Venezuela le corta la electricidad a las granjas de bitcoin en medio de constantes apagones

Un allanamiento esta semana en un galp¨®n en el estado Aragua, en la regi¨®n central del Venezuela, dio con la incautaci¨®n de 2.300 m¨¢quinas para minar bitcoins, la moneda virtual. A la medida le sigui¨® el anuncio del Gobierno de la desconexi¨®n de todas las granjas de minado (las que procesan y garantizan las transacciones) del pa¨ªs del Sistema El¨¦ctrico Nacional, en medio de un aumento de los apagones y racionamientos y de la investigaci¨®n de la Fiscal¨ªa sobre un enorme desfalco hecho a la petrolera estatal PDVSA a trav¨¦s de estas plataformas digitales. Esto ocurre, adem¨¢s, en el pa¨ªs que cre¨® una criptomoneda oficial, el petro, para enfrentar con muy poco ¨¦xito el d¨®lar y la inflaci¨®n.

El Ministerio de Energ¨ªa El¨¦ctrica ha informado ahora de la puesta en marcha de un plan de fiscalizaci¨®n de grandes consumidores de energ¨ªa. El objetivo, aseguraron las autoridades, es desconectar del precario Sistema El¨¦ctrico Nacional -que en 2019 ya dej¨® al pa¨ªs entero sin luz por cinco d¨ªas- todas las granjas de moneda virtual para evitar ¡°el alto impacto en la demanda¡±.

El apag¨®n del negocio cripto en Venezuela, sin embargo, comenz¨® un a?o atr¨¢s cuando el Gobierno destap¨® el esc¨¢ndalo de PDVSA Cripto, que oblig¨® a una reestructuraci¨®n de la Superintendencia de Criptoactivos y dej¨® en el limbo los marcos regulatorios de esta actividad. Miles de mineros se quedaron en suspenso entonces y un a?o despu¨¦s siguen sin respuestas.

El uso de esta tecnolog¨ªa financiera se expandi¨® en Venezuela con la llegada de la hiperinflaci¨®n. Algunos venezolanos se refugiaron en las criptomonedas para proteger su dinero de las devaluaciones y una parte encontr¨®, en medio de una econom¨ªa arrasada, posibilidades de ingresos emprendiendo negocios de miner¨ªa digital o trabajando en ellos gracias a sus tentadoras promesas de rentabilidad que hacen obviar su alta volatilidad: un bitcoin vale hoy 66.000 d¨®lares. Venezuela ofrec¨ªa adem¨¢s algo esencial: un servicio el¨¦ctrico por el que se pagaba casi nada, una caracter¨ªstica heredada de los a?os de subsidios que se ejecutaron durante el mandato de Hugo Ch¨¢vez.

El Gobierno de Maduro tambi¨¦n encontr¨® oportunidades para hacer frente a la inflaci¨®n y, m¨¢s tarde, navegar en las aguas revueltas de las sanciones petroleras, como ha revelado la trama PDVSA Cripto tras las que ha ca¨ªdo el ministro de Petr¨®leo, Tareck El Aissami, hombre cercano a Nicol¨¢s Maduro. Incluso gobernadores del chavismo instalaron granjas de m¨¢quinas para minar como parte de su gesti¨®n. Lo hizo en 2018 el gobernador del Estado de Zulia, el que m¨¢s sufre en este momento apagones y racionamientos diarios de varias horas.

La miner¨ªa digital es una actividad de alto consumo el¨¦ctrico. No solo por los megavatios que jala cada dispositivo, sino por los equipos de soporte que se necesitan para enfriar las granjas durante su operaci¨®n de c¨®mputo infinito. Esta semana, el gobernador de Carabobo, Rafael Lacava, adjudic¨® al clima y a la miner¨ªa digital la agudizaci¨®n de los racionamientos de electricidad en su Estado, donde todos los d¨ªas los ciudadanos padecen cortes. ¡°Estamos restringiendo el consumo irresponsable de las granjas de criptomonedas que se chupan un poco de megavatios y son las que llevan a los racionamientos¡±, dijo en un video junto con el ministro de Energ¨ªa El¨¦ctrica, Jorge M¨¢rquez, que no tiene un mes en el cargo y al que Maduro le pidi¨® hacer frente a ¡°la guerra el¨¦ctrica¡±.

Una guerra en la que los venezolanos ya se han acostumbrado por las cotidianas fluctuaciones de la energ¨ªa, el temblor de los bombillos, al estruendo t¨®xico de las plantas el¨¦ctricas dom¨¦sticas a gasolina y a las interminables aver¨ªas de sus electrodom¨¦sticos por la inestabilidad de la corriente. El gobernador Lacava pidi¨® a los vecinos a denunciar a las autoridades del funcionamiento de granjas en sus comunidades y anunci¨®, m¨¢s tarde, que va a ordenar restricciones horarias para el trabajo de la administraci¨®n p¨²blica en Carabobo, para reducir la demanda de electricidad.

La crisis el¨¦ctrica en Venezuela se ha vuelto cr¨®nica y el servicio es de los peores valorados entre los ciudadanos, los que en un 80% aspiran a un cambio de Gobierno en las pr¨®ximas elecciones del 28 de julio, precisamente porque esperan una mejora en sus condiciones de vida. Ch¨¢vez, en su tiempo, tambi¨¦n apag¨® a los que consideraba altos consumidores. Entonces enfil¨® contra los centros comerciales, a los que oblig¨® a instalar sus propios sistemas de generaci¨®n independientes. Esos fueron los a?os en que las autopistas de Caracas estuvieron en penumbra porque se prohibi¨® encender las vallas publicitarias.

El pa¨ªs tiene un enorme d¨¦ficit de generaci¨®n y depende en casi 70% de la energ¨ªa que produce la Central Hidroel¨¦ctrica de Guri, ubicada al sur del pa¨ªs. Estas limitaciones incluso han comprometido los intentos de reactivaci¨®n econ¨®mica en Venezuela, cuyo PIB se ha reducido a un tercio en los ¨²ltimos a?os. En m¨¢s de dos d¨¦cadas se han anunciado inversiones ¡ªal menos 37.000 millones de d¨®lares entre 1999 y 2017, seg¨²n Transparencia Venezuela¡ª para mejorar los problemas estructurales del sistema el¨¦ctrico que no deja de hacer padecer a los venezolanos. Gran parte de ellas, sin embargo, acabaron absorbidas por la corrupci¨®n, as¨ª como las minadoras de bitcoins absorben ahora la electricidad que queda.

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