El Parlamento llevar¨¢ a los tribunales al p¨²blico que cause des¨®rdenes

La presidenta de la C¨¢mara gallega, Pilar Rojo, ha consumado lo que la oposici¨®n tem¨ªa. La Mesa do Parlamento aprob¨® ayer solo con los votos del PP una propuesta de normas para blindar el hemiciclo de la expresi¨®n de descontento de los ciudadanos y castigar a aquellos que protagonicen protestas desde la tribuna. La regulaci¨®n, que Rojo se resisti¨® a desvelar hasta ayer, prev¨¦ que los asistentes a un pleno que sean expulsados ¡°por desorden¡± en la tribuna no puedan volver a formar parte del p¨²blico en el resto de la legislatura. Adem¨¢s, ¡°en el caso de alteracion del orden, los servicios de seguridad remitir¨¢n testimonio de los hechos a la Mesa para su traslado a la autoridad judicial¡±.

Los invitados a las sesiones parlamentarias no podr¨¢n exhibir ni pancartas ni mensajes reivindicativos. Y en caso de que un partido invite de forma reiterada a personas que conculquen estas normas, se quedar¨¢ sin posibilidad de volver a llevar p¨²blico durante, como m¨ªnimo, el tiempo equivalente a un periodo de sesiones. Las personas que vayan a ocupar la tribuna deber¨¢n firmar un compromiso de buen comportamiento o, en caso contrario, seguir¨¢n las intervenciones de los diputados confinados en una sala del grupo parlamentario que los invit¨®. Los partidos tienen de plazo hasta el mediod¨ªa de hoy para formular alegaciones al texto, que se aplicar¨¢ ya en el pleno de la pr¨®xima semana.

Las normas que Rojo implantar¨¢ de inmediato traspasan todas las l¨ªneas rojas marcadas por la oposici¨®n y que los partidos reiteraron unas horas antes de que la presidenta hiciera p¨²blica su propuesta. Solo el PP apoya estos criterios. ¡°El pleno del Parlamento no es el momento de expresar la disconformidad con una determinada pol¨ªtica¡±, afirm¨® ayer el portavoz popular, Pedro Puy.

PSdeG, AGE y BNG descartan que los altercados en los ¨²ltimos plenos provocados por las protestas de los afectados por las preferentes o de trabajadores desesperados por la falta de contratos en el naval obliguen a restringir las visitas ciudadanas y ven detr¨¢s de la alarma y preocupaci¨®n de la popular por el orden en la instituci¨®n una ¡°cortina de humo¡±. La oposici¨®n recuerda incidentes peores que los ocurridos en el ¨²ltimo mes. Francisco Jorquera, portavoz del BNG, rememor¨® c¨®mo en 2005, estando el PP en la oposici¨®n, alcaldes de este partido irrumpieron en la C¨¢mara en protesta por una decisi¨®n del bipartito y llegaron a proferir ¡°amenazas¡± a diputados. Xos¨¦ Manuel Beiras, de AGE, con una dilatada vida parlamentaria a sus espaldas, apunt¨® a la agresi¨®n que sufri¨® en 1991 la entonces diputada socialista Rosa Migu¨¦lez en la cafeter¨ªa del Parlamento de manos de Karina Falagan, una conocida militante del PP gallego, admiradora de Manuel Fraga y empresaria de la noche viguesa.

¡°No nos parecen positivas normas muy r¨ªgidas¡±, afirm¨® el portavoz del PSdeG, Abel Losada. ¡°No estamos dispuestos a convertir el Parlamento en un Estado policial¡±. AGE niega que los carteles o los gritos espor¨¢dicos desde la tribuna ¡°interrumpan el trabajo del Parlamento o coarten la libertad de los diputados¡± y pide que, en vez de ¡°criminalizar¡± a los ciudadanos, se transformen las instituciones para adaptarlas a la conflictividad social. El BNG considera ¡°inevitable¡± que la ¡°indignaci¨®n social¡± llegue a la tribuna del Parlamento, una circunstancia que ¡°no se resuelve poniendo m¨¢s normas¡±. ¡°Eso es echar gasolina al fuego¡±, advirti¨® Jorquera.