Recuperaci¨®n econ¨®mica y reestructuraci¨®n de la deuda: lo que est¨¢ en juego en las elecciones venezolanas
Para los venezolanos, la transparencia y el orden de sus comicios pudiera acercarlos a una normalidad econ¨®mica. Para los mercados, representa una atractiva oportunidad de ganancias
Las elecciones venezolanas de este domingo se han convertido en una atractiva apuesta para Wall Street. Por primera vez en 25 a?os, existe la posibilidad de que se produzca un relevo en el poder y que Nicol¨¢s Maduro ceda la presidencia a la oposici¨®n, lo cual abrir¨ªa la puerta a una recuperaci¨®n del colapso econ¨®mico de la ¨²ltima d¨¦cada. Con ello, el Gobierno pudiera negociar la reestructuraci¨®n de los m¨¢s de 150.000 millones de d¨®lares en bonos de deuda que cotizan en los mercados. La apuesta no es apta para cardiacos, pero promete grandes r¨¦ditos a los ganadores.
Un pa¨ªs que fue potencia petrolera mundial, Venezuela sufri¨® una ca¨ªda de su Producto Interno Bruto (PIB) de 80% entre 2014 y 2020, presionado por un declive en la empresa del Estado, a?os de expropiaciones que secaron la inversi¨®n privada, incompetencia en el manejo de las finanzas p¨²blicas, entre otros factores. Sanciones por parte de Estados Unidos exacerbaron la crisis econ¨®mica y el pa¨ªs latinoamericano eventualmente incumpli¨® en el pago de su deuda internacional, la cual hoy suma unos 154.000 millones de d¨®lares en bonos, seg¨²n un estimado de Bloomberg.
En esos a?os, la Administraci¨®n de Maduro celebr¨® varias elecciones en las que no permiti¨® la participaci¨®n de observadores internacionales. Las cosas ahora son distintas. Con la invasi¨®n de Rusia a Ucrania en 2022, EE UU y Europa comenzaron a buscar fuentes alternativas al gas natural y crudo ruso. De repente, suavizar la relaci¨®n con Venezuela se volvi¨® m¨¢s importante y Maduro tom¨® nota. Este domingo, su Gobierno permitir¨¢ que un peque?o grupo de observadores estadounidenses del Centro Carter sea testigo de los comicios, lo que pudiera sumarle legitimidad. Si Maduro resulta ganador, los Gobiernos extranjeros se sentir¨¢n m¨¢s c¨®modos comprando petr¨®leo venezolano cuyos r¨¦ditos van a parar a las arcas p¨²blicas.
Al mismo tiempo, el panorama pol¨ªtico interno cambi¨®. Una oposici¨®n que en el pasado se hab¨ªa dividido, hoy camina unida detr¨¢s de su l¨ªder Mar¨ªa Corina Machado. Inhabilitada por el Gobierno para presentarse como candidata, Machado ha respaldado a Edmundo Gonz¨¢lez, quien lleva 20 puntos de ventaja frente a Maduro, de acuerdo con algunas encuestas. Analistas anticipan que, al haber permitido elecciones m¨¢s transparentes, le ser¨¢ m¨¢s dif¨ªcil a Maduro negar (o, incluso, ocultar) los resultados si no le favorecen.
Este giro en la trama ha llamado la atenci¨®n de inversionistas extranjeros. Seg¨²n datos del banco de inversi¨®n brit¨¢nico Barclays, los bonos soberanos y de la empresa paraestatal, Petr¨®leos de Venezuela (PDVSA), han incrementado significativamente de precio, reflejando una mayor demanda. ¡°En las ¨²ltimas semanas la probabilidad de cambio o la percepci¨®n de los mercados sobre la probabilidad de cambio, ha venido aumentando¡±, asegura el economista especializado en Latinoam¨¦rica en el banco Alejandro Arreaza, ¡°de acuerdo con las valuaciones, las probabilidades de una transici¨®n pasaron de 20% a 30%¡± muy r¨¢pidamente.
