El culebr¨®n de Aguas de Valencia

Aguas de Valencia celebrar¨¢ este pr¨®ximo jueves su junta general de accionistas en una situaci¨®n muy distinta de las anteriores. El Banco de Valencia, socio de referencia de la empresa, se encuentra intervenido por el Banco de Espa?a y gestionado por el Fondo de Reestructuraci¨®n Ordenada Bancaria (FROB) que recientemente ha denunciado al anterior director general del banco, Domingo Parra; su esposa, Mar¨ªa Jos¨¦ Aznar, y al presidente de Aguas, Eugenio Calabuig. El FROB present¨® ante la Audiencia Nacional un informe de 200 p¨¢ginas en el que se detallan operaciones cruzadas entre Aguas de Valencia y la inmobiliaria Costa Bellver de las que, supuestamente, saldr¨ªa perjudicada la entidad financiera. De momento, la Audiencia a¨²n no se ha pronunciado sobre el escrito del FROB.

La empresa que preside Eugenio Calabuig no atraviesa su mejor momento en lo que a imagen p¨²blica se refiere. Una reciente sentencia del Tribunal Supremo ech¨® por tierra el concurso por el que se le adjudicaba la gesti¨®n en alta del suministro de agua potable a Valencia y a su ¨¢rea metropolitana; aunque hay que decir que la causa de esta decisi¨®n es ajena a la firma. Aguas ha encontrado un firme aliado en el Ayuntamiento de Valencia, refractario a que Aguas de Barcelona tenga la m¨ªnima posibilidad de hacerse con el control del servicio. Pero los problemas de la empresa valenciana est¨¢n lejos de terminarse. Con independencia de lo que decida la Audiencia Nacional, que a buen seguro no ser¨¢ favorable a sus intereses, en la Diputaci¨®n de Valencia hay quien ha comenzado a revisar el acuerdo por el cual se privatiz¨® el porcentaje que ten¨ªa la corporaci¨®n provincial en la Empresa General de Agua (Egevasa), que pas¨® a manos de Vainmosa, participada por el Banco de Valencia, Facsa y Lubasa. Hace tres a?os este acuerdo ya fue objeto de una fuerte controversia en una junta general de accionistas de Aguas de Valencia.

El protagonista del debate fue el representante de Suez Envinnorement, Pierre Achard, que posee el 33% de las acciones de la compa?¨ªa valenciana. Suez, adem¨¢s, controla el 75% de Aguas de Barcelona. Se entiende que los recelos de Agval hacia Agbar sean inmensos. Los movimientos de la empresa francesa por controlar la valenciana han sido intensos los ¨²ltimos a?os. La t¨¢ctica de esta para frenar las acometidas de Suez ha consistido en alegar conflictos de intereses y vetar la entrada de los franceses al consejo de administraci¨®n para impedirles conocer sus movimientos estrat¨¦gicos.

Fuentes del FROB subrayan que los hechos presentados a la Audiencia son de una gravedad incuestionable

El pulso que libran Aguas de Valencia y Aguas de Barcelona, con la multinacional francesa a caballo de ambas, ha tenido momentos de tensi¨®n e, incluso, de violencia verbal. La denuncia del FROB ha venido a incrementar la desconfianza. En la sede de Agval no dejan de preguntarse c¨®mo es posible que el Fondo haya contratado los servicios del bufete de abogados Manuel Broseta para que le asesore en la gesti¨®n del Banco de Valencia, cuando ese despacho tambi¨¦n representa los intereses de Suez.

Qui prodest? Los responsables de Aguas de Valencia no cesan de repetirse esta pregunta que ya se hac¨ªan los romanos. No es la ¨²nica que se hacen. Hay m¨¢s. Por ejemplo: ?C¨®mo es posible que con los problemas que tiene el banco, la primera acusaci¨®n tenga como objetivo romper el pacto que mantiene a la firma en manos de empresarios valencianos??Qui¨¦n se beneficia de todo esto? Y su respuesta siempre es la misma: Suez, su socio/adversario, Aguas de Barcelona su competencia m¨¢s directa. ?Significa eso que los responsables del FROB, un organismo p¨²blico, est¨¢n trabajando para beneficiar a una empresa privada detr¨¢s de la cual habr¨ªa intereses tan impresionantes como la privatizaci¨®n del Canal Isabel II? Los responsables de Agval no responden. A lo m¨¢s se limitan a esbozar una sonrisa que se pretende de entendimiento.

?Es todo tan sencillo? No parece. La acusaci¨®n del FROB, si prospera, tendr¨¢ consecuencias sobre la direcci¨®n de Agval. De eso no hay duda: Pero el informe presentado en la Audiencia Nacional, hasta donde se sabe, no parece cuestionar la gesti¨®n de Aguas de Valencia sino el esclarecimiento de operaciones cruzadas entre el Banco de Valencia y la inmobiliaria Costa Bellver de la que Eugenio Calabuig es el m¨¢ximo responsable. El silencio del FROB y el desconocimiento exacto del texto de la denuncia alimenta todo tipo de especulaciones, intoxicaciones y afirmaciones interesadas. Pero fuentes del Fondo subrayan que los hechos presentados a la Audiencia son de una gravedad incuestionable. La pregunta inevitable es si son m¨¢s graves que otras operaciones inmobiliarias de mayor cuant¨ªa en las que el banco est¨¢ involucrado. Si es as¨ª, nada ser¨ªa objetable. Pero hay preguntas que solo obtendr¨¢n respuesta con el paso del tiempo. Lo que es seguro es que no se conocer¨¢n en la junta de accionistas del pr¨®ximo jueves en la que se vivir¨¢ otro episodio del culebr¨®n de Aguas de Valencia.