Vuelta a la realidad
El cuerpo humano se multiplica en las pantallas de la feria de videoarte Loop, que re¨²ne 44 galer¨ªas y 18 estrenos mundiales
Las im¨¢genes abstractas, que dominaron el panorama de la creaci¨®n audiovisual en los ¨²ltimos a?os, vuelven a dejar paso al realismo y m¨¢s concretamente al cuerpo humano en todas sus declinaciones. Lo demuestra la selecci¨®n de obras que se proyectan en la feria de videoarte Loop, que a lo largo de diez ediciones se ha consolidado como una plataforma aglutinadora capaz de dar el pulso de la situaci¨®n global del sector.
Un a?o m¨¢s, 44 habitaciones del Hotel Catalonia Ramblas de Barcelona han abierto sus puertas a otras tantas galer¨ªas (de las que s¨®lo siete son espa?olas), que presentan propuestas monogr¨¢ficas y han elegido este evento para presentar sus estrenos m¨¢s sonados. Entre las premi¨¨res, que este a?o son 18, destaca el ¨²ltimo trabajo de La Ribot, que ha rodado las reacciones del p¨²blico durante una de sus performances y la serie por entregas Los tres momentos que cambiaron el mundo de Adri¨¢n Melis, que con 1.800 euros es una de las piezas m¨¢s baratas de la feria. Resultan especialmente atractivas, tambi¨¦n las instalaciones con proyecciones sobre el tema del copyright, provocadoramente realizadas en PowerPoint, de Rub¨¦n Grillo, que por 3.000 euros incluyen hasta proyector.
Cuerpos, performances y m¨²sica cl¨¢sica se mezclan en varias obras. Entre la crueldad y la fragilidad, la belleza y la violencia Javier P¨¦rez pone en escena una bailarina, que ha customizado sus zapatillas de ballet con dos afilados cuchillos. El japon¨¦s Koki Tanaka ha reunido cinco pianistas y les ha pedido crear una composici¨®n juntos para estudiar los comportamientos creativos colectivos. El sosiego de su propuesta es diametralmente opuesto a la angustia del paname?o Jhafis Quintero, que abraz¨® el arte en la c¨¢rcel. Quintero, que como Tanaka representar¨¢ su pa¨ªs en la Bienal de Venecia, exhibe el quinto v¨ªdeo de una serie de 10, uno por cada a?o que pas¨® en la c¨¢rcel. El ser humano sigue siendo el protagonista aunque s¨®lo se vean sus manos en el v¨ªdeo de Glenda Le¨®n, representante de Cuba en Venecia, que va raspando con un cuchillito la tinta de un billete de 100 d¨®lares, para luego esnif¨¢rsela con una hoja de coca. En cambio son s¨®lo sombras los interpretes de la pieza de Anthony Goicolea, encerrados en unas tiendas de campa?a y rodeados de nieve como si fueran mu?equitos encerrados en una bola de cristal.
La experimentaci¨®n, menos abundante que en otras ediciones viene de la mano de tres grandes: Ignasi Aballi, Gary Hill y Harun Farocki. Aball¨ª ha rodado la proyecci¨®n de la pel¨ªcula del hombre que camina en una cuerda entre las Torres Gemelas, aunque nada es reconocible y s¨®lo se ven las mutaciones org¨¢nicas de una bola de luz que parece un astro. Convencido de que la experiencia con el LSD es la obra de arte por excelencia, Gary Hill realiza una acci¨®n en un espacio generado por ordenador, seg¨²n la composici¨®n molecular del ¨¢cido lis¨¦rgico, que ha utilizado tambi¨¦n para crear los asientos. Farocki en cambio propone una instalaci¨®n multipantalla donde deconstruye la historia la animaci¨®n digital a partir de los juegos m¨¢s conocidos. Es la obra m¨¢s cara de la feria, 40.000 euros, mientras que la gran mayor¨ªa se sit¨²an entre los 4.000 y los 6.000 euros.
Por primera vez Loop se abre al mundo a trav¨¦s de la plataforma virtual DoingDoing, que retransmitir¨¢ en tiempo real v¨ªa Internet lo m¨¢s destacado de la feria, a trav¨¦s de los relatos de sus visitantes profesionales: comisarios, artistas y directores de museos, que contestar¨¢n en directo a todas las preguntas que los internautas les quieran formular.
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