El cerdo ib¨¦rico andaluz exige protecci¨®n para su marca

Las negociaciones para la modificaci¨®n de la Norma de Calidad del Ib¨¦rico han entrado en su recta final y, lejos de acercarse posturas, se constata cada vez m¨¢s las notables diferencias que hay entre los distintos territorios y entre los productores y la industria transformadora. Cuando parec¨ªa que Andaluc¨ªa hab¨ªa alcanzado un acuerdo con el Ministerio de Agricultura para proteger las producciones de la dehesa, la ¨²ltima reuni¨®n entre las distintas comunidades ha puesto de manifiesto que el departamento que dirige Miguel Arias Ca?ete ha cedido a otras presiones del sector y se ha descolgado con una propuesta que generaliza de nuevo el uso del t¨¦rmino ib¨¦rico y supone un duro rev¨¦s para el sector porcino ib¨¦rico andaluz que, junto con Extremadura, concentra el 94% de la caba?a de cerdos criados en dehesa.

La propuesta que hasta ahora parec¨ªa consensuada pasaba por distinguir entre ib¨¦rico, cuando el producto se obtenga de cerdos cuyos progenitores sean ib¨¦ricos puros; y cruzado de ib¨¦rico, cuando se obtenga de animales con cualquier tipo de cruce, pero manteniendo al menos el 50% de sangre ib¨¦rica. Sin embargo, el Ministerio plantea ahora elevar al 75% el porcentaje de animales cruzados. El consejero de Agricultura, Luis Planas, cree que la propuesta ministerial ¡°lo que hace es rebajar el nivel de exigencia de 100% de pureza del ib¨¦rico puro actual¡±, adem¨¢s de no garantizar el control en la comercializaci¨®n de los diferentes productos, puesto que la Norma de Calidad afecta al jam¨®n, la paleta y la ca?a de lomo de cerdo ib¨¦rico.

La propuesta del Gobierno andaluz recoge el sentir de los productores de Huelva, C¨®rdoba y Sevilla, donde se localiza el 95% de las explotaciones de porcino extensivo, que suscribieron un manifiesto en defensa de la raza porcina ib¨¦rica que aboga porque las producciones tengan en cuenta el entorno (la dehesa), la raza (ahora se admite el cruzado como ib¨¦rico sin diferenciaci¨®n alguna respecto a la raza pura), el manejo y la alimentaci¨®n. ¡°Se est¨¢n vendiendo jamones ib¨¦ricos criados de forma intensiva con piensos, devaluando el producto¡±, explic¨® Jos¨¦ Luis Garc¨ªa-Palacios, presidente de Asaja en Huelva, que se hace eco de la grave crisis del sector desde que se implant¨® la anterior norma del a?o 2004.

El consejero de Agricultura abunda al respecto y expone c¨®mo en los tres ¨²ltimos a?os la producci¨®n de bellota en Espa?a ha ca¨ªdo un 26%, mientras la producci¨®n de cebo se ha incrementado un 34%. ¡°No se puede seguir creciendo al amparo de la actual norma del ib¨¦rico, cuando la parte del sector que proporciona la imagen (producci¨®n extensiva en dehesa) y el nombre (100% ib¨¦rico) se halla inmerso en una profunda crisis debida a la sobreoferta y a la falta de diferenciaci¨®n entre sus productos¡±, sostiene Planas.

Extremadura y Andaluc¨ªa suman el 94% de los cerdos criados en dehesa

Tambi¨¦n la Interprofesional del Cerdo Ib¨¦rico, Asici, plantea controles m¨¢s exhaustivos para asegurar la pureza racial de los reproductores y exige que el cruce m¨ªnimo admitido con la madre ib¨¦rica sea del 50%, y no del 75% como propone el ministerio. Asici traslad¨® al Ministerio su propuesta el pasado mes de junio y desde entonces no se ha vuelto a pronunciar a la espera de conocer el proyecto de Real Decreto que el Ministerio se ha comprometido a presentar a principios de octubre, seg¨²n expone su gerente, Andr¨¦s Paredes.

Frente a la propuesta de los productores de la dehesa, el ministerio est¨¢ recibiendo presiones de la patronal de industriales del ib¨¦rico, Iberaice, que ha alertado de la desaparici¨®n del cerdo ib¨¦rico de cebo, que supone m¨¢s del 80% del sector, y con ¨¦l toda una actividad productiva e industrial de alto valor socioecon¨®mico y singular importancia en amplias zonas de varias comunidades.