"Dos p¨¢jaros y un timo"

Casi la mitad de los cerca de 500 espectadores que acudieron anoche al espect¨¢culo Dos p¨¢jaros y un tr¨ªo, en el Teatro H?agen-Dazs, prorrumpi¨® en abucheos y algo m¨¢s de un centenar abandon¨® airado la sala cuando comprob¨® que los artistas no eran Serrat y Sabina ¨Cque estos d¨ªas presentan su disco y su pr¨®xima gira-, sino un tr¨ªo desconocido.

En medio de un ambiente de esc¨¢ndalo en el vest¨ªbulo y a las puertas del teatro de la plaza de Jacinto Benavente, llegaron al menos tres coches de la Polic¨ªa Municipal y dos de la Nacional, adem¨¢s de varios motoristas.

¡°?Dos p¨¢jaros y un timo!¡±, calificaba una se?ora de mediana edad el espect¨¢culo. ¡°Yo pagu¨¦ 39 euros por las entradas en un centro comercial. Pregunt¨¦ directamente por el concierto de Sabina y Serrat, y as¨ª me las vendieron¡±, afirmaba.

Dos p¨¢jaros y un tr¨ªo hab¨ªa contratado la sala del teatro para una funci¨®n ¨²nica. En los carteles que anuncian el espect¨¢culo por las calles de la ciudad ¨Cun reclamo que ayer aseguraban haber seguido muchos de los considerados estafados-, aparece la leyenda Dos p¨¢jaros y un tr¨ªo / Sabina y Serrat, y entre las dos sentencias, en una tipograf¨ªa m¨¢s peque?a, ¡°cantan por¡±. ¡°Los dos sombreros que aparecen en el cartel hacen que el mismo sea similar a los que anunciaron la ¨²ltima gira de Serrat y Sabina, que adem¨¢s se llamaba Dos p¨¢jaros de un tiro¡±, dec¨ªa indignado ?lvaro Fuertes.

Una portavoz del departamento de relaciones p¨²blicas del Haagen-Dazs explic¨®: ¡°Nosotros alquilamos la sala para este espect¨¢culo y en nuestra web especificamos que no son Sabina y Serrat, sino unos int¨¦rpretes. A quienes ven¨ªan estos d¨ªas a por las entradas se les explic¨® bien, porque algunos, efectivamente, ven¨ªan con una idea equivocada. De las entradas adquiridas en internet o en alg¨²n otro punto de venta no podemos responsabilizarnos¡±.

Javier Pozuelo y su mujer hab¨ªan comprado dos entradas por 35 euros cada una en un centro comercial. ¡°Yo las ped¨ª para el concierto que daban Serrat y Sabina y as¨ª me las vendieron, pero, adem¨¢s, con buena intenci¨®n por parte de la vendedora, porque lo cierto es que la publicidad es tan enga?osa que seguro que en los puntos de venta tambi¨¦n se lo creyeron¡±, dec¨ªa Pozuelo. Otro denunciante afirmaba que la mayor¨ªa de quienes se hab¨ªan quedado en el patio de butacas ¡°lo hizo porque hab¨ªa pagado la entrada, pero casi el 90% de los asistentes nos quedamos asombrados cuando el tr¨ªo sali¨® al escenario¡±.

La Polic¨ªa tom¨® nota de las denuncias y recomend¨® a los m¨¢s enfadados que interpusieran otra ante Consumo.