Pese al Sergas, ella se opera

Charlotte no sale mucho de casa, dice que ¨²ltimamente est¨¢ sin ganas de nada, cansada, pero el lunes busc¨® fuerzas para ir de Vigo a A Coru?a. Dependiendo del ¨¢nimo, esto puede costar mucho. Quer¨ªa revisar su expediente en el Tribunal Superior de Xustiza (TSXG), y se volvi¨® a casa con un certificado judicial que sirve de coartada a la Xunta y deja un reguero de dudas en quien contempla la maniobra desde fuera.

Algo extra?o debi¨® de pasar para que el Sergas, con un retraso de m¨¢s de un mes, haya podido recurrir una sentencia en su contra cuando el plazo fijado por los jueces era solo de 10 d¨ªas. La condena pionera en Galicia que obligaba a la Xunta a pagarle la operaci¨®n de reasignaci¨®n de sexo a la viguesa se dict¨® el 27 de febrero y fue comunicada a la abogada de la paciente el 6 de marzo. Lo presumible, por habitual, ser¨ªa que aquel mismo d¨ªa el TSXG hubiese notificado la sentencia al Sergas, pero en el papel que le entregaron a la demandante en el tribunal se aseguraba que la Xunta fue informada por fax el 28 de marzo. De esta manera, Semana Santa mediante, los plazos s¨ª le cuadraban a la Administraci¨®n gallega para recurrir, tal y como hizo, el 11 de abril.

Esta ¨²ltima fecha coincide como un clavo con el anuncio de recortes, en prestaciones supuestamente prescindibles, por parte del Ministerio de Sanidad. S¨ª, verse a diario entre las piernas un pene y unos test¨ªculos que producen hormonas masculinas, siendo mujer, ser¨¢ muy duro, pero no es cuesti¨®n de vida o muerte.

No obstante, ah¨ª est¨¢ la hemeroteca para, cuando menos, despertar sospechas de que la realidad en altas instancias fue otra. El 13 de marzo, un portavoz de la Conseller¨ªa de Sanidade respond¨ªa a una periodista del Faro de Vigo algunas preguntas acerca del caso. ¡°La Xunta a¨²n estudia si recurrir¨¢ la sentencia¡±, se dec¨ªa en la noticia publicada el d¨ªa 14 por este peri¨®dico vigu¨¦s y La Opini¨®n de A Coru?a, pero ¡°ha avanzado que dar¨¢ una soluci¨®n a la paciente; esto es, que la operar¨¢¡±.

Si los abogados del Sergas estudiaban la sentencia, parece que ya la ten¨ªan en sus manos. Hasta el d¨ªa 11, en cambio, no la recurrieron, y contando desde esta ¨²ltima fecha a¨²n cuentan con 12 d¨ªas para acopiar argumentos. Seg¨²n supo la demandante en el Superior, la estrategia de la Xunta ser¨¢ recordar dict¨¢menes pret¨¦ritos, y contrarios a los pacientes, de otros tribunales espa?oles.

Ante este panorama, la letrada de oficio de C.T.G.A., conocida como Charlotte Goiar en los oc¨¦anos de Internet por su activismo en pro del reconocimiento del s¨ªndrome que padece (el de Harry Benjamin, una alteraci¨®n gen¨¦tica que se produce en el embarazo), contempla la posibilidad de solicitar a los jueces que declaren improcedente el recurso. Aun as¨ª, Charlotte ya da por hecho que la alegaci¨®n del Sergas acabar¨¢ viajando a Madrid. Entonces, si el Supremo lo tramita, habr¨¢ que esperar a?os por la nueva sentencia. Claro que el historial del alto tribunal no da demasiadas esperanzas. Respecto a los casos de personas que han nacido cautivas en un cuerpo ajeno a su identidad sexual y que reclaman a la sanidad p¨²blica una operaci¨®n que supera siempre, y de largo, los 15.000 euros para empezar a vivir su vida, la c¨²spide de la Justicia espa?ola ¡°tiene una doctrina arcaica, retr¨®grada¡±, comenta la viguesa. ¡°No reconoce la enfermedad¡±, la confunde con ¡°una fiesta de homosexuales¡±. Aunque la instrucci¨®n incluya una avalancha de informes m¨¦dicos y psiqui¨¢tricos que, como en el caso de Charlotte Goiar, confirman que la persona padece importantes problemas de salud y un s¨ªndrome ansioso-depresivo asociado a la circunstancia de su nacimiento.

Desde hace 23 a?os, Charlotte toma hormonas por prescripci¨®n de una doctora del Hospital Xeral. Desde hace 21, est¨¢ a tratamiento psicol¨®gico. No trabaja porque nadie en la vida la ha querido contratar, y la modesta prestaci¨®n que recibe apenas le llega para sufragar su lucha por el reconocimiento del s¨ªndrome. ¡°Nunca me compro ropa¡±, lamenta. As¨ª, van cayendo las hojas del calendario. ya ha cumplido los 39. Pero antes de llegar a los 40 se va a operar. A pesar de la Xunta.

El m¨¢s famoso cirujano pl¨¢stico de Espa?a, Iv¨¢n Ma?ero, le va a dar facilidades y cuando los an¨¢lisis den unos par¨¢metros correctos, Charlotte viajar¨¢ a Barcelona para la intervenci¨®n. Ma?ero, eje del programa Cuerpo M¨¦dico de La Sexta, propietario de tres cl¨ªnicas, especialista en cirug¨ªa correctiva de la disforia de g¨¦nero, encabeza una fundaci¨®n que lleva su nombre y que opera gratuitamente a ni?os en ?frica. Para ello ha abierto tambi¨¦n quir¨®fano en Guinea-Bissau. La amistad entre Ma?ero y Charlotte Goiar empez¨® hace tres a?os, cuando ella sali¨® en defensa del m¨¦dico a trav¨¦s de la web del s¨ªndrome de Harry Benjamin: shb-info.org. El cirujano hab¨ªa defendido p¨²blicamente que el transexualismo era una enfermedad de naturaleza fisiol¨®gica, y diversos grupos de transexuales cargaron contra ¨¦l.

A pesar de la Xunta, a pesar de lo que se eternice la Justicia. La paciente del Sergas lograr¨¢ operarse sin esperar al Sergas. Y mientras tanto, una escritora de Vigo planea su biograf¨ªa en gallego. Clara do Roxo la llam¨® hace unos d¨ªas para proponerle la nueva aventura.