La memoria alterada de los paisajes del norte de ?frica y Oriente Pr¨®ximo
Cinco j¨®venes fot¨®grafos ofrecen su particular visi¨®n creativa para apuntar a la crisis ecol¨®gica como uno de los problemas m¨¢s acuciantes del momento
Waha significa oasis en ¨¢rabe. Es tambi¨¦n el nombre de la ¨²ltima serie fotogr¨¢fica de Seif Kousmate (Marruecos, 1988), quien durante tres a?os se adentr¨® en varios de estos espacios naturales del sur de Marruecos para apuntar a su degradaci¨®n. El dram¨¢tico deterioro de estos soplos de vida en medio de inh¨®spitos parajes, que durante milenios sirvieron como escudos frente a la desertificaci¨®n, as¨ª como de semilleros agr¨ªcolas, de centros de comercio, o de descanso de caravanas, cargados de m¨¢gicas y rom¨¢nticas connotaciones que alimentaron el imaginario orientalista. En las ultimas d¨¦cadas ha desaparecido dos tercios del h¨¢bitat de oasis de Marruecos. Debido al impacto de la crisis clim¨¢tica, estos vergeles se han convertido en uno de los ecosistemas m¨¢s amenazados del planeta. As¨ª, la subsistencia de sus habitantes, y por tanto de sus tradicionales formas de vida, se ha visto seriamente afectada.
Desde que en 2016 comenz¨® su andadura en la fotograf¨ªa, Kousmate se ha centrado en los asuntos humanitarios desde un enfoque documental. Sin embargo, en esta ocasi¨®n ha querido dar un vuelco m¨¢s experimental y conceptual a su obra. Para ello interviene sus fotografi¨¢s haciendo uso de ¨¢cidos, del fuego o de los restos de la flora local, para aludir al propio acto del deterioro ambiental, dando forma a una serie de met¨¢foras visuales cargadas de belleza y poes¨ªa, al tiempo que cuestiona la representaci¨®n mediante la fusi¨®n del contenido y de la forma, del sujeto y la materialidad.
La serie forma parte de la exposici¨®n Arenas Movedizas y puede verse en Casa ?rabe, en Madrid. Una exhibici¨®n que figura como una de las propuestas m¨¢s atractivas de la programaci¨®n de PHotoEspa?a mediante la presentaci¨®n de cinco proyectos realizados por cinco j¨®venes fot¨®grafos provenientes del norte de ?frica y de Oriente Pr¨®ximo. Cinco miradas distintas, tan s¨®lidas como creativas, las cuales, desde su propia est¨¦tica y perspectiva ideol¨®gica, abordan los problemas medioambientales a los que se enfrenta el mundo ¨¢rabe. ¡°Los autores comparten entre ellos una narrativa muy pronunciada entre la nueva generaci¨®n de fot¨®grafos de esta parte del mundo que trata de c¨®mo las comunidades m¨¢s tradicionales hacen frente a los estragos del cambio clim¨¢tico¡±, destaca el comisario de la muestra, David Drake, durante una videoconferencia. En definitiva, un conjunto de nuevas voces e interesantes perspectivas muy necesarias de mostrar.
