Alberto Fern¨¢ndez y Cristina Kirchner ensayan una tregua a la guerra pol¨ªtica en Argentina
El presidente de Argentina y su vice cenan a solas en la residencia oficial tras la renuncia del ministro de Econom¨ªa, Mart¨ªn Guzm¨¢n
Ha habido un ensayo de entente en la c¨²pula del poder en Argentina. El presidente, Alberto Fern¨¢ndez, y su vice, Cristina Kirchner, cenaron este lunes a solas en la residencia oficial de Olivos. Un hecho banal que suena a tregua pol¨ªtica tras 30 d¨ªas sin verse las caras y meses de ataques cruzados en actos p¨²blicos, redes sociales y declaraciones de portavoces m¨¢s o menos oficiales. Si habr¨¢ paz duradera est¨¢ por verse, pero al menos el binomio ha decidido hablar tras la renuncia, el s¨¢bado, del ministro de Econom¨ªa, Mart¨ªn Guzm¨¢n.
La dimensi¨®n de la crisis abierta fue tal que lim¨® diferencias en la Casa Rosada. Dentro de a?o y medio habr¨¢ elecciones presidenciales y los pedidos de unidad arreciaban dentro del peronismo. Quien m¨¢s cedi¨® en este eventual entendimiento fue Fern¨¢ndez. Perdido Guzm¨¢n, uno de los pocos ministros que a¨²n le respond¨ªan en el Gabinete, debi¨® aceptar su reemplazo por Silvina Batakis, una economista pr¨¢cticamente desconocida para el gran p¨²blico que responde a Cristina Kirchner.
Batakis cree en el equilibrio fiscal, el consumo como motor del crecimiento y la acumulaci¨®n de reservas. El resumen le pertenece. Minutos despu¨¦s de jurar en su cargo, envi¨® a trav¨¦s de la prensa un mensaje al Fondo Monetario Internacional (FMI), con el que el pa¨ªs sudamericano mantiene un programa para refinanciar los 44.000 millones de d¨®lares que recibi¨® en 2018. Batakis dijo que ¡°ma?ana [martes] a primera hora¡± se pondr¨¢ ¡°en contacto con el FMI¡±. No aclar¨® qu¨¦ les dir¨¢ exactamente a los t¨¦cnicos del organismo, pero dej¨® claro que no est¨¢ en sus planes hacer saltar por los aires la letra firmada en enero por su predecesor, Mart¨ªn Guzm¨¢n. Desde el FMI respondieron al nombramiento con un mensaje protocolar: ¡°Esperamos trabajar con la ministra Batakis para continuar apoyando a la Argentina y su gente a fortalecer la estabilidad macroecon¨®mica¡±.
El mercado recibi¨® con hostilidad a la nueva ministra: la cotizaci¨®n del d¨®lar frente al peso en el mercado no oficial de cambios subi¨® hasta un 17%, para cerrar el d¨ªa un 8,8% por encima de la v¨ªspera. Este martes ser¨¢ d¨ªa de prueba para los bonos soberanos, luego del feriado del 4 de julio en EE UU
Batakis tiene un enorme desaf¨ªo por delante. La inflaci¨®n Argentina se ha disparado por encima del 60% anual y el Gobierno cada vez tiene m¨¢s problemas para cumplir con las metas de rojo fiscal y reservas internacionales que acord¨® con el Fondo en enero pasado. . Los problemas econ¨®micos, sin embargo, pueden no ser el mayor obst¨¢culo de la gesti¨®n de la nueva ministra. Su nombre es parte de la tregua, o tal vez solo el alto el fuego, que esta noche pactaban Fern¨¢ndez y su vicepresidenta, Cristina Kirchner.
