¡°De aqu¨ª no nos movemos hasta que no se solucione el conflicto¡±
Cinco trabajadores del sector venden camisetas, explican el conflicto y recogen firmas
Los turistas que cruzan el paseo del Prado de Madrid para visitar el museo o los que se quedan ensimismados con la belleza de la fuente de Neptuno se topan con Miguel ?ngel Colmenero y Jos¨¦ Antonio ?lvarez, dos mineros de Le¨®n que custodian uno de los puntos de informaci¨®n que el sector tiene en la capital para protestar contra los recortes de las ayudas al carb¨®n. Estos dos trabajadores de Le¨®n se ofrecieron como voluntarios para explicar a todo transe¨²nte que su conflicto con el Ministerio de Industria. Sentados en uno de los bancos del jard¨ªn urbano, a estos dos mineros se le pasan las horas volando entre la venta de camisetas, la recogida de firmas y las charlas con los viandantes.
¡°La gente est¨¢ muy cabreada y cuando ve el puesto aprovecha para darnos su apoyo y para expresar su malestar contra los recortes¡±, explica Colmenero, prejubilado de 44 a?os. Al mediod¨ªa llegaba al puesto Rosa Irene, una vecina del barrio de Las Letras que aprovecha el paseo matinal con su perro para visitarlos. ¡°Cuando llego a Neptuno y veo un d¨ªa m¨¢s su pancarta no puedo evitar alegrarme. Entonces Floky (su perro) y yo nos acercamos para pedirles que sigan adelante¡±.
La Federaci¨®n de Industria del sindicato CC OO decidi¨® hace dos semanas establecer dos puestos de informaci¨®n (uno frente al museo del Prado y otro frente al Ministerio de Industria) para seguir visibilizando su protesta tras las marchas mineras a la capital que culminaron con una gran manifestaci¨®n el 11 de julio. El punto de Nuevos Ministerios lo custodian tres mineros de Asturias y Le¨®n. Su horario es de nueve de la ma?ana a dos de la tarde y de cuatro a ocho de la tarde. ¡°De aqu¨ª no nos movemos hasta que no se solucione el conflicto¡±, sentencia ?lvarez, de 43 a?os.
Desde que abrieron el puesto ha habido tres relevos. Ellos llevan una semana durmiendo en una furgoneta prestada por un compa?ero de Le¨®n y aparcada en el patio de la sede de CC OO. Est¨¢n cansados pero no pierden la ilusi¨®n. Cada d¨ªa trae consigo un par de an¨¦cdotas que les anima el paso de las horas. Sin ir m¨¢s lejos, esta ma?ana una turista argentina les preguntaba por los bares de tapas m¨¢s baratos del centro. Al rato, una estatua humana disfrazada de mago ¨¢rabe se ha instalado a diez metros del punto de informaci¨®n, deleitando a todo aquel que cruzaba con su espect¨¢culo.
Miguel ?ngel est¨¢ encantado con la cantidad de turistas que les solicitan informaci¨®n y se solidarizan con ellos. ¡°Cuando nos hablan en ingl¨¦s recurrimos a Sergio, un trabajador de CC OO que nos acompa?a todo el d¨ªa¡±, explica. Es tal el ¨¦xito del puesto que incluso han colgado un cartel en ingl¨¦s donde se puede leer: ¡°Sign up to support the spanish miners¡± (Firme en apoyo a los mineros espa?oles¡±). La Federaci¨®n de Industria asegura que desde que se abrieron los puestos de informaci¨®n se han vendido cientos de camisetas y se han recogido m¨¢s de 4.000 firmas.
El dinero de la venta se destina a una cuenta com¨²n para ayudar a las familias de los mineros que han estado 65 d¨ªas en huelga indefinida, hasta hoy. ¡°Le est¨¢is dando una lecci¨®n a toda Espa?a¡±, les recuerda Francisco, un minero prejubilado de Riotinto (Huelva) de visita por Madrid. ¡°Gracias, gracias¡±, responden con la mirada puesta en otros derroteros. Esta tarde Gobierno, sindicatos y patronal se re¨²nen en la comisi¨®n de seguimiento del Plan del Carb¨®n. ¡°Si se llegara a un acuerdo, posiblemente desmontar¨ªamos el chiringuito. A ver qu¨¦ pasa esta tarde¡±.
[Finalmente, la reuni¨®n de la comisi¨®n del seguimiento del plan del carb¨®n se cerr¨® sin ¨¦xito despu¨¦s de cinco horas]
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