Por qu¨¦ Drake supera a los Beatles (y m¨¢s discos del mes)

Todo lo caro brilla

Por Xavi Sancho

Hace tres a?os, tras publicar su anterior disco, Scorpion, Drake super¨® a los Beatles en el n¨²mero de singles colocados en el Top 10 de EE UU (35 en total). Tambi¨¦n logr¨® simultanear siete temas en el Billboard Top 10, zamp¨¢ndose as¨ª otro r¨¦cord de los de Liverpool. Para celebrarlo, se tatu¨® en el antebrazo una imagen en la que se ve a los Beatles cruzando Abbey Road y delante de ellos al propio Drake salud¨¢ndoles. O despidi¨¦ndose de ellos.

El nuevo largo del rapero canadiense se titula Certified Lover Boy y arranca con un sample de ¡®Michelle¡¯, de Lennon y McCartney. Si conoces la historia, lo entiendes como otro ejercicio de petulancia de este se?or. Si no, puedes pensar que est¨¢s ante un disco de hip hop distinto, uno en el que no colabora Travis Scott. Cinco cortes m¨¢s tarde aparece Scott, y esa ilusi¨®n se desvanece.

El que no le conoc¨ªa antes de ese ¡®Fair Trade¡¯ en el que ambos se abandonan a la morosidad y a frases que uno dec¨ªa con 13 a?os y conoc¨ªa tan poco que a¨²n se cre¨ªa listo ha necesitado solo media docena de canciones para poder considerarse un experto en el universo del canadiense. En otras palabras, ya ha visto que es un sitio en el que se mezcla lo bonito con lo caro, el engreimiento con la verg¨¹enza, la opulencia con la falsa modestia, la masculinidad t¨®xica con la denuncia de la misma, las mujeres que nos aman con las que odiamos porque ya no lo hacen. Rihanna le dej¨® de querer, pero los Toronto Raptors ganaron la NBA. As¨ª ha sido hasta hoy y as¨ª tiene toda la pinta que va a ser, al menos hasta que la f¨®rmula deje de funcionar. Ese d¨ªa no ha llegado: los 21 temas del disco han llegado a ser los 21 m¨¢s escuchados de Spotify.

Todo apunta a que, salvo cataclismo may¨²sculo, en dos o tres a?os volveremos a enfrentarnos a una obra similar, otro disco de Drake de hora y media de duraci¨®n y caracter¨ªsticas semejantes. La principal novedad, en este caso, llega cortes¨ªa de Kanye West y el odio que se profesan ambos artistas. As¨ª, la retah¨ªla de colaboraciones, que rivaliza con el Donda de West, es lo m¨¢s especial de este Certified Lover Boy. Muchos, como Lil Baby o Kid Cudi y, claro, Travis Scott, repiten. Incluso Jay Z, quien en ¡®Love All¡¯ se dedica a mandar mensajes nada amables a West, recordando incluso el d¨ªa que este, en un arranque de furia, public¨® la direcci¨®n de la casa de Drake en redes.

Musicalmente, el disco suena caro, como le gusta a Noah 40 Shebib, su productor de confianza. Hay algunos momentos imperiales, como ¡®No Friends In The Industry¡¯, tal vez el tema en el que mejor ha rapeado Drake en toda su carrera. O ¡®You Only Live Twice¡¯, con Rick Ross y Lil Wayne, un corte que, si no conoces a Drake, suena a James Bond, pero, si le conoces, se te escapa la risa por lo mucho que remite al ¡®College Dropout¡¯ de Kanye West. Y tambi¨¦n hay tropiezos ¨¦picos, claro, como ese ¡®Way 2 Sexy¡¯, que samplea el ¡®I¡¯m Too Sexy¡¯ de Right Said Fred, un chiste que dej¨® de hacer gracia en 1993. La portada la componen 12 emojis de mujeres embarazadas. Si no conoces a Drake, parece simp¨¢tico y barato. Si le conoces, ya debes saber que es obra de Damien Hirst, un artista que en 2008 despach¨® en una subasta de Sotheby¡¯s obra suya por valor de 200 millones de d¨®lares. No todo lo caro es bueno, pero casi todo lo caro brilla.

Drake. ¡®Certified Lover Boy¡¯ (OVO / Republic /Universal)

Homenajes en cadena

Por Luis Gago

Para emular a Kant, como hizo Sartre en su Cr¨ªtica de la raz¨®n dial¨¦ctica, hab¨ªa que ser un loco o un genio, y otro tanto podr¨ªa decirse de la decisi¨®n de Dmitri Shostak¨®vich, pocos a?os antes, de seguir la estela de El clave bien temperado de Bach con sus propios 24 preludios y fugas op. 87. Tocarlos exige un cerebro finamente anal¨ªtico y unas manos f¨¦rreamente poderosas. Para dificultar a¨²n m¨¢s la tarea, Igor Levit incluye tambi¨¦n en su nuevo ¨¢lbum una de las obras m¨¢s exigentes del repertorio pian¨ªstico: la herc¨²lea Passacaglia (forma musical predilecta de Shostak¨®vich) en tres partes que el escoc¨¦s Ronald Stevenson construy¨® a partir de las cuatro notas (re, mi bemol, do, si) del anagrama musical del compositor ruso, DSCH, obtenido a partir de las iniciales de su nombre y apellido, y que recuerda al semiid¨¦ntico BACH utilizado por su ¨ªdolo al final de ¡®El arte de la fuga¡¯. La colecci¨®n de Shostak¨®vich ha tenido, en todo o en parte, traductores eminentes: Tatiana Nikol¨¢yeva (que inspir¨® su creaci¨®n), Sviatoslav R¨ªjter y Emil Gilels (amigos cercanos al m¨²sico), Vlad¨ªmir Ashkenazi (un esp¨ªritu af¨ªn), Alexander Melnikov (el mejor de sus valedores recientes), adem¨¢s del propio compositor. Levit ahonda en la clara estirpe bachiana de estos preludios y fugas, tamizada por el ¨²ltimo Beethoven, tan frecuentado por ¨¦l en los ¨²ltimos a?os, y los presenta casi como el diario de un artista seriamente apesadumbrado en los a?os de plomo sovi¨¦ticos, con confesiones, gritos, susurros (n¨²meros 8, 12 y 15) y un final en el que todo parece converger y remansarse (n¨²mero 24). Jam¨¢s o¨ªmos notas desprovistas de sentido o fr¨ªas imitaciones entre voces, sino a un ser humano que penetra en los recovecos mentales de otro. Amigo de las gestas f¨ªsicas y las contiendas ideol¨®gicas, Levit se siente muy c¨®modo en esa epopeya musical que es la Passacaglia on DSCH, desmesurada proclama filomarxista que cita a Lenin y canta al ¡°?frica emergente¡±, pero que encuentra tambi¨¦n tiempo para honrar a Bach. Es dif¨ªcil concebir un ¨¢lbum m¨¢s congruente o con mayor riqueza dial¨¦ctica: la m¨²sica como instrumento para indagar el sentido de la historia.