Si bien Kousmate plantea la cuesti¨®n de qu¨¦ ocurre cuando el ser humano es capaz de llevarse por delante el fr¨¢gil y armonioso equilibrio alcanzado entre la flora, el agua, la tierra y el clima, en un terreno hostil, Lo que queda, de la fot¨®grafa egipcia, Wafaa Samir (1990), adentra al espectador en el ut¨®pico y truncado sue?o del arquitecto Hassan Fathy. Reconocido como el padre de la arquitectura sostenible y vern¨¢cula, en 1946, llev¨® a cabo el proyecto de construir una aldea, Nueva Gourna, con el fin de reubicar a los habitantes que moraban encima de las tumbas fara¨®nicas de Luxor. Las obras se llevaron a cabo haciendo uso de los materiales disponibles en la zona. En armon¨ªa con el entorno, el clima, y los escasos recursos de la poblaci¨®n, optando por c¨²pulas, en vez de techos planos, y los adobes de barro. Una arquitectura inspirada en las construcciones nubias que fue recibida por muchos como una marcha atr¨¢s. La subida del nivel de las aguas subterr¨¢neas hizo que el adobe se deteriorase, por lo que los habitantes comenzaron a construir nuevas edificaciones con otros materiales como el ladrillo cocido. En la actualidad se han derrumbado m¨¢s del 50% de los edificios originales. ¡°La localidad est¨¢ protegida por la Unesco, de manera que se corre el peligro de que pase a ser considerada m¨¢s como una pieza de arqueolog¨ªa m¨¢s que como una aldea sostenible¡±, apunta Drake. De ah¨ª la tensi¨®n que traslada la obra de Samir: ?c¨®mo conservar la tradici¨®n y la l¨®gica del lugar permitiendo que sus habitantes tengan acceso a una educaci¨®n, al agua potables, a entretenimientos, y a las comodidades y oportunidades de la vida moderna al tiempo que se respetan las formas tradicionales de la subsistencia ? Una delicada cuesti¨®n que se extiende m¨¢s all¨¢ del mundo ¨¢rabe.
A lo largo de 10 a?os, la tambi¨¦n fot¨®grafa egipcia Rehab Eldalil (1989), ha colaborado con la comunidad beduina del Sina¨ª con el fin de ahondar en sus ra¨ªces y en la noci¨®n de pertenencia, dando forma a una serie fotogr¨¢fica titulada El anhelo del forastero cuyo camino se ha roto. En ella har¨¢ uso del bordado, de la poes¨ªa y el sonido para, mediante intrigantes composiciones, profundizar en la conexi¨®n de la gente con la tierra en la que habita. ¡°Una invitaci¨®n a mirar tanto hac¨ªa dentro como hac¨ªa afuera¡±, tal y como subraya la autora en el fotolibro que re¨²ne la serie, ganador del W Award de 2022. ¡°?Qu¨¦ queda de nuestras propias semillas marchitas de algod¨®n?¡±, se pregunta de igual forma Amina Kadous (Egipto, 1991). La fot¨®grafa incorpora material de archivo en su serie Oro blanco, incluyendo su propio archivo familiar, para trazar la historia de la planta. Un cultivo en peligro de extinci¨®n, s¨ªmbolo en su d¨ªa de la identidad egipcia, as¨ª como de la riqueza cultural del pa¨ªs, que sirve a la fot¨®grafa como hilo para establecer v¨ªnculos con el pasado. ¡°Tanto la obra de Kadous como la de Kousmate y Eldalil brota de sus propios or¨ªgenes¡±, advierte el comisario. ¡°No son observadores desvinculados. Por el contrario su trabajo procede de su coraz¨®n, de ah¨ª que se trata de una respuesta emocional, de una resonancia¡±.
Por ¨²ltimo, la jordana Nadia Bseiso explora los 180 kil¨®metros que recorrer¨ªa el canal destinado a trasvasar el agua del Mar Rojo al agonizante Mar Muerto. Una ambiciosa y pol¨¦mica iniciativa conjunta de Jordania, Israel y Palestina, pospuesta por tensiones pol¨ªticas y obst¨¢culos burocr¨¢ticos, as¨ª como dificultades de financiaci¨®n. ¡°?Acaso rompi¨® el hombre ese v¨ªnculo sagrado con la Madre Naturaleza y ahora recoge lo que sembr¨®? ¡°, se pregunta la autora en Creciente inf¨¦rtil. Esta serie fotogr¨¢fica refleja la realidad de una tierra que, repleta de referentes hist¨®ricos, donde durante siglos y mediante arcaicos recursos se consigui¨® mantener su biodiversidad, y en cuyas marismas y r¨ªos se forj¨® el avance de la humanidad, queda ahora seca y quemada. Una reflexi¨®n sobre c¨®mo el termino progreso puede resultar ambiguo hoy en d¨ªa, que amplia el debate sobre a qui¨¦n pertenece la tierra.
¡®Arenas Movedizas¡¯. Casa ?rabe. Madrid. Hasta el 24 de septiembre.
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