La casa Aramburu se pone moderna
C¨¢diz Preview convierte un palacio del XVIII en centro de creaci¨®n contempor¨¢nea
Imposible que Mar¨ªa Luisa, Micaela y ?lvaro Aramburu hubieran imaginado alguna vez que su majestuosa casa se llenar¨ªa de fotograf¨ªas de seres humanos con cabeza de perro y de pasteles hechos de cer¨¢mica o que albergar¨ªa una l¨¢mpara reciclada con botellas de Sol¨¢n de Cabras. Dicen algunos que los conocieron que los hermanos Aramburu eran tan sobrios y majestuosos como su casa de la plaza de San Antonio de C¨¢diz. Por eso seguro que nunca se hubieran imaginado su mansi¨®n ni tan moderna ni tan llena de pueblo.
?El palacio Aramburu abri¨® sus puertas al p¨²blico el jueves casi de noche. Decenas de personas tuvieron que hacer turnos para entrar a ver el continente y el contenido. El continente, la propia casa. El contenido, C¨¢diz Preview, una iniciativa del colectivo Sinmurallas con el que pretende mostrar piezas hechas por creadores y artistas gaditanos.
Hay muebles, objetos de cer¨¢mica, ropa, esculturas, fotograf¨ªas, cuadros y hasta bombones y chocolates de formas impensables. "Creo que este tipo de iniciativas pueden servir para hacer ciudadan¨ªa. Para formar, para mostrar modelos de excelencia, ejemplos que podemos imitar", afirma Francisco Cano, promotor del evento. "Es un edificio estupendo que, por s¨ª solo, tiene su atractivo. Nosotros lo hemos completado con propuestas, con proyectos de dise?o gr¨¢fico, de moda, de arte... Intentamos atraer a todas las disciplinas de la cultura, con una oferta a?adida de actividades, conferencias y presentaciones de libros", a?ade el promotor.
Francisco Cano dec¨ªa el viernes que la casa se hab¨ªa quedado peque?a para todo lo que quer¨ªan mostrar. Tan peque?a, que en la puerta se agolpaban decenas de ciudadanos de todas las edades para entrar en el palacio minutos antes de la apertura de sus puertas. La entrada, presidida por una espectacular escalera en curva, apenas presagiaba el contenido de las estancias. El d¨²o art¨ªstico Vendaval, en la primera habitaci¨®n, ha instalado Cocinando una trama, con platos y comidas de cer¨¢mica de colores, con las que quieren mostrar "el artificio ceremonioso que a menudo envuelve las relaciones sociales".
El palacio alberga una inciativa del colectivo gaditano Sinmurallas
Muy cerca de este fest¨ªn art¨ªstico-gastron¨®mico, el creador Arsenio Rodr¨ªguez, o MundoArtsenio, ense?a los nuevos mu?ecos fabricados con miembros de otros. O una espectacular l¨¢mpara azul realizada con 900 botellas de agua de Sol¨¢n de Cabras. Otro de los atractivos de C¨¢diz Preview es que los ciudadanos que se acerquen hasta el palacio Aramburu estos d¨ªas podr¨¢n tambi¨¦n expresarse libremente gracias a la idea de Espacio Creativo La Ba?era.
La muestra se cierra el lunes, d¨ªa 19 de marzo, festivo por la celebraci¨®n del 200? aniversario de la Constituci¨®n de 1812. As¨ª que, en la sala que ocupa La Ba?era, quien quiera podr¨¢ desahogarse: "Nuestra idea es un muro en blanco donde cada uno puede coger su rotulador y exponer su idea del bicentenario", explica Carlos Criado, miembro de este grupo. "No quer¨ªamos mensajes institucionales sino m¨¢s bien las visiones personales sobre esta conmemoraci¨®n", a?ade. Algunos de estos mensajes pueblan ahora lo que hasta hace no tanto era el dormitorio de ?lvaro Aramburu: "Por aqu¨ª, vivienda digna". "?Hacia d¨®nde?" "Por un poco de ilusi¨®n, en tiempos de pesimismo".
Pero no todo es contempor¨¢neo en C¨¢diz Preview. Muchos se acercaron hasta la casa atra¨ªdos ¨²nicamente por el inmueble, de tres plantas, erigido en el siglo XVIII y reformado a principios del XX por el arquitecto municipal Juan Cabrera Latorre. Un palacio tan ecl¨¦ctico que contrasta estos d¨ªas con un contenido tan moderno. All¨ª vivieron los tres hermanos Aramburu, propietarios del Banco de C¨¢diz, conocido como Banca Aramburu. Se llamaban ?lvaro, Mar¨ªa Luisa y Micaela. No dejaron descendencia directa, aunque en el Museo de C¨¢diz, una jovenc¨ªsima Micaela pintada por Zuloaga a¨²n contempla a los visitantes con los brazos en jarras y media sonrisa en los labios. Quiz¨¢ no le disgusta del todo lo moderna que est¨¢ su antigua casa.
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