Un oficial achaca un siniestro mortal en una fragata al desgaste de materiales

Siete a?os han transcurrido desde que una explosi¨®n en la sala de calderas acab¨® con la vida de dos marineros de la fragata Extremadura hasta que el jefe de m¨¢quinas del buque se ha sentado en el banquillo como presunto responsable de dos delitos contra la eficiencia del servicio.

El juzgado militar territorial n¨²mero 4 de A Coru?a inici¨® ayer el juicio oral contra Pablo Varela S¨¢nchez, oficial a cargo de las m¨¢quinas de la Extremadura que orden¨® encender las calderas del buque y que, supuestamente, ignor¨® las advertencias de sus subordinados cuando le telefonearon a casa de madrugada para decirle que los niveles de contaminaci¨®n por cloro estaban muy por encima de los l¨ªmites. Tampoco se present¨® en el buque cuando el juez inspeccion¨® la nave para levantar los cad¨¢veres.

Ocurri¨® la madrugada del 19 de diciembre de 2005 en el Arsenal militar de Ferrol. El buque zarpaba ese mismo d¨ªa para realizar una maniobras en alta mar y el oficial mand¨® arrancar la maquinaria. A las dos de la madrugada, una explosi¨®n en la sala de calderas de popa (1B) abras¨® a Erik Noval G¨®mez y Francisco P¨¦rez Castrill¨®n, dos marineros de 20 y 28 a?os que estaban de guardia.

La Armada y el acusado sostuvieron desde el primer momento que el accidente se produjo por el desgaste de las tuber¨ªas de una fragata construida en los setenta en los astilleros ferrolanos y con tres d¨¦cadas de mar. Varela declar¨® ayer que act¨²o ¡°seg¨²n el manual¡± y que el siniestro se debi¨® a un defecto de los tubos, que estaban agrietados. Los peritos admiten que el desgaste de los materiales rozaba el 85%.

El fiscal y la acusaci¨®n particular piden para el oficial acusado penas que van de uno a tres a?os de c¨¢rcel y suspensi¨®n de empleo por su posible negligencia. Se?alan que otro manual que el acusado dijo no haber le¨ªdo, recomendaba apagar la caldera al sobrepasar los l¨ªmites de cloro que alcanzaron registros hist¨®ricos.

La perseverancia de Isabel G¨®mez, madre de Erik, ha impedido que un tribunal togado militar coru?¨¦s archivase el caso en septiembre de 2009. El fiscal tambi¨¦n se opuso al sobreseimiento y el Tribunal Supremo les dio la raz¨®n y orden¨® abrir juicio oral. ¡°Quiero justicia y que admitan lo que pas¨®. No tomaron las medidas de seguridad necesarias en un barco viejo¡±, afirma Isabel G¨®mez. El periplo judicial del accidente de la fragata Extremadura ha estado siempre rodeado de controversia por las denuncias de un cabo primera del buque, Jorge Miguel Gago, que se?al¨® a los mandos de la Armada como responsables de un accidente que, en su opini¨®n, se pudo evitar y que siempre se afanaron en tapar mientras ascend¨ªan al acusado a teniente de nav¨ªo. El cabo, que declara hoy, fue expedientado y abandon¨® la Marina. La familia de los marineros muertos reclaman una indemnizaci¨®n por da?os morales.