Igor Levit. ¡®On Dsch¡¯ (Sony Classics)

Budismo para principiantes

Por Fernando Navarro

Dos fuera de serie juntos: Sufjan Stevens, uno de los m¨²sicos estadounidenses m¨¢s sugerentes del siglo XXI, y Angelo De Augustine, experto en fr¨¢giles ambientes lo-fi de folk. Se refugiaron en una caba?a en el bosque, en el Estado de Nueva York, y se pusieron a ver pel¨ªculas. Bajo el concepto budista zen shoshin (¡°mente del principiante¡±), sin ideas preconcebidas y con entusiasmo por el asombro de lo que percib¨ªan sus ojos y o¨ªdos, se pusieron a componer. El resultado: un pu?ado de canciones de una delicadeza m¨¢xima, enlazadas en atm¨®sfera buc¨®lica, que por momentos recuerdan al mejor Elliott Smith, aunque tenga el sello de una alianza ¨²nica y excelente. Belleza et¨¦rea. Uno de los ¨¢lbumes del a?o.

Sufjan Stevens & A. De Augustine. ¡®A Beginner¡¯s Mind¡¯ (Asthmatic Kitty)

Coherencia en la contradicci¨®n

Por ??igo L¨®pez Palacios

Treinta a?os y 13 discos despu¨¦s todav¨ªa son el grupo m¨¢s peculiar de su generaci¨®n. Un matrimonio de mormones que se conocieron con 17 a?os y a¨²n viven en su ciudad natal, Duluth, Minnesota. Todo en ellos es contradictorio pero coherente. Creen en s¨ª mismos y al mismo tiempo parecen llenos de dudas sobre c¨®mo afrontar el hecho de que son unos cincuentones blancos. Mantienen su esencia, un grupo de slowcore de hipn¨®ticas armon¨ªas vocales, habiendo volado las puertas de su estilo gracias a sonidos digitales a los que llevan al l¨ªmite y a inesperadas distorsiones que irrumpen a medio tema, como en ¡®Days Like These¡¯. Y con todo ello, han hecho uno de los discos m¨¢s destacables de 2021.

Low. ¡®Hey What¡¯ (Sub Pop / Everlasting)

Una celebraci¨®n de altura

Por Javier Losilla

Reservas al margen, la publicaci¨®n en 1997 del ¨¢lbum Buena Vista Social Club difundi¨® por todo el planeta la tradici¨®n musical cubana y sac¨® definitivamente a los viejos soneros vivos del desv¨¢n de la historia d¨¢ndoles lustre internacional. Ahora se festeja el 25? aniversario de aquel acontecimiento discogr¨¢fico con esta reedici¨®n. La que nos ocupa, de lujo, contiene dos vinilos y un par de CD, que incluyen las piezas originales, algunos in¨¦ditos tal vez necesitados de m¨¢s de cocci¨®n (¡®Vicenta¡¯, ¡®La pluma¡¯, ¡®A tus pies¡¯, ¡®La clept¨®mana¡¯¡­), tomas alternativas y un libreto. Una celebraci¨®n de altura. Solo una pregunta a lo Mor¨¦ planea sobre el resultado: ?c¨®mo fue que la idea no partiese de la mism¨ªsima Cuba?

Buena Vista Social Club. ¡®BVSC: 25th Anniversary¡¯ (World Circuit / BMG)

Una herencia ancestral

Por Yahv¨¦ M. de la Cavada

Quiz¨¢ la mayor virtud de Kenny Garrett sea su habilidad para crear jazz bastante accesible sin comprometer su estilo, ¨²nico e inconfundible. A sus 60 a?os, es uno de los m¨¢s importantes jazzistas afroamericanos vivos, y con este firma su primer gran disco de madurez. Los ancestros a los que aluden el t¨ªtulo del ¨¢lbum y su colorida portada no son solo los de herencia africana, sino las numerosas fuentes musicales de las que bebe Garrett, desde el soul a la m¨²sica cubana, el rhythm & blues, el g¨®spel y, por supuesto, la tradici¨®n del jazz, que aparecen como pinceladas en los temas del saxofonista. El ¨¦xito de su m¨²sica radica en que cada uno de esos sonidos est¨¢n siempre subyugados por la enorme personalidad de Garrett.

Kenny Garrett. ¡®Sounds from the Ancestors¡¯ (Mack Avenue / Distrijazz)

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