La renuncia de Guzm¨¢n fue el bot¨ªn que Kirchner consigui¨® en esta batalla. Ped¨ªa su cabeza desde que achac¨® al ministro saliente la derrota del peronismo en las legislativas de finales del a?o pasado. La expresidenta y actual vicepresidenta lo acusaba de defender un ajuste fiscal que hab¨ªa asfixiado la econom¨ªa y golpeado con especial virulencia a los m¨¢s pobres, su base electoral. El acuerdo con el FMI, que supuso restricciones en emisi¨®n monetaria y d¨¦ficit fiscal y un compromiso de lucha contra la inflaci¨®n, termin¨® por dilapidar el prestigio de Guzm¨¢n en el kirchnerismo. Y los ataques desde ese sector de la coalici¨®n de Gobierno se hicieron cada vez m¨¢s violentos.
Guzm¨¢n se fue luego de pedir sin ¨¦xito al presidente Fern¨¢ndez que le garantizase el control total de la Secretaria de Energ¨ªa, en manos de la vicepresidenta. Desde esa oficina demoraron sin disimulo las intenciones de Guzm¨¢n de aumentar las tarifas de gas y electricidad, congeladas desde 2019 gracias a una pol¨ªtica de subsidios que, solo el a?o pasado, cost¨® al Tesoro 11.000 millones de d¨®lares. Eliminar esos subsidios forma parte del acuerdo con el FMI: engordan el d¨¦ficit fiscal y son una sangr¨ªa para las reservas del Banco Central, cada vez m¨¢s reducidas. Pero el kirchnerismo hizo de la tarifas bajas una bandera electoral y Guzm¨¢n, sin respaldo presidencial, tuvo que irse.
En este escenario asumi¨® Batakis, que deber¨¢ hacer ahora equilibrio entre el cors¨¦ del acuerdo con el FMI y las demandas en sentido contrario de Cristina Kirchner, su madrina pol¨ªtica. Kirchner considera que la emisi¨®n monetaria no genera inflaci¨®n y apuesta a una reactivaci¨®n motorizada por el consumo interno. Esto supone que haya m¨¢s dinero en la calle. Esa fue la pol¨ªtica que impuls¨® el crecimiento durante los a?os del kirchnerismo, entre 2003 y 2015. El da?o colateral fue la inflaci¨®n, una enfermedad end¨¦mica de la econom¨ªa argentina. Cristina Kirchner entreg¨® el poder a Mauricio Macri con una subida de precios del 26,9%. Cuando Macri hizo lo propio con Alberto Fern¨¢ndez, en 2019, el IPC ya hab¨ªa escalado hasta el 53,5%, con una pol¨ªtica de emisi¨®n cero, alto endeudamiento en d¨®lares y tasas estratosf¨¦ricas. Fern¨¢ndez lidia ahora con una inflaci¨®n del 60% y una previsi¨®n para diciembre de m¨¢s del 70%.
C¨®mo resolver¨¢ Batakis la tensi¨®n entre el combate de la inflaci¨®n, el cors¨¦ del FMI y el kirchnerismo es un gran misterio. La nueva ministra dijo este lunes que mantendr¨¢ el rumbo econ¨®mico trazado por su predecesor, Guzm¨¢n, y el presidente, Fern¨¢ndez. ¡°Estamos convencidos de que el rumbo de Argentina tiene que ver con el manejo fiscal de nuestras cuentas, con seguir el programa econ¨®mico que el Presidente vino marcando, y lograr tener m¨¢s exportaciones y revalorizar nuestra moneda¡±, dijo. Ese plan, que no es otra cosa que la hoja de ruta acordada con el Fondo, le costo el cargo a Guzm¨¢n y oblig¨® a Fern¨¢ndez a ceder la gesti¨®n de la econom¨ªa al kirchnerismo. ?C¨®mo har¨¢ Batakis para satisfacer los demandas contrapuestas de un Gobierno bic¨¦falo? La cena de esta noche entre Fern¨¢ndez y Kirchner tal vez la guie en la b¨²squeda de una respuesta.
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