El fiscal tilda el ¡®caso Mercasevilla¡¯ de ¡°un claro intento de corrupci¨®n¡±
¡°Estos cuatro se?ores iban a trincar¡±, acusa el ministerio p¨²blico ante el jurado
![Javier Mart¨ªn-Arroyo](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Farc-authors%2Fprisa%2Fbe822ad5-55c4-471f-a6de-f8ffe65744e8.png?auth=11b4c18a3c700fde6547c09f2549e6d80e1874bb354890d63a358496e8f9c883&width=100&height=100&smart=true)
![Los acusados, sus abogados y las acusaciones en el juicio del caso Mercasevilla. A la derecha, el exdelegado de Empleo Antonio Rivas.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/72KKMTLYO6QSXWSULFYDZ7XVVI.jpg?auth=c859019ca4af36e2314c3f5843646a7334e49bcf5f09468738384fc10e5d5e5a&width=414)
¡°Estos cuatro se?ores iban a trincar, a robar a los empresarios. (...) Lo que pas¨® fue un claro intento de corrupci¨®n. Y eso no lo podemos permitir¡±. El fiscal anticorrupci¨®n del caso Mercasevilla intent¨® traducir al lenguaje llano la supuesta connivencia de los cuatro acusados para exigir una comisi¨®n ilegal de 450.000 euros a dos empresarios. Era una de sus bazas para convencer al jurado y que condene a los cuatro imputados: los exdirectivos de Mercasevilla Fernando Mellet y Daniel Ponce, la funcionaria Regla Pereira y el exdelegado de Empleo en Sevilla Antonio Rivas.
El informe del fiscal Juan Enrique Egocheaga fue el pr¨®logo de la recta final del juicio, que previsiblemente acabar¨¢ esta semana. El ministerio p¨²blico enfatiz¨® c¨®mo la petici¨®n de una mordida comenz¨® a gestarse en diciembre de 2008 cuando la futura escuela de hosteler¨ªa de Mercasevilla obtuvo la subvenci¨®n de 900.000 euros de la Junta. Para el fiscal, los acusados llevaron a cabo un plan ¡°para intentar hacerse ricos¡± a costa de los dos empresarios de la Raza gracias a su condici¨®n de funcionarios.
El fiscal pide 21 meses de suspensi¨®n y 900.000 euros de multa para los procesados, pena que el PP como acusaci¨®n eleva hasta los 1,35 millones de multa y tres a?os de inhabilitaci¨®n. Mientras, los abogados defensores piden la absoluci¨®n.
El fiscal ha subrayado al jurado que en la fase de instrucci¨®n ya qued¨® claro que los acusados eran funcionarios y por ello estaban acusados de un delito de cohecho, y que la grabaci¨®n que se oy¨® de manera n¨ªtida en la sala fue obtenida de manera legal.
Sobre el inspector del caso cuya declaraci¨®n puso en duda la instrucci¨®n judicial, el fiscal matiz¨®: ¡°Sus opiniones no debieron de tener solvencia porque no fueron plasmadas en un atestado policial¡±, remarc¨®.
El representante del ministerio p¨²blico incidi¨® en que Rivas particip¨® en el proceso de la concesi¨®n de la subvenci¨®n a la Fundaci¨®n Mercasevilla. ¡°No est¨¢ tan lejos como ¨¦l se sit¨²a¡±, subray¨®. Para el fiscal, los documentos internos de Mercasevilla aportados a la causa en las ¨²ltimas jornadas del juicio demuestran ¡°una mayor participaci¨®n de Rivas en las conversaciones previas¡± y ¡°lo acercan¡± al momento de concesi¨®n de la subvenci¨®n, frente a su ¡°inter¨¦s por alejarse¡±.
A continuaci¨®n, record¨® c¨®mo la funcionaria Pereira debi¨® estar implicada en la petici¨®n de la mordida, ya que la conversaci¨®n con el empresario de la Raza ¡°gir¨® ¨ªntegramente sobre la colaboraci¨®n con la Junta¡±. Es decir, la comisi¨®n de 300.000 euros que le exig¨ªan Mellet y Ponce. El fiscal detall¨®: ¡°El empresario la mir¨® porque estaba all¨ª y busc¨® a Pereira, y no hall¨® desmentido de lo que dec¨ªa Ponce. No se lo cre¨ªan \[los empresarios sobre la mordida\] por eso necesitaban comprobaci¨®n¡±.
Respecto a Mellet, que se neg¨® a declarar en el juicio, y a Daniel Ponce, que respondi¨® solo a su abogado, Egocheaga afirm¨® que ¡°cada uno es due?o de su silencio pero esclavo de sus palabras¡±. Ambos acusados se?alaron a Rivas como el art¨ªfice de la petici¨®n de la comisi¨®n, y destac¨® que ninguno de ellos ¡°se sorprendi¨® del encargo de Rivas¡±. De hecho, ¡°asumieron con entusiasmo¡± este encargo. ¡°Eso est¨¢ ah¨ª y no se puede borrar¡±, asegur¨® el fiscal. Sobre el silencio de ambos ante las preguntas del fiscal, a?adi¨®: ¡°Hay que valorar ese silencio¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
Sobre la firma
![Javier Mart¨ªn-Arroyo](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Farc-authors%2Fprisa%2Fbe822ad5-55c4-471f-a6de-f8ffe65744e8.png?auth=11b4c18a3c700fde6547c09f2549e6d80e1874bb354890d63a358496e8f9c883&width=100&height=100&smart=true)