El precio del nombre de una estaci¨®n

?Bienvenidos! Estaci¨®n Sol Galaxy Note! El eslogan, con tipograf¨ªa propia del modelo de m¨®vil, cubre esquinas, columnas, vest¨ªbulos, pasillos, andenes, accesos y tres trenes. La estaci¨®n de Metro de Sol, la m¨¢s emblem¨¢tica de la red, tiene nombre nuevo. Es una campa?a ¡°pionera¡±, cuentan desde Metro, una de las f¨®rmulas ¡°imaginativas¡± que pidi¨® el consejero de Transportes, Pablo Cavero, para conseguir fondos sin tocar el bolsillo de los ciudadanos. La presidenta Aguirre le dio una encomienda: reducir las subvenciones al transporte (un 60% del billete) sin subir su precio.

El viajero que baje ma?ana al and¨¦n de Sol, por el que transitan unas 70.000 personas al d¨ªa, no podr¨¢ evitar el mensaje publicitario, mire donde mire. ?Cu¨¢nto cuesta eso? ?Cu¨¢nto vale dar un nuevo nombre a una estaci¨®n? Metro no aclara el precio por ¡°razones comerciales¡±, seg¨²n un portavoz, que se compromete a ofrecer un balance econ¨®mico ¡°en unos meses¡±. Samsung, la empresa anunciante, tampoco da ese dato. Fuentes del sector se?alan que el coste de una iniciativa similar puede suponer entre 120.000 y 150.000 euros. Nueva York vendi¨® el nombre de una estaci¨®n del barrio de Brooklyn durante 20 a?os por tres millones de euros.

El nuevo aspecto y nombre de Sol, que hoy se presenta oficialmente, forma parte de una campa?a piloto que tendr¨¢ una duraci¨®n de un mes. Hay otras empresas interesadas, explican desde la empresa p¨²blica. Puede que despu¨¦s de Galaxy Note llegue Pitis Ducados, Pan Bendito Bimbo o Galletas Pr¨ªncipe P¨ªo, como imaginaron ayer desde Twitter miles de internautas.

¡°Es una campa?a muy innovadora, fant¨¢stica. En el mundo de la publicidad el que pega primero pega dos veces¡±, valora Emilio Saliquet, director creativo de la agencia de publicidad R¨¦plica. ¡°Tendr¨¢ un gran impacto, ya lo ha tenido en los medios. Innovar multiplica por 10 o 20 el efecto de una campa?a¡±, a?ade.

Al urbanista Francisco Pol, responsable de varios programas de rehabilitaci¨®n en el centro de Madrid, le preocupa la convivencia entre p¨²blico y privado. ¡°Nos est¨¢n haciendo perder el norte, esto parece una subasta al estilo de ?Bienvenido, Mister Marshall!¡±. Pol considera que, por mucho que ingrese Metro con esta iniciativa, la ganancia siempre ser¨¢ menor que el perjuicio que dejar¨¢ sobre la imagen p¨²blica de un lugar emblem¨¢tico. ¡°Todos tenemos problemas econ¨®micos, pero hay cuestiones de dignidad p¨²blica. Esta iniciativa puede provocar una desvalorizaci¨®n de los ciudadanos, la referencia de los lugares no se vende. La Puerta del Sol no es un reclamo publicitario¡±.

Alberto Coraz¨®n, dise?ador del anterior mapa del metro, recuerda que los nombres de las estaciones son claves para entender la red. ¡°?Qui¨¦n puede atribuirse el control y manipulaci¨®n del espacio p¨²blico?¡±, se pregunta. Y responde: ¡°Pertenece a los ciudadanos y no se debe traspasar la frontera sin una consulta de fondo¡±. Otro dise?ador, Juan Ignacio Macua, no rechaza la intervenci¨®n de la publicidad ¡°de forma ef¨ªmera¡±, aunque considera que ¡°la fuerza de la palabra Sol prevalecer¨¢¡±.

La oposici¨®n tiene visiones opuestas. El diputado Jos¨¦ Manuel Franco (PSM) defiende v¨ªas alternativas de financiaci¨®n, como cobrar a las grandes superficies por construirles una estaci¨®n de metro cercana. Franco critica que ¡°se prostituya el nombre y la identidad¡± de Sol y tambi¨¦n la ¡°opacidad¡± con los datos. La diputada Loreto Ruiz de Alda (UPyD) considera que es una opci¨®n v¨¢lida para obtener m¨¢s ingresos para mantener la red, aunque tambi¨¦n pide que se detallen los datos. Ambos diputados preguntaron en sede parlamentaria, sin ¨¦xito, por el coste de la pol¨¦mica campa?a M¨¢s por menos de autopromoci¨®n que Metro lanz¨® en enero. La empresa p¨²blica a¨²n no ha aclarado cu¨¢nto pag¨® por ella.