¡°A m¨ª me duele la universidad¡±
Cientos de personas recorren el centro de Madrid contra los recortes y las subidas de tasas Los rectores, invitados por los convocantes, no acuden
En un extremo de la pancarta, la que expone el tema del encuentro (Defendiendo lo nuestro. Universidad P¨²blica), Jos¨¦ Olivares cantaba sus coplillas a mediod¨ªa de este martes junto a la Puerta del Sol. Con su sombrero de ala corta a lo Frank Sinatra, este monitor de 70 a?os, define su estilo como el de ¡°la tonadilla de los juglares de la Edad Media¡±. A sus espaldas, centenares de personas esperan a que arranque la cabecera de la manifestaci¨®n, convocada pro CC OO, UGT y CSIF.
Romance de la Educaci¨®n, de 12 estrofas con rima consonante, empieza as¨ª: ¡°La ense?anza siempre ha sido/ el caballo de batalla/ que nadie ha domesticado/ por eso, siempre se escapa. No est¨¢ tan claro que haya escapado como canturrea Olivares. El Gobierno central ha recortado 4.000 millones del presupuesto general de 2012, la Consejer¨ªa de Educaci¨®n de la Comunidad de Madrid aprob¨® retirar 175 millones a las seis universidades p¨²blicas en julio, carg¨¢ndola sobre las espaldas de los estudiantes con una subida de tasas in¨¦dita que supone doblar su precio en el mejor de los casos.
El juglar contempor¨¢neo, que habla por los codos, asegura que va a todas las manifestaciones por la ¡°insostenible situaci¨®n social que acontece¡±. Est¨¢ muy volcado en el asunto, asegura. Quiz¨¢ demasiado: ¡°A lo mejor me cuesta el divorcio¡±. Con la cabecera ya en marcha, se ve a trabajadores universitarios, a representantes sindicales y a pocos estudiantes. Colectivos como Toma la Facultad han decidido no secundar la protesta. ¡°El que quiera puede acudir a t¨ªtulo individual¡±, explicaba el lunes una portavoz, que se?ala que est¨¢n m¨¢s implicados en otras movilizaciones, como la huelga general del 14N o sus propios actos reivindicativos. En uno de los pocos corrillos de alumnos, Mar¨ªa Carrillo, Patricia Moreno, Daniel Iturriaga o Carlos Arteaga, estudiantes todos de Publicidad de 18 a 22 a?os, sostienen pancartas y prefieren saltarse las clases del d¨ªa ¡°para defender algo que quieren quitar con estos recortes¡±. Supieron de la protesta al salir del metro, por un folleto. ¡°Tengo un amigo que ha tenido que abandonar laal universidad porque no pod¨ªa pagar las tasas¡±, explica Iturriaga. Su matr¨ªcula cuesta este curso m¨¢s del doble, de 700 a 1.300 euros. ¡°A los j¨®venes nos falta iniciativa para movernos¡±.
En el caso de Blanca Souto, ex trabajadora de la Complutense de 28 a?os, lo que falta es tiempo. Camina por el centro de la manifestaci¨®n repasando los apuntes de educaci¨®n matem¨¢tica para su tesis. Durante cuatro a?os, trabaj¨® con una beca de formaci¨®n para profesor universitario, a raz¨®n de unos 1.000 euros mensuales. ¡°A m¨ª lo que me pasa es que me duele la universidad, me da mucha pena¡±, confiesa bajito entre el barullo de gente. Recuerda cuando les comunicaron que no hab¨ªa dinero para fotocopias, que se quedaban sin folios, que hab¨ªa que reducir los gastos de luz. ¡°Se me abren las carnes de que estemos as¨ª¡±, vuelve a sentenciar con voz queda. Est¨¢ preocupada por la p¨¦rdida de calidad, ¡°que afectar¨¢ a los investigadores j¨®venes, seguro. ?Esto es tan inestable! ?C¨®mo vamos a implicarnos igual sabiendo que lo hacemos por amor al arte, que no hay futuro?¡±.
¡°Nos han dejado desplumados¡±, coinciden Ana Mart¨ªnez y Mar¨ªa Antonia Dur¨¢n, de 48 y 47 a?os, cuando la marcha alcanza finalmente la Consejer¨ªa de Educaci¨®n. Ense?an su camiseta contra los recortes en la Universidad Complutense de Madrid (UCM), en la que el cisne del escudo ha sido sustituido por un pajarraco de pata larga despeluchado, de ah¨ª lo de ¡°desplumados¡±. Al fondo, cancioncilla: ¡°?D¨®nde est¨¢n los rectores? Matarile-rile-rile. ?D¨®nde est¨¢n los rectores? Matarile-rile-ron¡ Aplicando los recortes, matarile- rile ¨C rile¡¡±. Los sindicatos convocantes invitaron a los seis rectores de las universidades p¨²blicas madrile?as, que no se han presentado.
¡°Ya nos han tocado mucho¡±, brama micr¨®fono en mano, el secretario de CC OO Educaci¨®n en Madrid, Paco Garc¨ªa, que augura unos presupuestos regionales ¡°terror¨ªficos¡±. La Comunidad de Madrid presentar¨¢ sus cuentas a finales de octubre. La previsi¨®n es que se reduzcan en unos 2.500 millones. ¡°Nos est¨¢n quitando lo nuestro, nos est¨¢n poniendo en la calle, nos est¨¢n despidiendo a casi todos¡±, prosigue Eduardo Sabina, hom¨®logo de UGT, tambi¨¦n desde el altavoz.
Antonio Castro escucha atento en mitad del carril de la calle de Alcal¨¢ cortado por la protesta. Es profesor de Narrativa en la Facultad de Ciencias de la Informaci¨®n de la UCM, con 69 a?os y 35 de carrera. Coincide en lo que su rector, Jos¨¦ Carrillo, manifiesta en las ¨²ltimas semanas. Viven ¡°el peor momento¡± de 35 a?os de democracia en el campus. ¡°Hemos tenido muchas situaciones malas, pero es ahora cuando la universidad p¨²blica est¨¢ en cuesti¨®n¡±, sostiene. Propone crear foros, unirse, combatir juntos. ¡°No hay una soluci¨®n f¨¢cil ni universal, no creo en liberadores ni en mes¨ªas, pero s¨ª en acuerdos y en trabajo conjunto¡±.
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