¦rdida de especies de flora y fauna no solo afecta a comunidades originarias que dependen del bosque como su supermercado o farmacia. La ausencia del yaguaret¨¦, el pecar¨ª quimilero y el tat¨² carreta y otras especies end¨¦micas del Chaco y en riesgo de extinci¨®n, anula la posibilidad de un ecoturismo que atrae a visitantes de todo el planeta¡±, denuncia el investigador del CONICET.

El nuevo mapa propuesto para la actualizaci¨®n del OTBN contempla un pol¨¦mico pol¨ªgono denominado JUANA con espacios pintados de blanco, que para el investigador Mastr¨¢ngelo es como si los bosques ¡°nunca hubieran existido¡±. ¡°Por tanto no habr¨ªa sanci¨®n ni necesidad de restaurarlo. Eso no solo va en contra de la ley nacional y el principio de progresividad ambiental, sino que condona el desmonte ilegal¡±.

Sin embargo, la ingeniera agr¨®noma Julieta Rojas del INTA y el Observatorio de Degradaci¨®n de Tierras y Desertificaci¨®n explica que los suelos del oeste del Chaco sometidos a deforestaci¨®n para uso agr¨ªcola pierden calidad f¨ªsica y qu¨ªmica en un plazo muy corto de tiempo. ¡°Principalmente carbono org¨¢nico; se puede perder hasta en un 40%. Y es clave para mitigar el cambio clim¨¢tico y su p¨¦rdida acelera el calentamiento global y los procesos de desertificaci¨®n. Por otro lado, los suelos deforestados se compactan respecto al monte nativo, disminuyendo as¨ª hasta cuatro veces la infiltraci¨®n del suelo del monte, por lo que es m¨¢s f¨¢cil que se produzcan inundaciones cuando llueve¡±.

Ir m¨¢s all¨¢ de las ideolog¨ªas estancadas

Para Mastr¨¢ngelo existen actividades productivas compatibles con el mantenimiento del bosque que tienen un potencial enorme, pero nunca han recibido apoyo del Gobierno para que puedan ser llevadas a un nivel lo suficientemente beneficioso. ¡°La apicultura, el ecoturismo y hasta la misma extracci¨®n forestal de determinadas maderas se pueden hacer de forma sostenible si se respetan los tiempos de regeneraci¨®n, cosa que no hacen las empresas actualmente¡±, explica uno de los cient¨ªficos que mejor conoce el problema socioambiental chaque?o.

Capitanich comenta que de aqu¨ª a 50 a?os visualiza un Chaco con plena recuperaci¨®n de sus bosques nativos y ambientes degradados a trav¨¦s de la consolidaci¨®n de mecanismos de pago por servicios ecosist¨¦micos como el proyecto Eco-Token que, si bien es incipiente, tiene potencial de modificar sustancialmente la matriz socio-productiva de la provincia, ya que a trav¨¦s de un sistema de trazabilidad con blockchain podr¨ªa asegurar que fondos generados vayan directamente a impactar positivamente en las comunidades locales que protegen esos bosques.

El gobernador de Chaco explica que est¨¢n discutiendo reformas para endurecer sanciones y controles, y que seguir¨¢n reclamando al Gobierno nacional por la integraci¨®n total del fondo para la conservaci¨®n y protecci¨®n del ecosistema, seg¨²n lo determina la ley nacional: ¡°De cada 1.000 hect¨¢reas de bosque que la ley nos obliga a proteger, solo se nos asignan los fondos correspondientes a 100 de ellas, y ello convierte a la ley en un instrumento legal de pr¨¢cticamente imposible cumplimiento en las 900 hect¨¢reas restantes¡±.

¡°Argentina est¨¢ inserta en un mundo acelerado y en un planeta en colapso¡±, concluye Machain. ¡°Necesita estar mejor parada para lo que se viene. Hay que dar un salto de calidad en nuestro debate. Sostener que la destrucci¨®n de la naturaleza nos har¨¢ menos pobres es un argumento enlatado y falaz, pero, m¨¢s que nunca, anti¨¦tico, y contrario a la realidad y las leyes. Es responsabilidad del propio Estado y sus funcionarios que se completen los fondos necesarios para la protecci¨®n de los bosques¡±.