La ampliaci¨®n del vertedero de Sogama se dispara a 18,5 millones

La incapacidad de Sogama para tratar toda la basura que recibe sigue teniendo efectos directos sobre el erario p¨²blico. A principios de este mes, la sociedad adjudic¨® un nuevo contrato, por valor de 4,7 millones, para continuar con la ampliaci¨®n de su vertedero, en el que acaban las 300.000 toneladas anuales de deshechos que la planta no puede gestionar. Por las mismas fechas licitaba obras de sellado provisional por unos 200.000 euros. A esas cantidades hay que sumar los casi 13,5 millones de la adjudicaci¨®n inicial, realizada en 2010, de forma que el recrecido del vertedero ya ha absorbido casi 18,5 millones, con los que se pretende incrementar su vida ¨²til otros ocho a?os. La Xunta calcula que en ese momento ya estar¨¢ en funcionamiento el nuevo complejo, proyectado en O Irixo por Estela E¨®lica.

La adjudicaci¨®n de esos 4,7 millones a la UTE Areosa, la misma que ejecuta toda la actuaci¨®n, para ¡°trabajos complementarios¡± se ha realizado por el procedimiento negociado sin publicidad, esto es, a dedo. Se trata de una cuant¨ªa inusual para este modelo de contrataci¨®n ¡ªla m¨¢s opaca, ya que evita el DOG¡ª, pero la direcci¨®n de Sogama le ha encontrado encaje legal. Seg¨²n la Ley de Contratos del Sector P¨²blico, este procedimiento se puede utilizar si el importe no supera el 50% del contrato primigenio y si una ¡°administraci¨®n diligente¡± no puede prever en ese primer documento la necesidad de estos servicios. Fuentes de la sociedad explican que lo ahora adjudicado se destina a unir dos taludes del vertedero, pero no concretan qu¨¦ impidi¨® determinar que esa obra ser¨ªa necesaria.

El Gobierno de Alberto N¨²?ez Feij¨®o justifica la ampliaci¨®n, de un 40% sobre los 330.000 metros cuadrados ya existentes, en que cuando lleg¨® al poder en 2009 el vertedero se encontraba al borde del colapso. A la planta llegan del orden de 800.000 toneladas de basura al a?o, pero solo puede tratar entre 500.000 y 550.000. Los restantes van a parar a este dep¨®sito de ¡°residuos no peligrosos¡±. La estimaci¨®n de la Xunta pasa por que cuando entre en funcionamiento la planta de O Irixo, que tendr¨¢ un modelo similar al de Cerceda aunque su gesti¨®n ser¨¢ completamente privada, se alivie la saturaci¨®n de Sogama en el municipio coru?¨¦s.

Sin embargo, la asociaci¨®n ecologista Adega tiene una visi¨®n contrapuesta. ¡°Se va a crear una hidra con dos cabezas¡±, ilustra su secretario ejecutivo, Fins Eirexas, que argumenta que con la creaci¨®n de una nueva planta se incidir¨¢ en los mismos errores que llevaron a la actual situaci¨®n del complejo de Sogama. En este sentido, comenta que la ¡°incapacidad t¨¦cnica y de gesti¨®n¡± de la planta de Cerceda lleva a un ¡°c¨ªrculo vicioso¡± en el que cada vez es necesaria una superficie mayor para el vertedero. Vaticina que en O Irixo se reproducir¨¢ este esquema, que supone un ¡°derroche de dinero p¨²blico, un agujero negro econ¨®mico y medioambiental¡±.

Eirexas apuesta como alternativa por pol¨ªticas que atajen la enorme cantidad de basura que genera la sociedad, por el reciclaje y por el modelo de Lousame, que evita la necesidad de vertedero al tiempo que valoriza la materia org¨¢nica.