El mundo avanza hacia una reforma financiera integral, que incluye la naturaleza y mayor equidad

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La cumbre por un Nuevo Pacto Global de Financiamiento, celebrada en Par¨ªs la semana pasada, marc¨® un hito importante en los esfuerzos globales por atender las crisis entrelazadas de cambio clim¨¢tico, biodiversidad e inequidad. Los 40 pa¨ªses participantes acordaron encaminar una reforma del sistema financiero y alcanzar el objetivo de 100.000 millones de d¨®lares para el financiamiento clim¨¢tico de este a?o, promesa que fue hecha por los pa¨ªses desarrollados en 2009 y que se retoma con mayor firmeza en esta cumbre, ya que jam¨¢s se ha cumplido a cabalidad.

Este evento dej¨® en claro que la arquitectura financiera mundial es anticuada, disfuncional e injusta, como declar¨® el secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guti¨¦rrez, lo que dio paso a un cambio en el tenor de la conversaci¨®n global sobre temas fundamentales referentes a la deuda, desarrollo, impactos del cambio clim¨¢tico y vulnerabilidad; avances significativos que hace un par de a?os no habr¨ªan sido posibles de imaginar.

La transici¨®n hacia un mundo m¨¢s equitativo y resiliente requiere enormes transformaciones en la arquitectura financiera que brinde soluciones a largo plazo. Esta cumbre nos da la medida de que el mundo s¨ª est¨¢ cambiando. Hoy existe un reconocimiento de la responsabilidad descomunal que tiene el marco institucional global para alcanzar las metas que nos hemos fijado para erradicar la pobreza, enfrentar los impactos clim¨¢ticos y reducir las emisiones de gases efecto invernadero; desaf¨ªos que est¨¢n intr¨ªnsecamente entrelazados.

Uno de los puntos m¨¢s relevantes de la cumbre fue abordar la sofocante carga de la deuda que enfrentan muchos pa¨ªses en desarrollo, reconociendo la importancia de la reprogramaci¨®n de la deuda para promover la estabilidad econ¨®mica y fomentar un desarrollo sostenible. Adem¨¢s, se reconoci¨® el desgaste ¨C en muchos casos recurrente - que implica para los pa¨ªses en desarrollo hacer frente a los desastres ocasionados o exacerbados por el cambio clim¨¢tico. Tanto el Banco Mundial como otras instituciones financieras empezar¨¢n a incorporar cl¨¢usulas para enfrentar los desastres; lo que suponen mejores condiciones para el pago de deudas, que hab¨ªan sido acordados en los pr¨¦stamos. Estos compromisos marcan un cambio en las relaciones norte-sur y brindar¨¢n un respiro a las naciones, permiti¨¦ndoles redirigir recursos hacia sectores cr¨ªticos como el cuidado de la salud, la educaci¨®n, el mejor manejo de los recursos naturales y proyectos de infraestructura.

En este contexto, The Nature Conservancy (TNC) ha venido impulsando soluciones innovadoras que incluyen el canje de deuda por naturaleza, consolidando varios casos de bonos azules, que permiten que los pa¨ªses refinancien sus deudas en t¨¦rminos m¨¢s favorables y asignen lo obtenido a la protecci¨®n de la biodiversidad y la adaptaci¨®n clim¨¢tica. En Am¨¦rica Latina, Belice es el primer pa¨ªs que implement¨® bonos azules para conservar los oc¨¦anos, reestructurando aproximadamente 550 millones de d¨®lares de deuda comercial interna. El pa¨ªs invertir¨¢ 180 millones de d¨®lares a la conservaci¨®n de sus ecosistemas, que les permitir¨¢ cumplir su compromiso de proteger el 30% de su territorio oce¨¢nico, desarrollar marcos de gobernanza para la pesca y regular los proyectos de carbono azul costero.

De igual manera, Barbados, pa¨ªs que ha liderado este esfuerzo por reformar el marco global financiero, en 2022, complet¨® una conversi¨®n de deuda de 150 millones de d¨®lares con el apoyo de TNC, que facilitar¨¢ la expansi¨®n de las ¨¢reas marinas protegidas del pa¨ªs desde pr¨¢cticamente cero hasta aproximadamente el 30% y mejorar¨¢ la gesti¨®n de todas las aguas marinas dentro de su jurisdicci¨®n. Se espera que este proyecto libere aproximadamente 50 millones de d¨®lares para apoyar acciones medioambientales y de desarrollo sostenible en Barbados durante los pr¨®ximos 15 a?os, haciendo que tanto el pa¨ªs como los medios de vida de sus habitantes sean m¨¢s resistentes frente al cambio clim¨¢tico.

Cabe destacar tambi¨¦n la necesidad de incluir las soluciones basadas en la naturaleza en las reformas del sistema financiero. Durante la cumbre se respald¨® el desarrollo de ¡°paquetes nacionales¡± para los bosques y la naturaleza a trav¨¦s de la Alianza de L¨ªderes por los Bosques y el Clima (Forest and Climate Leaders¡¯ Partnership - FCLP); as¨ª como, la ratificaci¨®n de financiaci¨®n para el Fondo Amazon¨ªa en Brasil. Adicionalmente, se impulsar¨¢ un proceso para estudiar el desarrollo de mercados de cr¨¦ditos de biodiversidad, cuya posible evoluci¨®n tendr¨¢ que ser manejada con mucha transparencia y juicio.

Por eso aplaudimos los esfuerzos y compromisos internacionales para lograr una reforma financiera que reconoce la magnitud de los impactos derivados del calentamiento global, as¨ª como, la importancia de aumentar considerablemente las inversiones en la naturaleza para alcanzar un futuro sostenible y m¨¢s justo. A medida que los l¨ªderes mundiales adopten estos compromisos, se espera que se traduzcan en acciones concretas, pues sabemos que los cambios profundos que urgen no pueden esperar. El 2030 es ahora y necesitamos acelerar un cambio integral que fomente la equidad y el bienestar a largo plazo de las personas en todo el mundo, lo que supone una gesti¨®n adecuada de nuestros recursos naturales. La reforma del sector financiero es un elemento fundamental de este ajedrez.

* Paula Caballero es directora ejecutiva regional de The Nature Conservancy para Am¨¦rica Latina.