Buenas noticias
Una vez me hablaron de un experimento casero bastante curioso. Me dijeron que era muy sencillo de hacer y que los resultados eran sorprendentes. Se trataba de meter arroz cocido en dos botes de cristal. Despu¨¦s de taparlos bien, hab¨ªa que ponerle una etiqueta a cada uno. En una hab¨ªa que escribir ¡°amor¡± y en la otra, ¡°odio¡±. Luego, hab¨ªa que intentar transmitir esas emociones a cada bote, con insultos a uno y palabras bonitas al otro. Despu¨¦s de hacerlo durante algunas semanas, el arroz del odio se llenar¨ªa de moho, pero el del amor sufrir¨ªa mucho menos deterioro. Yo nunca lo prob¨¦, aunque me pareci¨® muy inquietante.
Tiempo despu¨¦s, rebuscando en Internet me enter¨¦ de que este experimento estaba basado en los estudios de un autor japon¨¦s que se llama Masaru Emoto. Este se?or asegura que la forma de los cristales del hielo cambia sustancialmente dependiendo de los pensamientos, palabras o sonidos a los que haya estado expuesta ese agua. En su experimento, los cristales extra¨ªdos del agua de una botella en la que pon¨ªa ¡°gracias¡± eran blancos e inmaculados, como un copo de nieve de dibujos animados. Pero los que proven¨ªan de un recipiente en el que pon¨ªa ¡°me das asco¡± eran deformes y amarillentos. As¨ª, tal cual.
Estos estudios se hicieron populares enseguida porque implicaban un pregunta fundamental: si somos capaces de alterar el agua s¨®lo con nuestro pensamiento, ?qu¨¦ no podremos hacernos a nosotros mismos, que somos un 90% agua?
En esto ven¨ªa yo pensando el otro d¨ªa mientras escuchaba los informativos por la radio. Aun a sabiendas de que el pensamiento cient¨ªfico no le da ninguna credibilidad a estos experimentos, son muchas las voces que aseguran que dan resultados. ?Y si fuera verdad? El efecto que estar¨ªa produciendo en mi cuerpo escuchar los informativos ser¨ªa demoledor. Me quit¨¦ los auriculares inmediatamente. Fue un implulso.
Llevamos meses, a?os ya, recibiendo un bombardeo constante de noticias horrorosas. Siempre malas noticias, siempre angustiosas. Paro, prima, d¨¦ficit, recortes, impuestos. Asesinato, maltrato, robo. La etiqueta ¡°odio¡± parece un chiste al lado de una buena sesi¨®n de informativos. Si es verdad lo que dice el se?or Masaru Emoto, nuestros cuerpos deben de ser aut¨¦nticos estercoleros flotantes ahora mismo. Pero no necesitamos un microscopio para comprobar nada.
Es evidente la gente est¨¢ triste, nerviosa y asustada. Se nota en la fruter¨ªa, en el metro y en el ascensor. Se nota hasta en el Twitter. Necesitamos buenas noticias. Est¨¢mos ¨¢vidos de ellas. Los informativos deber¨ªan estar obligados a abrir con buenas noticias, y los peri¨®dicos deber¨ªan tener que ponerlas en portada. Opino que es urgente y necesario. Opino que a esta altura ya es una cuesti¨®n de salud p¨²blica.
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