Puig aglutina el frente contra Alarte y se convierte en l¨ªder del PSPV

Nada evit¨® el choque de trenes. Ni las voluntariosas intervenciones de la direcci¨®n federal, ni la no menos voluntariosa ret¨®rica mantenida por los candidatos sobre la integraci¨®n mientras dirim¨ªan una batalla interna que el secretario general del PSPV-PSOE, Jorge Alarte, ya no tuvo reparos en calificar este s¨¢bado como un ¡°congreso 11 bis¡±, o sea, una repetici¨®n de la contienda del mes de septiembre de 2008, con los mismos actores de entonces, solo que con resultados distintos. Esta vez Ximo Puig, que perdi¨® por estrecho margen hace casi cuatro a?os, logr¨® hacerse con el control del partido. Para ello, aglutin¨® un frente antialartista de sectores diversos del partido que le depar¨® 321 de los 525 votos de los delegados (un 61%) frente a 179 (un 34%) del secretario general saliente.

Nada m¨¢s conocerse el resultado, un Puig euf¨®rico agradeci¨® a los otros candidatos (Jorge Alarte, Manuel Mata y Francesc Romeu) su trabajo, reivindic¨® las ra¨ªces del PSPV-PSOE para citar a Joan Lerma y Cipri¨¤ Ciscar, presentes en la sala, y explic¨® que el suyo es ¡°un proyecto que no puede perder a nadie¡±.

En un aula del campus de la Universidad de Alicante, donde se celebra el congreso, Alarte reuni¨® a los suyos y confirm¨® que dejar¨¢ de ser portavoz parlamentario. ¡°Mi futuro pasa por ser diputado y militante del PSPV y poder llamaros todos los d¨ªas¡±, les dijo. Mientras, Romeu, cuya inclinaci¨®n final por Puig decant¨® el resultado, se declar¨® satisfecho de ¡°participar en la mayor¨ªa¡±, aunque no quiso confirmar si ha pactado con Puig ser vicesecretario general y portavoz de la ejecutiva, cuya composici¨®n se conocer¨¢ este domingo y que debe permitir al nuevo l¨ªder sumar m¨¢s apoyos.

Alarte, sabedor de que se lo jugaba todo frente a un pacto de pr¨¢cticamente todas las familias y sectores de la organizaci¨®n, asumi¨® en el ¨²ltimo momento, al dirigirse por la ma?ana al plenario del congreso, el fracaso de su discurso conciliador para situar a Puig en una v¨ªa de resistencia a la renovaci¨®n y el cambio en el PSPV-PSOE. Fue un discurso en el que, por primera vez, dibuj¨® un retrato que se parece a la situaci¨®n real de ¡°crisis interna¡± que vive el partido de los socialistas valencianos desde la derrota de 1995, incapaz de encontrar una estabilidad que le d¨¦ oportunidades de disputar la hegemon¨ªa al PP.

"Aqu¨ª no vamos a parar a la derecha, vamos a ganar a la derecha", proclam¨® Puig

Descartados Romeu y Mata para la votaci¨®n porque no alcanzaron el m¨ªnimo de avales exigidos (eran necesarios 105, un 20% de los 525 delegados con derecho a voto), solo Puig y Alarte se dirigieron en la ma?ana del s¨¢bado a los socialistas reunidos en el paraninfo de la Universidad de Alicante.

El orden de las intervenciones previas a la votaci¨®n de la que saldr¨ªa el nuevo secretario general del partido se decidi¨® por sorteo. Y le toc¨® comenzar a Puig, quien entr¨® en el sal¨®n de actos entre los aplausos de los suyos, que no pod¨ªan contener la euforia tras amarrar durante la noche su acuerdo con Francesc Romeu. ¡°El socialismo es optimismo por definici¨®n¡±, proclam¨®, para citar a continuaci¨®n a Pablo Iglesias y a Ram¨®n Rubial. Mencion¨® despu¨¦s a Felipe Gonz¨¢lez (con ¨¦l se redujo la jornada laboral, record¨®), y habl¨® de conquistas de los socialistas como la sanidad p¨²blica o la educaci¨®n gratuita. ¡°No somos un club de fans, sino un partido de izquierdas consciente¡±, explic¨® Ximo Puig, que record¨® a fallecidos como Antonio Godoy, Antonio Moreno y Loli Huesca y elogi¨® a los j¨®venes que protestaron por las calles de Valencia como ¡°un ejemplo de rebeld¨ªa¡±.

