Retorno a las tesis de Fraga
Rueda contin¨²a como secretario general del PP gallego
Un panel con un retrato de Manuel Fraga preside la entrada al XV congreso del PP gallego y all¨ª estamparon ayer su firma Alberto N¨²?ez Feij¨®o, Mar¨ªa Dolores de Cospedal y luego los militantes que quisieron sumarse al homenaje. El nombre del fallecido patr¨®n de los populares estuvo presente en todos los discursos de apertura. En el de Cospedal, por supuesto, y tambi¨¦n en el del anfitri¨®n, el l¨ªder del PP de Lugo, Jaime Casti?eira, que reivindic¨® el galleguismo de don Manuel. De Fraga no se olvid¨® ni el presidente de Nuevas Generaciones de Galicia y n¨²mero dos de la organizaci¨®n juvenil de los populares espa?oles, Javier Dorado, quien termin¨® su intervenci¨®n evocando la frase que el fallecido dirigente conservador dedic¨® a Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar cuando le entreg¨® el relevo en el partido: ¡°Ni tutelas ni tu t¨ªas¡±. Imbuido del esp¨ªritu de Fraga, del que durante un tiempo trat¨® de escapar, Feij¨®o se dispone hoy a ser aclamado por 2.000 compromisarios del PP gallego en su tercer mandato como presidente del partido.
La principal ¡ªy casi ¨²nica¡ª inc¨®gnita del congreso que ayer se inici¨® en el recinto ferial de Lugo qued¨® resuelta a ¨²ltima hora de la tarde. Tras semanas de especulaciones, fuentes pr¨®ximas a Feij¨®o anunciaron que Alfonso Rueda seguir¨¢ como secretario general, como ya se intu¨ªa en los d¨ªas previos al congreso ante la falta de una figura clara e indiscutible para sucederle. El t¨¢ndem que llev¨® el partido a reconquistar el poder en Galicia en 2009 y a revalidar mandato en octubre pasado seguir¨¢ moviendo los hilos de la organizaci¨®n. La figura de Rueda sale reforzada ya que retiene el puesto de n¨²mero dos del PP tras haber ascendido tambi¨¦n a la vicepresidencia de la Xunta.
La acumulaci¨®n de funciones de Rueda, sin embargo, se matizar¨¢ con la creaci¨®n de una nueva figura, un vicesecretario general ¨²nico ¡ªhasta ahora hab¨ªa cinco¡ª lo que parece indicar que habr¨¢ otra persona que se encargue de dirigir el aparato organizativo en el d¨ªa a d¨ªa. A este cargo se sumar¨¢ el de un portavoz, puesto que hasta ahora ocupaba Antonio Rodr¨ªguez Miranda, uno de los cinco vicesecretarios salientes. Para mantener una cierta intriga hasta el ¨²ltimo d¨ªa, con la que Feij¨®o parece disfrutar como se?al inequ¨ªvoca de su mando sobre el partido, las personas que ocupar¨¢n estos dos cargos no se anunciar¨¢n hasta hoy. Para el de portavoz la mejor situada es la diputada auton¨®mica Marta Rodr¨ªguez Arias.
Al margen de los nombramientos, que no supondr¨¢n grandes cambios en la estructura de poder del partido, la novedad del congreso ha sido el cuidadoso empe?o por situar en lugar preferente la figura de Fraga. Hubo un tiempo, cuando a¨²n era un meritorio en la oposici¨®n, en que Feij¨®o hac¨ªa lo posible por alejarse de la sombra del viejo patr¨®n, de quien lleg¨® a ser vicepresidente. Eran los d¨ªas en que el actual jefe del Gobierno gallego combat¨ªa contra el bipartito tratando de disipar la idea de que su oferta era una simple vuelta al pasado. La llegada al poder supuso tambi¨¦n una ruptura con la ret¨®rica galleguista de Fraga, visible en asuntos como el de la lengua.
En Lugo, su provincia natal, y cuando se cumple un a?o de su muerte, Fraga vuelve a ser una figura reivindicada, m¨¢s all¨¢ de su mera fotograf¨ªa. En los nuevos Estatutos ¡°se refuerzan" las apelaciones al galleguismo ¡°inspirado en la concepci¨®n que el presidente Fraga ten¨ªa de ¨¦l, es decir, un galleguismo cordial, integrador y no excluyente¡±, seg¨²n el secretario de organizaci¨®n, Alejandro G¨®mez. Sobre el papel, tambi¨¦n se insiste en conceptos fraguistas como el de ¡°autoidentificaci¨®n¡± e incluso se reforman los Estatutos para darle car¨¢cter oficial al compromiso de continuar con el legado de quien presidi¨® la Xunta durante casi 16 a?os.
Los documentos del congreso apuestan por conservar las diputaciones ¡°con un papel de primer orden¡± y fomentar ¡°las fusiones municipales voluntarias¡±. Adem¨¢s, el PP propugna el mantenimiento de los servicios sociales p¨²blicos y la libre elecci¨®n de m¨¦dico y de centro escolar.
Por si alguien olvid¨® a Zapatero
No pudo escapar la apertura del congreso a la conmoci¨®n por el caso B¨¢rcenas. Si el d¨ªa ya era fr¨ªo y tambi¨¦n el lugar del c¨®nclave ¡ªel recinto ferial de Lugo¡ª tampoco entre los militantes se apreciaba demasiado calor. A ellos, en un acto un tanto desangelado, en una tarima instalada en el vest¨ªbulo, se dirigi¨® la secretaria general, Mar¨ªa Dolores de Cospedal, para lanzarles el mensaje ¡°tranquilizador¡± de que el PP ser¨¢ contundente para demostrar la honradez de los miembros de su direcci¨®n.
Cospedal era la enviada de G¨¦nova, una vez que Mariano Rajoy volvi¨® a dejar solo a Feij¨®o, como tantas veces en los ¨²ltimos meses, y prefiri¨® irse a Almer¨ªa a la convenci¨®n interparlamentaria del PP. Y eso que la secretaria general volvi¨® a reivindicar al presidente gallego como una gu¨ªa para el actual Gobierno de Espa?a. Es m¨¢s, compar¨® la situaci¨®n en que Feij¨®o lleg¨® al poder en la Xunta con la que se ha encontrado Rajoy en el Ejecutivo central.
A la n¨²mero dos del partido parece que no le resultan suficientes las alusiones constantes del PP a la herencia de Zapatero. Tanto que ayer se quej¨® de que ¡°algunos parecen haberse olvidado de qui¨¦n gobernaba en Espa?a hace un a?o¡±. A ese legado ¡°emponzo?ado¡± atribuy¨® Cospedal la cr¨ªtica situaci¨®n econ¨®mica del pa¨ªs, incluida la estafa de las preferentes, cuyas v¨ªctimas se manifestar¨¢n hoy ante el congreso. Claro que en Galicia, seg¨²n las tesis de la secretaria general del PP, Feij¨®o se encontr¨® hace cuatro a?os algo casi peor: un bipartito que dej¨® a Galicia ¡°al borde de la quiebra, con una situaci¨®n catastr¨®fica¡±.
Cospedal fue testigo del mensaje que poco antes le hab¨ªa dejado el n¨²mero dos de Nuevas Generaciones y presidente de la organizaci¨®n en Galicia, Javier Dorado, a la alcaldesa de Madrid, Ana Botella. ¡°Una sociedad sin j¨®venes no tiene futuro y un partido sin j¨®venes est¨¢ condenado al fracaso¡±, afirm¨® Dorado despu¨¦s de que Botella abogase por suprimir las ramas juveniles de las organizaciones pol¨ªticas.
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