A¨²n sin que gane la oposici¨®n, el mercado est¨¢ contemplando que un proceso electoral m¨¢s ordenado y transparente pudiera llevar a ¡°alg¨²n tipo de normalizaci¨®n de las relaciones diplom¨¢ticas entre entre Venezuela y EE UU que pudiese dar un espacio para alg¨²n tipo de recuperaci¨®n econ¨®mica¡±, explica el economista, ¡°ese es un escenario que yo personalmente no descarto, pero que veo dif¨ªcil¡±.
Para los venezolanos, las elecciones llegan en un momento en que la econom¨ªa ha experimentado algunas, aunque insuficientes, mejoras. El Gobierno ha permitido una dolarizaci¨®n de facto y ha restringido el cr¨¦dito bancario para controlar la inflaci¨®n (despu¨¦s de a?os de fuertes espirales en las que el ingreso de las familias se desvanec¨ªa en a penas unos d¨ªas). Un par de licencias extraordinarias le ha permitido a un pu?ado de empresas extranjeras operar peque?os proyecos petroleros, lo que est¨¢ generando rentas en d¨®lares. Oganismos multilaterales como el Fondo Monetario Internacional (FMI) han anunciado que Venezuela es el pa¨ªs que ver¨¢ un mayor crecimiento econ¨®mico en la regi¨®n este a?o, alrededor del 4% del PIB.
Pero la recuperaci¨®n ha sido parcial, cuenta Arreaza. La capital y los centros urbanos se han beneficiado por la dolarizaci¨®n, pero las poblaciones de tama?o medio en ¨¢reas rurales no han visto los mismo beneficios. ¡°Y si te fijas en c¨®mo ha sido la campa?a electoral, es precisamente en esas zonas es donde la oposici¨®n le ha estado yendo mejor¡±, se?ala el especialista.
Un reporte del centro de investigaci¨®n y an¨¢lisis estadounidense Center for Economic and Policy Research (CEPR) propone un punto de vista m¨¢s cauteloso. A¡± pocos d¨ªas de la votaci¨®n, la mayor parte de la preocupaci¨®n internacional se ha centrado en si Maduro aceptar¨¢ o no los resultados (suponiendo que pierda)¡±, escribi¨® el analista Jake Johnston, ¡°pero igualmente peligrosa es la suposici¨®n de que la ¨²nica forma de que gane es mediante un fraude masivo. La realidad es que es poco probable que ninguno de los dos bandos, cada uno con cr¨ªticas leg¨ªtimas sobre la imparcialidad de la votaci¨®n, acepte los resultados si no son favorables¡±.
Para los inversionistas, estar en el lado correcto de la apuesta implicar¨¢ grandes p¨¦rididas o ganancias. Para los venezolanos, m¨¢s que el resultado final, lo importante ser¨¢ que los comicios sean vistos como leg¨ªtimos, explica Asdr¨²bal Oliveros, economista y director de la firma consultora Ecoanal¨ªtica.
¡°Lo m¨¢s importante es si la elecci¨®n ser¨¢ reconocida o no por la comunidad internacional. De ser as¨ª, Venezuela puede empezar un camino donde se d¨¦ un desmontaje de las sanciones, el acceso a recursos, una reestrcutraci¨®n de su deuda, renegociar con organismos multilaterales y de esta manera generar una senda de crecimiento sostenida que permita recuperar la calidad de la vida de la gente¡±.
Las multilaterales han sido muy cuidadosas de no hablar de c¨®mo apoyar¨ªan a un gobierno nuevo en Venezuela, dice Arreaza, de Barclays, " pero s¨ª tienen planes, al menos para lo que ser¨ªa el primer a?o. Se habla de unos 8.000 millones de d¨®lares que pudiesen ser necesarios para programas de transferencia, atender temas de electricidad, agua, aquellos servicios p¨²blicos que est¨¢n en situaciones m¨¢s cr¨ªticas. Si esta econom¨ªa comienza a crecer a tasas altas, vas a encontrar cuellos de botella que necesitas solventar¡±.
Desde el extranjero, los mercados seguir¨¢n atentos los resultados de este domingo. ¡°La discusi¨®n que existe en el mercado es en torno a la pregunta ?quien pudiese tener m¨¢s voluntad de pago, un gobierno de oposici¨®n o Maduro? Es una discusi¨®n bastante subjetiva, pero lo que es objetivo es la capacidad de pago¡±, concluye Arreaza.
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