El dirigente saliente asumi¨® el fracaso de su discurso conciliador

Puig se refiri¨® a la lucha contra la corrupci¨®n, que ¡°est¨¢ en el ADN de los socialistas¡± y que no es patrimonio de nadie. Tras hablar de Asturias y Andaluc¨ªa, calvario de derrotas electorales de los ¨²ltimos tiempos al conseguir frenar al PP, asegur¨®: ¡°Aqu¨ª no vamos a parar a la derecha, aqu¨ª vamos a ganar a la derecha¡±. El candidato propuso ¡°una alternativa socialdem¨®crata, valencianista, europe¨ªsta y feminista¡±. Se refiri¨® a la deteriorada imagen de la Comunidad Valenciana y dijo: ¡°Los corruptos son los de la derecha, no el pueblo valenciano¡±.

Puig no eludi¨® el cuerpo a cuerpo, aunque lo hizo puntualmente. Tras apelar a la unidad y a la democracia interna, lanz¨® una puya a Alarte, sin citarlo, por oponerse en el congreso del PSOE a la elecci¨®n por los militantes del secretario general: ¡°No se puede decir una cosa aqu¨ª y otra en Sevilla¡±. Pero acto seguido, tras asegurar que ¡°Rajoy quiere borrar a la Comunidad Valenciana y es hora de que Rubalcaba la ponga en el mapa¡±, hizo un gui?o a Mata, Romeu y Alarte, a quienes calific¨® de ¡°activos fundamentales del partido¡±.

Jorge Alarte subi¨® al estrado a continuaci¨®n y reconoci¨® que ¡°no ha sido posible un pacto por el socialismo¡±. Y sorprendi¨® a los delegados con un discurso formalmente suave pero muy duro en el choque con la cultura pol¨ªtica interna de la que procede Ximo Puig. Tras afirmar que hay que superar el s¨ªndrome de la derrota de 1995 ¡ªcuando los socialistas valencianos, despu¨¦s de m¨¢s de una d¨¦cada al frente de la Generalitat, fueron desalojados por el PP¡ª, elogi¨® el periodo de Lerma en la presidencia de la Generalitat, pero insisti¨® en que hay que mirar al futuro y advirti¨®, en una clara referencia a la plataforma promovida por los lermistas, contra las opciones que ¡°solo sirven para construir alternativas internas de poder¡±.

Alarte pidi¨® respaldo para el trabajo del grupo parlamentario del que es portavoz en las Cortes y reivindic¨® a los ¡°nuevos alcaldes¡±, como los de Vila-real, Mislata, Alcoi y otros.

El todav¨ªa secretario general del PSPV defendi¨® que hay que sintonizar con el PSOE de Rubalcaba, sin matices. Y afirm¨® que se alegra de que Puig diga que la lucha contra la corrupci¨®n est¨¢ en el ADN del partido, pero record¨®: ¡°Algunos han criticado que luchemos tanto contra la corrupci¨®n¡±. Alarte se mostr¨® frustrado por la evoluci¨®n del debate y se?al¨® que la divisi¨®n de los socialistas valencianos causa efectos en la sociedad. ¡°Este congreso 11-bis no es un mensaje coherente para los valencianos¡±, asegur¨®, tras reivindicar que, aunque el PSPV perdi¨® las elecciones, el diagn¨®stico que hizo de la situaci¨®n valenciana ¡°es cierto¡±.

Alarte insisti¨® una y otra vez en que lo que hab¨ªa dicho Puig formaba parte del ¡°programa compartido¡± por todos, pero marc¨® las diferencias de an¨¢lisis y de actitud con su adversario. As¨ª, dej¨® caer que no se puede estar 30 a?os con lo mismo ¡ªuna puya directa a su rival, encuadrado en el lermismo desde los a?os ochenta¡ª y record¨® que, en cambio, ¨¦l procede del movimiento estudiantil. Tras asegurar que su objetivo sigue siendo ganar las elecciones, no ¡°estar en un cargo¡±, Alarte se dirigi¨® a los delegados de Mata y Romeu, a cuya libertad apel¨® para pedirles el voto. ¡°Desde la conciencia de haberlo intentado generosamente¡±, asegur¨® estar dispuesto ¡°solo a una componenda: el futuro del socialismo valenciano¡±.

El 12? congreso de los socialistas valencianos ser¨¢ clausurado en la ma?ana de hoy por el secretario general del PSOE, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, que felicit¨® a Ximo Puig.