Elton y Aris, azote de los criminales
Son dos perros especializados en la detecci¨®n de restos biol¨®gicos y de papel moneda
Cuando los agentes de Polic¨ªa Judicial de Madrid vieron al pastor belga Elton rastrear una zona de Collado Mediano, no daban cr¨¦dito. Este perro nervioso y juguet¨®n de la Guardia Civil empez¨® a corretear por una zona llena de vegetaci¨®n. Junto a ¨¦l estaba su gu¨ªa Juan Manuel S¨¢nchez, que le animaba a seguir con su particular misi¨®n. Dio varias vueltas, sigui¨® a su propio criterio, regres¨®. Y en un momento determinado, se ech¨® al suelo y empez¨® a se?alar con el hocico una piedra. ¡°Sigue, peque?o, sigue¡± le dec¨ªa su cuidador. Y el animal no dejaba de mover el rabo r¨¢pidamente y de se?alar el peque?o pedrusco.
Cuando se acercaron los t¨¦cnicos del laboratorio de Criminal¨ªstica, se quedaron anonadados. Elton hab¨ªa marcado bajo una piedra y disuelto entre el h¨²medo musgo unos restos de sangre que pertenec¨ªan a una chica de 17 a?os que fue asesinada por un conocido a principios del pasado diciembre. ¡°El lugar era muy dif¨ªcil de encontrar y, sobre todo, hab¨ªa llovido y la muestra ya no era tan llamativa, pero el perro la encontr¨®¡±, subraya el gu¨ªa.
Como este son muchos los casos que se acumulan en la hoja de servicio de Elton. ¡°Para el animal es un juego. Le hemos entrenado para que detecte todo tipo de fluido y resto biol¨®gico de personas, desde sudor y sangre a personas que est¨¦n ya fallecidas. Cuando lo encuentra, le damos su premio, que es un rodillo de tela¡±, explica el guardia civil S¨¢nchez.
Falsos estornudos
Ver trabajar a Elton resulta curioso. Nada m¨¢s llegar al lugar, su cuidador le tranquiliza, le soba un poco el lomo y le tapa los ojos. Despu¨¦s le incita a que busque. El perro se mueve por la habitaci¨®n o por el descampado con total soltura. Cada poco tiempo parece como si estornudara. Nada m¨¢s lejos de la realidad. En concreto, Elton limpia sus fosas nasales para hacer comprobaciones m¨¢s precisas y no pasar por alto rastros que permitan localizar a v¨ªctimas o a vestigios para desenmara?ar un crimen.
Otro caso famoso en el que intervino fue la llamada Operaci¨®n Puzzle. Esta se abri¨® por parte del equipo de Homicidios de la Guardia Civil a ra¨ªz del hallazgo de un cad¨¢ver descuartizado en el monte de La Mara?osa. Se trataba de un ajuste de cuentas. Cuando los investigadores descubrieron a los supuestos autores, llevaron a Elton. El perro entr¨® en la casa y comenz¨® su juego. Al poco se tir¨® junto a un armario y empez¨® a pegarle con el morro. Debajo del mueble hab¨ªa una gota de sangre seca. Llevaba all¨ª m¨¢s de cuatro a?os. Y pertenec¨ªa al hombre descuartizado.
¡°Lo que sucede es que hay que entrenarle mucho porque el instinto natural de los perros es a lamer los restos que encuentran. Si realmente lo hicieran anular¨ªan las pruebas que hallaran. ¡°Hay que tener mucha paciencia para cambiar su forma natural de actuar. Le adiestramos para que busque sobre todo en los lugares que son muy dif¨ªciles de limpiar, como enchufes, jambas de ventanas o marcos de las puertas¡±, a?ade el guardia civil.
Elton ha trabajado por toda Espa?a. Al ser uno de los tres perros especializados en restos biol¨®gicos, son frecuentes sus viajes a lugares concretos. En Madrid es reconocido por sus jefes. Ha participado por ejemplo en la b¨²squeda de Mar¨ªa Piedad Garc¨ªa Revuelta, una vecina de Boadilla del Monte que desapareci¨® el 12 de diciembre de 2010 tras estar en una fiesta con sus compa?eros de trabajo.
Cauce del r¨ªo
El perro ha buscado en los cauces del r¨ªo Guadarrama y en un bosque de Fuenlabrada sin ¨¦xito ninguno. Tambi¨¦n ha participado en la recuperaci¨®n de restos de una explosi¨®n en Hoyo de Manzanares en el que murieron cinco militares durante unas pr¨¢cticas.
Si Elton se caracteriza por su nervio, un compa?ero suyo de fatigas, Aris, resulta llamativo por su planta. Este pastor alem¨¢n de pelo largo llega tranquilo junto a su gu¨ªa Javier Guti¨¦rrez, que lleva siete a?os en el Servicio Cinol¨®gico de la Guardia Civil. Su perro no ha resuelto ning¨²n crimen, pero s¨ª se ha convertido en la pesadilla de m¨¢s de un delincuente. Lo han entrenado para detectar papel moneda, en concreto euros. Desarrolla su trabajo en cualquier lugar donde se pueda traficar u ocultar dinero. Esto incluye desde aduanas a registros domiciliarios de narcotraficantes.
¡°Es necesario que haya una determinada cantidad de dinero para que el perro la detecte. Su olfato percibe sobre todo la tinta. Si una persona lleva pocos billetes, es f¨¢cil que no lo descubramos¡±, comenta el gu¨ªa. El perro se entrena con billetes triturados que cede el Banco de Espa?a para la formaci¨®n. En este caso, Aris tiene escondida en una llamativa bolsa con restos de papel moneda de 20 euros que en su d¨ªa estuvieron en circulaci¨®n.
El perro, al contrario que su compa?ero, se muestra muy activo y no deja de ara?ar y de marcar con sus zarpas el objeto que esconde el dinero. Su trabajo resulta muy ¨²til, ya que est¨¢ prohibido sacar m¨¢s de 12.000 euros en efectivo por las fronteras sin declarar a la Agencia Tributaria.
¡°Tambi¨¦n solemos acudir a registros de pisos y de naves para que el perro busque en los lugares m¨¢s insospechados¡±, a?ade el guardia civil. Estos pueden ser desde cajones hasta zulos fabricados ex profeso para ocultar el beneficio de sus il¨ªcitas actividades. A veces incluso le ha tocado rastrear barcos. ¡°Puede que no sean operaciones tan llamativas como otros perros [drogas, tabaco,...] pero son muy eficaces para evitar la evasi¨®n fiscal y que el euro salga de forma ilegal¡±, a?ade el agente, mientras juega con el rodillo que le acaba de dar a Aris.
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